CULTURA
Asesino en serie

El caso Asunta: todos los escenarios posibles, entre la ambig�edad, el misterio y el terror

Candela Pe�a es la imagen irresistible de una serie basada en la construcci�n de hip�tesis contradictorias para el crimen de la ni�a Asunta Basterra

Candela Pe�a y Trist�n Ulloa, los padres protagonistas de la serie 'El caso Asunta'.
Candela Pe�a y Trist�n Ulloa, los padres protagonistas de la serie 'El caso Asunta'.
Actualizado

Ram�n Campos, el hombre detr�s de Fari�a y Velvet, ha abordado dos veces el caso de la ni�a Asunta Basterra. Primero lo hizo en una serie documental (Lo que la verdad esconde, en 2017) y ahora, en una de ficci�n. El caso Asunta se ha estrenado esta semana. La historia del asesinato de la ni�a Asunta y del juicio a sus padres adoptivos, acusados del crimen, era una de las grandes apuestas espa�olas de Netflix para esta temporada.

Hace unos meses, en la presentaci�n de contenidos de la plataforma, los periodistas pudimos ver un peque�o avance. La escena en la que Alfonso Basterra (Trist�n Ulloa) se enfrenta a la prensa por la calle, con una entereza que podr�a confundirse con frialdad que podr�a confundirse con... culpable. Peor lo tiene su ex mujer, Rosario, cuestionada por defecto y, al tiempo, perturbadoramente contradictoria. Un personaje extra��simo y quiz� inaceptable desde la ficci�n pura.

Pero El caso Asunta no lo es. Su Rosario es Candela Pe�a, que deja a un lado su enorme carisma de estrella c�mica y construye un personaje fascinante. Una mujer reconocible y opaca. La interpretaci�n de Pe�a, m�s que para contentar a sus numerosos fans (para eso est�n Maric�n perdido y La resistencia), sirve para recordarnos que es una de las mejores actrices de Espa�a.

Para saber m�s

Sin embargo, ser�a grosero reducir la serie s�lo a la sutil acrobacia de Candela. El caso Asunta est� llena de grandes trabajos actorales: desde Javier Guti�rrez, que defiende un personaje de lo m�s ingrato, hasta una Alicia Borrachero tan cre�ble que uno no sabe si la caracterizaci�n del personaje es m�nima o si, por el contrario, Alicia ha pasado horas en peluquer�a y maquillaje antes de empezar a rodar. Suyo (y de Francesc Orella) es el tramo final de El caso Asunta, el medi�tico juicio que conden� por asesinato a Alfonso Basterra y Rosario Porto. Ella, a�os despu�s, se suicid� en prisi�n. �l prometi� cumplir su sentencia �ntegra, a modo de reivindicaci�n extrema (�po�tica?) de su inocencia.

Hay muchas historias en El caso Asunta. La de Alfonso Basterra es, sin duda, la m�s interesante. En Lo que la verdad esconde, Ram�n Campos incorpor� la carta que el propio Basterra le envi� desde la c�rcel. La misiva era, como todo lo que rodea el caso, enigm�tica y macabra. Esa carta no est� en El caso Asunta (eso ser�a meta-meta-ficci�n) pero la serie s� explora la idea que la sustenta: el derecho a no hablar, a no contar, a no revelar, a no dar respuestas, es inalienable. La de Alfonso Basterra podr�a ser la historia de una derrota (el criminal cazado), de una rendici�n (el inocente acorralado) o de una promesa irrompible.

El caso Asunta es consciente de esta ambig�edad y, en su tramo final, juega con el espectador proponi�ndole escenarios distintos. Son tan veros�miles (una vez expuestas las piezas del caso, antes no) que cuesta entender qu� quiere hacer la serie exactamente con esa decisi�n narrativa. El caso Asunta sabe que su final real fue absolutamente cerrado (ambos sospechosos terminaron encarcelados) y completamente abierto (�qu� pas� realmente?). Campos y su equipo saben que no pueden dejar fuera de su serie los hechos y los datos que ya ordenaron en Lo que la verdad esconde. Tambi�n saben que las piezas perdidas en una ficci�n funcionan de manera distinta. Lo que la verdad esconde terminaba con la inesperada carta de Alfonso Basterra; El caso Asunta con la cara de Candela Pe�a expresando una emoci�n imposible de descifrar. Funciona.