Corría el año 1993 cuando un jovencísimo Ryan Gosling, de tan solo 13 años, lograba cumplir su sueño al hacerse con un autógrafo de una de las actrices hollywoodienses que más admiraba en ese momento. El primer autógrafo de su vida y uno de los recuerdos más bonitos que mantiene, como él mismo confesaba en su visita a The Late Show With Stephen Colbert.
"La primera persona a la que le pedí un autógrafo fue The Ultimate Warrior y él me respondió que no", señalaba Gosling, refiriéndose al luchador profesional estadounidense de la WWE. "Pero la segunda persona a la que se lo pedí y la primera que me lo dio fue la señora Angela Bassett", añadía.
El actor de Barbie y El especialista conseguía este autógrafo después de ver el biopic sobre Tina Turner de Brian Gibson, por el que Bassett fue nominada al Oscar a la mejor actriz protagonista. En ese mismo pase en un AMC Theatre, Gosling coincidió con ella en el vestíbulo e hizo uso de esa oportunidad de oro para hacerse con un recuerdo para la posterioridad.
Una actuación que marcó a Ryan Gosling
En los últimos años, la nominada a dos estatuillas doradas de Hollywood no ha dejado de triunfar en su aterrizaje en el Universo Cinematográfico de Marvel y sus trabajos para series como American Horror Story o 9-1-1, las cuales han hecho que siga incrementando su fama y popularidad entre las nuevas generaciones.
"Es una de las mejores actuaciones que he visto en mi vida", añadía Gosling sobre su trabajo en Tina. En otra entrevista para IMDb, el actor ya hablaba de lo "amable" y "dulce" que había sido con él al firmarle su entrada de cine.
En esta misma época, Gosling acababa de comenzar a trabajar The Mickey Mouse Club, donde veíamos cómo cantaba, bailaba y actuaba junto al resto de compañeros y que marcaba el futuro de una carrera en la que ya ha recibido tres nominaciones a los Oscar, la última este mismo año.
Recientemente, Gosling sorprendía al confesar que había decidido ser actor después de ver la película Retroceder nunca, rendirse jamás, de 1986. Un filme protagonizado por Bruce Lee, del que siempre se ha confesado uno de sus mayores seguidores.
"Bruce Lee se le aparecía al protagonista en su espejo y le enseñaba a pelear. Me encanta Bruce Lee y quería que mi vida fuera así", señalaba entonces el canadiense, quien en el pasado también se confesaba un gran seguidor de Sylvester de Stallone en filmes como Rocky y Acorralado. No es de extrañar pues que haya desarrollado un gran amor por el cine de acción y lo demuestre ahora en sus nuevos trabajos.
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