Parkour, el arte del desplazamiento

El parkour, disciplina en alza y altamente ligada a Calistenia, fue creado a mediados de los años 90 en Francia por David Belle y un grupo de amigos; se inspira en el “Método Natural” que desarrolló Georges Hébert, y se trata de un entrenamiento de fuerza, agilidad y velocidad natural basado en los indígenas africanos.

Hoy en día hay cada vez más adeptos, practicándose en Europa, América, España y distintas regiones de Asia.

Pero, ¿qué es el parkour?

El parkour es el arte del desplazamiento. Es decir, se trata de poder desplazarse libremente en cualquier tipo de entorno (ya sea natural o urbano) usando como medio el propio cuerpo.

Se busca que mediante movimientos naturales y adaptativos uno mismo pueda sortear los diferentes obstáculos que se pueda encontrar por el camino, ya sea  una valla, un muro, un río o un tronco por citar algunos ejemplos.

El fin último del parkour es que quien lo practique acabe siendo una persona útil para la sociedad en el plano físico y mental, de forma que acabe teniendo la suficiente fortaleza de ser capaz de responder a situaciones de emergencia de una forma eficaz y rápida.

Y a diferencia de lo que pueda parecerle al ojo inexperto, practicar parkour no es sinónimo de hacer movimientos arriesgados donde el practicante se ponga en peligro. Desde esta disciplina se promueve la unión del cuerpo y la mente de una forma muy particular. Así, uno aceptará sus propios desafíos según cómo se va de preparado físicamente y concienciado mentalmente, y siempre de forma segura.

Esto es lo que hace que el parkour sea apto para cualquier tipo de persona, ya que cada uno trabaja dentro de sus posibilidades.

¿Dónde y cómo se practica el parkour?

Se puede practicar tanto en un ambiente natural o arquitectónico, lo importante por supuesto es que haya obstáculos.

Además de que se puede practicar en cualquier parte, otro punto a favor del parkour es que al igual que ocurre con la Calistenia, no hace falta ningún tipo de equipamiento especial. Basta con un calzado cómodo, una vestimenta flexible que permita una buena movilidad y las ganas de practicarlo. Así, es muy apto para personas que no quieren o pueden aferrarse a un horario rígido de gimnasio, ya que se puede practicar cuándo y dónde uno quiera y además sale muy rentable ya que no hay que hacer inversiones de dinero en equipamiento.

Lo que sí es muy importante cuando uno se va a iniciar en el parkour es que debe saber que los entrenamientos deben ser progresivos y seguros. Es un deporte que conlleva riesgos, y que si no se hace con debida preparación física y mental puede llevar a graves lesiones. Así, uno no puede ponerse directamente a practicar por ejemplo saltos, sino que antes de nada debe comenzar por dominar los ejercicios básicos como son las sentadillas, flexiones o dominadas, y a partir de ahí ir progresando en los ejercicios específicos desde su nivel más básico al más complejo.

Consejos para comenzar de cero con Parkour

Hay unos cuantos consejos que pueden ayudar a dar los primeros pasos por el parkour:

• Contacta con un experto de parkour: él sabrá cómo ayudarte con tus primeros ejercicios.
• Únete a un grupo de parkour o créalo: esto reducirá el riesgo de desmotivaciones y además es muy útil para el apoyo y aprender unos de otros.
• No trates de competir: el parkour no es nada competitivo, es mejor alejar las comparaciones que solo puede llevar a arriesgar más de lo necesario.
• Tómatelo con calma: no por atreverte a practicar movimientos para los que no estás preparado vas a aprender más rápido. Hay que tener muy claro qué riesgos puede correr cada uno según su capacidad física y mental.
• Sé paciente: es muy normal fallar, pero no hay que desesperar, pues se aprende de los errores.
• Respeta el entorno: es muy importante no deteriorar el lugar donde se va a entrenar y conocer los límites del entorno. Y sobre todo, respétate a ti mismo y a los demás.

Motivación de Parkour