Es una discusión que a cada tanto asalta las redes sociales: ¿por qué parece que las películas de Hollywood cada vez son más largas? Y es una discusión que ocasionalmente llega a enfurecer a los propios directores.
Martin Scorsese, que de películas largas sabe un rato (largo), se sintió muy irritado cuando algunos cines decidieron interrumpir la proyección de Los asesinos de la luna para ofrecerle un descanso al público. Su última película duraba 206 minutos, y de cara a hacer la pausa no habían consultado al director. “Puedes sentarte delante de la tele y ver algo durante cinco horas, respeta un poco el cine”, replicó Scorsese.
Más allá de lo irrespetuoso que pudiera haber sido este gesto, que cada vez hay menos películas comerciales capaces de bajar de las dos horas es un clamor popular: un clamor popular que ahora tiene el aval de una encuesta. Talker Research, antes conocida como OnePoll US, ha realizado a lo largo del mes de abril una encuesta online a 2.000 estadounidenses, preguntándoles cuál creen que es la “duración ideal” para una película cualquiera. Un 15% sostuvo que 120 minutos eran aceptables, mientras que solo el 2% estaba contento con películas de más de 150 minutos. La duración ideal como tal era… 92 minutos.
Poco más de hora y media, un metraje habitual históricamente en Hollywood, salvo grandes excepciones, que sin embargo no parece respaldar la realidad industrial. Habiendo tan poca gente dispuesta a aceptar películas de más de dos horas y media, resulta que actualmente nueve de las 10 películas más taquilleras de todos los tiempos superan los 120 minutos.
Incluso tres llegan tan lejos como para extenderse a más de tres horas: hablamos de Vengadores: Endgame, Avatar: El sentido del agua y Titanic. Solo el remake de El rey león de 2019, en el puesto noveno, no llega a las dos horas con 118 minutos.
Las causas por las que las películas de hoy día duran tanto podrían remitir tanto a la necesidad de acumular grandes escenas de efectos especiales como a, en un espacio más determinado, el desdén por ajustarse a la rigidez de los horarios de sesiones que se puede permitir el streaming (para el que de hecho Scorsese rodó su película más larga, El irlandés, a cargo de Netflix).
Lo que sí es impepinable, según otro estudio de What to Watch, es que la duración media ha aumentado: en 2022 la media fue 141 minutos frente a los 110 minutos de 1981. La cuestión ahora es si el rechazo del público a esta tendencia llegará a surtir algún efecto en el desarrollo de estas películas tan desmesuradamente largas.
¿Quieres estar a la última de todas las novedades de cine y series? Apúntate a nuestra newsletter.
Comentarios