[ESTE ARTÍCULO CONTIENE SPOILERS DE LA REINA CARLOTA]
Había una vez, una reina de origen alemana que se acababa de casar con el rey de Inglaterra. Así arranca La reina Carlota: Una historia de los Bridgerton, el spin-off del universo de Los Bridgerton que ahonda en la juventud de la reina Carlota de Golda Rosheuvel, aquí interpretada también por India Amarteifio.
Centrada en el ascenso al poder de la soberana, esta precuela alejada de las novelas de Julia Quinn sigue la historia de cómo el matrimonio de la joven reina con el rey Jorge (Corey Mylchreest) desembocó en una gran historia de amor, pero también provocó un cambio social determinante, creando el mundo de 'Ton'.
En sus seis episodios, acompañamos a la protagonistas tras contraer matrimonio con Jorge, un rey apuesto y aparentemente encantador que, sin embargo, desde la noche de bodas se aleja de su esposa. La protagonista se culpa de alejar al rey y no termina de entender el aura misteriosa que envuelve a su marido.
Los espectadores pronto descubrimos que el monarca está enfermo y se somete a tortuosos (e infructuosos) tratamientos experimentales para curarse y poder estar con su esposa. Todo se precipita en el tercer episodio, cuando Carlota lo sorprende de noche, escribiendo en las paredes, confuso sobre su identidad. Acto seguido, huye al jardín, donde empieza a hablar al planeta Venus entre temblores y mareos.
Los fans de Los Bridgerton no están muy acostumbrados a ver al monarca en la serie original, pero durante la segunda temporada, conocieron al personaje en estado de confusión, pensando que la boda de Edwina Sharma (Charithra Chandran) era la suya, y supieron que su condición lo mantenía alejado de sus funciones de soberano.
La precuela finalmente explora cómo Jorge sufre algún tipo de enfermedad que deterioran su relación con Carlota desde el principio y le provocan síntomas de lo más variados, aunque la serie no diagnostica el tipo de dolencia.
¿Qué le pasa a Jorge? Ficción y realidad
En La reina Carlota: Una historia de los Bridgerton, varios médicos teorizan sobre el estado de salud del personaje, asegurando que Jorge tiene un "cerebelo inflamado" y necesita someterse a una operación, o afirmando que se trata de una dolencia en las piernas. El doctor Monro (Rob Maloney), quien finalmente lo trata, es quien sugiere que el monarca no está loco, sino que padece "una disociación de los nervios".
El resto de médicos descarta los métodos de Monro porque viene de Bethlem, un hospital psiquiátrico real que se ganó muy mala fama debido a sus tratamientos brutales, según recoge Bustle. En la serie de Netflix, Jorge se pone en manos de Monro y se somete a procedimientos que bien podemos calificar de brutales, desde baños con hielo en los que casi lo ahogan hasta torturas atado y amordazado en una silla.
Pese a que La reina Carlota adelanta que la trama no es una lección de historia, la serie se inspira en hechos reales y la enfermedad de Jorge está basada en la dolencia que padecía el rey Jorge III, en aquel momento diagnosticada como "locura". Golda Rosheuvel, la reina Carlota en su vejez, confirmó en una entrevista con Insider en 2020 que la serie se inspiró en la condición real del rey Jorge, por lo que su enfermedad puede ser una suma de estos trastornos.
Este monarca nació en 1738 y se convirtió en heredero al trono británico tras la muerte de su padre en 1751, sucediendo finalmente a su abuelo, Jorge II, en 1760, con tan solo 22 años.
Un año después, se casaría con Carlota de Mecklemburgo-Strelitz, en quien se inspira la protagonista de la serie, y ambos tendrían 15 hijos. Jorge III reinaría durante seis décadas hasta su muerte en 1820, pero, debido a su enfermedad, se alejaría de sus funciones en el trono muchos años antes. Carlota se convertiría en su representante legal y su hijo ejercería de regente.
Algunos de los síntomas de Jorge que vemos en la ficción, como los episodios de manía o la depresión, se inspiran así en el trastorno de Jorge III y sus "crisis nerviosas", 'diagnóstico' que encontramos en la página oficial de la Familia Real británica.
¿El rey Jorge estaba loco? Principales teorías
En cuanto a las especulaciones sobre la enfermedad que sufría, historiadores y profesionales médicos han apuntado a un desorden genético de la sangre llamado porfiria, pese a que la Royal College of Physicians ha puesto en duda esta conclusión.
Esta organización defiende que lo que tenía el monarca era un trastorno bipolar, conclusión a la que también llegaron investigadores de la Universidad de Londres. Al parecer (vía BBC), la correspondencia del rey contiene "características que hoy en día se ven en la escritura y los discursos de pacientes que experimentan la fase maníaca de enfermedades mentales como un trastorno bipolar".
Así, son muchas las teorías en torno al trastorno mental que podía sufrir este personaje histórico, con otros estudiosos afirmando que podría tratarse de demencia y algunos defendiendo que la condición del rey era consecuencia de la medicación que tomaba y los tratamientos a los que se sometía, cuyas consecuencias también vemos en la serie.
Asimismo, muchas investigaciones han concluido que la gran mayoría de sus crisis se dieron tras momentos de agitación en el seno de la familia, como la muerte prematura de su hija, la princesa Amelia, por tuberculosis.
Al inspirarse en Jorge III y su trastorno sin diagnosticar, es comprensible que la serie haya optado por limitarse a plasmar los síntomas de la enfermedad mental que sufre el protagonista masculino de su historia, sin atreverse a ponerle un nombre a sus dolencias. Sin duda, La reina Carlota ha sabido contar una historia de amor tan adictiva como las de Los Bridgerton, pero con muchos más matices y guiños históricos.
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