The King's Man: La primera misión (2021), de Matthew Vaughn

Nueva entrega de la saga Kingsman o King´s Man, otra vez con Matthew Vaughn como director, que sigue basándose en los cómics de Dave Gibbons y Mark Millar, aunque aquí hay una renovación completa de personajes y reparto, y es que la idea consiste en explicar cómo nacieron estos originales servicios secretos; por si cabía alguna duda, el título español nos aclara que la trama aborda su primera misión. Lo que más sorprende es que en el fondo estamos ante una cinta de aventuras con cierto sabor añejo, y aunque se conserva cierto sentido del humor disparatado, con curiosa reinterpretación de algunos hechos históricos, se deja de lado lo más grotesco y cínico de los anteriores filmes, Kingsman: Servicio secreto y Kingsman: El Círculo de Oro. Lo que quizá algunos vean como una traición al espíritu de esos títulos, aunque también cabe verlo como capacidad de riesgo y añoranza de los tiempos en que los valores e ideales resultaban más nítidos y atractivos.

Orlando, duque de Oxford, secunda una acción humanitaria de su esposa con la Cruz Roja durante la guerra de los bóeres en Sudáfrica. Una terrible desgracia, de la que es también testigo su hijo Conrad, un niño, le reafirma en sus convicciones pacifistas. Años después, una siniestra organización azuza al rey de Inglaterra, al káiser de Alemania y al zar de Rusia para conducirles a la Primera Guerra Mundial, lo que llevará a Orlando a crear un servicio secreto basado en criados y servicio doméstico de las grandes figuras del tablero político, en las que nadie se fija nunca. Pero su hijo Konrad, ya un joven aguerrido, piensa que la mejor forma de servir a su país y al mundo es alistarse en el ejército y luchar en las trincheras.

Llama en esta ocasión la espectacularidad del lienzo, de nuevo con asombrosos efectos visuales en el marco de la inmensa naturaleza, pero también en tremendos palacios. Están muy cuidadas las coreografías de las peleas, con un Rasputín que parece casi diabólico repartiendo leña, o la del líder de los villanos en lo alto de las montañas. Aunque resulta curioso y algo paradójico que tenga un tono crepuscular lo que se supone que es el inicio de una saga, con los cimientos artúricos de las organización King's Man al servicio de su majestad, los elementos conspiranoicos y el drama de servir en la guerra, en que se cuestiona el antiguo adagio latino “dulce et decorum est pro patria mori”. En el reparto sobresale sobre el resto Ralph Fiennes, que conjuga su tremenda clase interpretativa con esa mirada tan suya, del que está marcado por un trágico destino al que debe sobreponerse.