Hace algunos años, a Valentín Iribarren sus amigos lo conocían como “el chico Valve”, por su fanatismo por los videojuegos desarrollados por la empresa creadora de Steam. Lo formaron títulos como Portal, Half-Life y más tarde Counter Strike, mítica obra a la que quedaría pegado por un buen tiempo y que, casi sin querer, lo llevaría a crear Dreamcore.
Básicamente, Valentín era un gamer más. Desconocía el desarrollo local, y sólo tuvo contacto con un evento nacional cuando fue a la Argentina Game Show 2021. Una cita que si bien tuvo una génesis super enfocada en el gaming más tradicional, cada vez tiene menos que ver con videojuegos y más con la escena vinculada al trap y los streamers influencers de grandes marcas.
Pero claro, su presencia en AGS no había sido casualidad. En pandemia se había lanzado a crear mapas para CS: GO y la experiencia lo había hecho sentir cómodo. Tal vez por eso llegó a conocer un evento más mainstream que, a pesar de la distancia, lo terminaría inspirando.
Dreamcore arrancó su desarrollo a mediados de 2022. “Me instale el Unreal Engine 5 de curioso, para ver de qué trataba. Soy autodidacta”, comenzó contándonos Valentín Iribarren, de apenas 21 años de edad. Y agrega al respecto: “Empecé mirando varios videos en YouTube y leyendo toda la documentación de su página oficial (la de Unreal). También me metí en muchísimos foros y servidores de Discord donde mucha gente me dio una mano increíble”.
Mientras tanto trabaja a tiempo completo, aprende un poco de música y hasta se animó a hacer su primera página web con un amigo. El talento y la capacidad de aprendizaje es evidente, y también el poco tiempo libre. “No soy de salir a bailar o ir a fiestas. Aunque me gusta juntarme con familiares y amigos”, se sincera Valentín.
Pero Dreamcore no sólo nace de su amor por Valve ni por los tres mapas que creó para CS: GO, sino de la creepypasta y The Backrooms. Esos espacios liminales que se popularizaron mucho en Reddit y 4Chan allá por 2019, y que básicamente representaban laberintos interminable de oficinas y otros ambientes generados aleatoriamente. Una estética que bien podríamos emparentar a The Stanley Parable, videojuego independiente del que casualmente también es fanático Valentín.
El inception ya se había generado de antes, pero él todavía no lo sabía. “Nunca dejé de pensar como seria la experiencia ideal con estos entornos, y como esa psicología que te transmitían las imágenes podrían lograrse en un juego. Y fue el año pasado que me agarro el golpe de inspiración y me animé a hacerlo por mi cuenta y a implementar esas ideas que venia teniendo desde 2020″, nos contó el joven Iribarren.
Actualmente, Dreamcore lleva poco más de un año en desarrollo. Y si bien Valentín lo está haciendo casi completamente solo, no quiso dejar de remarcarnos el trabajo de su amigo Matías en cada sonido del juego, y de Facundo en el papel de creador de la página web y consultor. “No hizo nada del juego como tal pero me ayudó muchísimo con consejos. Si no fuera por muchas de sus ideas Dreamcore no sería lo que es hoy”, detalló.
El videojuego de exploración y puzzles en primera persona en espacios liminales, más grandes tonos oníricos y de terror, tiene una demo disponible en Steam y será uno de los títulos argentinos presentes en la próxima EVA 2023. Por lo que veremos cómo cala en el público presente esta obra que, al igual que otras desarrolladas en Unreal Engine 5 en la actualidad, apuesta a la vista de body-cam y sorprende con un filtro VHS que potencia todas sus cualidades.
¿Cuándo sale al mercado?
Siendo la primera experiencia del desarrollador, uno pensaría que habría que tenerle paciencia o que tal vez nunca llegue al mercado. Sin embargo, Valentín Iribarren estima dos años más de trabajo y no descarta ir lanzando los mapas por separado a medida que estén listos. “Mi idea es hacerlos ridículamente grandes”, sentenció.
Por el momento, Dreamcore está pensado solo para llegar a PC, pero de aparecer un publisher en el camino deberíamos sumar las consolas a la lista de plataformas.