buena variedad de carnes, el jabalí es una buena opción, variedad de ensaladas, mariscos y postres. Sólo los bebestibles se pagan aparte. Si bien la atención es muy cordial, a veces debes llamar a los meseros para que te lleven carne adicional.
Se entiende que haya bajado un poco luego del incendió, pero ha ido retomando su nivel.

He ido dos veces a este local, la primera para la celebración de un cumpleaños un día sabado y el segundo para un día de la semana a ver un partido. Las dos veces me la he pasado bien. Este lugar los días viernes y sabado es de mucha concurrencia y se debe HACER RESERVA varios días antes. Funciona como tenedor libre con especialidad en las carnes a la parrilla, muy ricas y sabrosas, además tienen ensaladas, guarniciones o acompañamientos y postres (no son la gran cosa), pero la carne es el fuerte. Luego de las 12 se retira la comida y queda un karaoke y posteriormente se arma el baile. El patio trasero tiene bancas para quienes necesiten salir a fumar y taca taca.
Es un lugar que encuentro agradable, el personal es muy simpatico y amable.
El valor de la entrada es el tenedor libre, los bebestibles se cancelan a parte.
Lo divertido es que te cantan el cumpleaños feliz en grupo, en español y portugues.

había solo variedad de ensaladas, habia algo de marisco pero estaban desabridos, la carne de vacuno estaba muy cruda y algunas estaban duras...
En el lugar donde estábamos no había aire y estaba caluroso y los postres había muy poca variedad, nada fuera de lo común... en realidad algo muy normal

El lugar es grande muy bien climatizado (fuimos en verano), bastantes ensaladas para elegir, las carnes estaban bien y muy buena atención de los mozos (destacable).

Fuimos a Porto Alegre ese ultimo fin de semana y lo que puedo decir es que fue una total decepción. Somos brasileiros y lo que podemos decir es que de brasileiros solo están los meseros.
La feijoada no era feijoada pero si un arroz con porotos negros y nada mas. No tenia farofa y tampoco "couve", lo que fácilmente aquí se pueden sustituir por hojas de bróculis o acelga.
Los postres estaban pésimos, hasta parecía que son de estos de cajita que los venden en el mercado.
La carne, si había no nos contaron porque solo pasaran como 4 veces en mas de hora que quedamos en el local hasta que decidimos irnos. Ademas era pésima, el asado de tira quemado (vino por 2 veces), el costillar de cerdo era pura grasa y lo único que se salvo fue la longaniza.

Por lo menos mi ginger ale y la coca cola estaban heladas.
Los meseros también son cordiales pero de nada ayuda si la comida es pésima.

No recomiendo para nada, hay opciones mejores en Santiago, en la Av. Chile-España.