El terror y la música siempre han ido de la mano, y no solo por las bandas sonoras de tus películas de género favoritas, sino por la influencia que el horror ha ejercido en diferentes artistas y géneros musicales. Desde el Horror punk también llamado horror rock o hardcore death con grupos como 45 Grave o The Misfits, a grupos de rock duro como Rob Zombie, Alice Cooper o Wednesday 13, el terror ha inundado los oídos y las mentes de los músicos y los fans. En España lo cierto es que no tenemos muchas referencias, por eso te voy a descubrir un nuevo grupo que sin duda pasara a formar parte de tu fonoteca del horror, El Chico de la Tumba.
El Chico de la Tumba nace del esfuerzo de un gran músico y amante del horror como es Rafa Quinto, bajista de Los Largos y otros interesantísimos proyectos musicales. Pero es con esta nueva aventura donde Rafa canaliza todo su amor por las películas de terror de serie B trasnochadas, la sangre, el vicio, el horror y la muerte, pero siempre desde una perspectiva muy pulp, con muchas ganas de diversión y divertir. Es además el paradigma de One Man Band, como el gran Ed Wood.
Su música huele a palomitas y cerveza fría, a autocines, a sesión doble de madrugada, a cine en blanco y negro y en Technicolor, a Jess Franco, a Fangoria, a Roger Corman, a Vincent Price, en definitiva es amor por el cine y sobre todo por la música, así en general y en particular. Y eso se nota en su sonido, en las maravillosas portadas y en las ganas de hacerlo aunque no tengas un duro. Como el mismo nos lo explica en su magnífica nota de prensa.
SUEÑOS EN LA CASA DE LA BRUJA
El Chico de la Tumba se materializa en estos duros tiempos donde la muerte se intuye, se huele, poniéndonos de frente ante nuestra propia mortalidad… sin bares!!! sin conciertos!!! sin ensayos!!!… con este panorama desolador como telón de fondo, se produce un empacho de visionado de películas de Horror, una relectura de viejos comics de terror y una escucha voraz frente a discos de distintas épocas y estilos.
Tras horas, días o quizá meses aparece la fiebre y nace algún tipo de inspiración. Comienzan a surgir canciones delante de una computadora, sintetizadores, una vieja caja de ritmos… y mucho whisky con hielo, únicos compañeros en este delirio sin retorno. Finalmente ve la luz «Últimos ritos de amor de la muerte » cual ópera a los tiempos que vivimos.
En sus canciones se pueden encontrar muchas influencias musicales: los 50´s (“La Náusea” es un revisionado del «Blue moon baby» de Dave Diddle Day), 60´s, mucho punk 70 y 80 como en «Están vivos», «La parada de los monstruos» o «Caminemos la noche» (revisionado del “where eagles dare” de los todo-amados Misfits), quizá psicodelia en «Lo roto» o «El jinete nocturno», algo de música urbana (hip hop????) en «Sueños de la casa de la bruja», “El asesino devenir” basura-metal que no sabes el cubo al cual arrojar… todo bajo el tamiz de kraftwerk, Maxthor, Aviador Dro.. y algo muy personal.
Tras varios conciertos y una fiebre ya permanente y cronificada, decide continuar con la grabación de un single en el cual se reafirma su amor por lo oculto, la amorfia espiritual y el animismo más allá de los confines; Nace INFESTACIÓN EP. Una Cara A con nombre homónimo que supura ectoplasma y cual “Pesadilla diabólica” su misión es regresar y regresar, en un eterno retorno . La Cara b es una oda al terror cósmico en clave de música disco. ¿Ves la pista? No resbales! BAILA a través de algo que suena desde un tiempo que parece infinito.
Señores promotores, festivales especializados por favor no dejéis escapar esta maravilla y contactar con El Chico de la Tumba, no hace falta una Ouija, solo el correo electrónico.
EL CORREO DE EL CHICO DE LA TUMBA
