Padova (Padua en español)) situada en el corazón del Véneto en Italia, es reconocida principalmente por su rica historia académica, destacando la enseñanza del ilustre Galileo Galilei. Fundada en 1222, su universidad es la segunda más antigua de Italia, ganándose un prestigio europeo.
Actualmente, Padua sigue siendo un vital núcleo educativo, atrayendo a miles de estudiantes a sus destacadas facultades de medicina, derecho, ingeniería, física y veterinaria, entre otras, con un enfoque especial en las ciencias, sin dejar de lado las humanidades.
Además, Padua brilla como epicentro cultural, albergando museos, iglesias y vestigios antiguos, complementados por un dinámico sector industrial y un extenso recinto ferial.
A pesar de las guerras que interesaron a Padua en los siglos, y de las consiguientes renovaciones, la ciudad conserva la estructura urbana del pasado: estrechas calles con pórticos en la zona central, plazas monumentales, grandes palacios cerca de simples edificios.
Padua es un importante centro religioso y de peregrinación gracias a la Basílica de San Antonio de Padua.
- La Basílica de San Antonio
- La Capilla de los Scrovegni
- El jardín Botánico universitario más antiguo del mundo
- Plaza del Duomo y la Catedral de Padua
- Baptisterio del Duomo
- El museo Cívico a los Ermitaños, y la iglesia
- Palacio Zuckermann
- El Palacio de la Razón
- Plaza de las Hierbas (Piazza delle Erbe)
- Plaza de la Fruta (Piazza della Frutta)
- El Palacio del Bo y la Universidad
- El Caffè Pedrocchi
- La Plaza de los Señores
- La Torre del Reloj en Piazza dei Signori
- El Prato della Valle
- Las murallas medievales
- Observatorio Astronómico La Specola
- Iglesia de Santa Giustina
- Museo Arqueológico de Padua
- Iglesia de San Nicolò
- Museo de Historia de la Medicina de Padua (MUSME)
- Donde alojarse en Padua – Mejores hoteles y apartamentos
- Cómo llegar a Padua – en tren, autobus, coche o avion
- Ciudades cercanas que visitar
Veamos las principales atracciones que ver en Padua y las mejores actividades que hacer:
1.- La Basílica de San Antonio
La Basílica de San Antonio es una de las iglesias más importantes de la ciudad, de hecho Padua es famosa en todo el mundo porque aquí se encuentra la tumba de San Antonio. La tumba está ubicada en una de las capillas de esta maravillosa iglesia.
Los paduanos se refieren a la Basílica como la «morada del Santo», ya que Sant’Antonio es el Patrón y Protector de la ciudad de Padua.
La Basílica es un derroche de diferentes estilos arquitectónicos, desde el románico al gótico, que conviven bien entre sí. El interior conserva las reliquias de Sant’Antonio (en vitrinas especiales, visibles al público) y cuenta con la presencia de siete capillas y un deambulatorio, de estilo gótico. Los fabulosos frescos en el interior y el monumento ecuestre a la Gattamelata de Donatello en el exterior completan el trabajo.
Una de las capillas más visitadas es la de las Reliquias, donde se encuentran la lengua, el mentón y el aparato vocal del Santo, perfectamente conservados incluso después de muchos años de enterramiento. La otra capilla muy significativa es la de la «Madonna Mora», perteneciente a la antigua iglesia de Santa Maria Mater Domini, donde la santa celebró la Misa, predicó, confesó y se reunió en oración.
Para saber más sobre la iglesia, no dejes de leer nuestro post “La basilica de San Antonio en Padua” y ver también el post fotográfico “Fotos de la Basilica de San Antonio en Padua”
2.- La Capilla de los Scrovegni
En el corazón de Padua, la Capilla de los Scrovegni alberga un ciclo de frescos del siglo XIV tan excepcional que en 2021 la UNESCO lo declaró Patrimonio de la Humanidad. Estas obras, realizadas por Giotto, son consideradas una cumbre del arte occidental.
Encargada por Enrico degli Scrovegni, en la capilla que servía tanto de oratorio como de mausoleo familiar.
Giotto, asistido por unos 40 colaboradores, creó este ciclo de frescos entre 1303 y 1305, empleando técnicas innovadoras para narrar las historias sagradas con un detalle y profundidad sin precedentes. Aunque la decoración detrás del altar no es obra suya, la capilla en su conjunto es un testimonio del esplendor de la época y del talento incomparable de Giotto.
Tenemos un post dedicado que les aconsejo leer si desean saber más: Visitar la Capilla de los Scrovegni en Padua.
3.- El jardín Botánico universitario más antiguo del mundo
El Jardín Botánico de Padua, fundado en 1545, es el más antiguo del mundo y el único que aún se encuentra en su ubicación original. Galardonado con el título de Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1997, el Jardín Botánico, actualmente anexado a la Universidad de Padua, alberga alrededor de 7.000 especies de plantas y también tiene un Jardín de la Biodiversidad, inaugurado en 2014.
La entrada cuesta 10 euros, pueden visitarlo en un par de horas si desean observar con atención y disfrutar los colores, olores y sonidos del jardín.
Pueden distinguir 5 ambientes: matorral mediterráneo, la roca alpina, el ambiente de agua dulce cuyas piscinas son alimentadas por una fuente termal, plantas suculentas, el invernadero de orquídeas tropicales.
El Jardín Botánico también cuenta con una Biblioteca, establecida en 1835, y un Museo Botánico, nacido el mismo año que el Herbario: ambos se pueden visitar con motivo de los eventos más importantes.
La planta más antigua del Jardín Botánico data de 1585 y es la palma de San Pietro, conocida como Palma de Goethe porque en 1786 inspiró al escritor alemán una teoría sobre la metamorfosis de las plantas.
El Jardín Botánico se ubica cerca del Prato della Valle y la Basílica de San Antonio. Hermoso durante la primavera y el otoño!, con colores realmente especiales.
4.- Plaza del Duomo y la Catedral de Padua
La Plaza Duomo de Padua es una de las plazas centrales y más conocidas de la ciudad. La plaza se presenta amplia, con las estructuras de la Catedral, y del baptisterio de San Juan Baptista resaltando sobre el resto de los edificios, son de estilo románico y remontan al siglo XI.
La Catedral está dedicada a Santa Maria Assunta y fue construida a partir de 1522 en un proyecto de Michelangelo Buonarroti, pero fue terminada sólo en 1754 por el arquitecto veneciano Girolamo Frigimelica. Se caracteriza por una fachada incompleta, sobre la que se abren tres portales.
El Duomo actual, un proyecto que abarcó desde el siglo XVI hasta el XVIII, se erige sobre antiguos cimientos religiosos, incluyendo una catedral paleocristiana. Aunque Michelangelo ganó el concurso para su diseño, fueron Andrea da Valle y Agostino Righetti quienes realmente dieron vida al proyecto, con modificaciones sustanciales. Curiosamente, la gran fachada diseñada por Girolamo Frigimelica nunca se terminó y sufrió daños durante los bombardeos de 1917 y 1918.
El interior del Duomo es un museo en sí mismo, con obras de Stefano dall’Arzere, Pietro Damini, y más. No te pierdas el cenotafio de Francesco Petrarca, una figura icónica de Padua. La cripta guarda el altar de San Daniele, y el transetto de derecha, una icona que según la tradición, perteneció a Petrarca.
Bajo el Duomo, el subsuelo esconde mosaicos, restos de antiguos sacrificios paganos, y capiteles bizantinos dedicados a la Dea Fortuna, ahora en el Museo Eremitani.
5.- El Baptisterio del Duomo
Merece realmente la pena visitar es el baptisterio: aún siendo una estructura bastante pequeña, tiene una bellísima decoración a lo largo de toda su superficie, que se puede apreciar después de las recientes restauraciones.
Construido a finales del siglo XII y reconstruido en 1260, el Battistero se consagró en 1281. Su estructura cuadrada, coronada por una cúpula circular y una pequeña cúpula en el ábside, es un ejemplo magistral de la arquitectura románica.
Lo que hace verdaderamente único a este Battistero es su interior, adornado con un ciclo de frescos que Francesco da Carrara el Viejo y su esposa Fina Buzzaccarini encargaron a Giusto de’ Menabuoi. Realizadas entre 1375 y 1378, estas pinturas narran historias de la Genesi, el Apocalipsis y la vida de San Giovanni Battista, convirtiéndose en uno de los conjuntos pictóricos más espectaculares y mejor conservados del siglo XIV.
Con alrededor de cien escenas, el arte de Giusto de’ Menabuoi en el Battistero te sumerge en un viaje a través de la historia sagrada, mostrando la maestría y la devoción del arte medieval. Es una oportunidad única para admirar de cerca la habilidad y el fervor religioso que caracterizaban a la época.
La entrada al baptisterio cuesta 3 euros.
6.- El museo Cívico a los Ermitaños, y la iglesia
Este museo se estableció en lo que fue el convento de los padres ermitaños.
En este lugar es posible contemplar varias obras de renombre, incluyendo el Crucifijo de madera de Giotto, y una destacada selección de pinturas y esculturas, en particular, una extensa colección del arte véneta desde el siglo XIV hasta el XVIII, destacando trabajos de Giorgione, Bellini, Tiziano, Tintoretto, Veronese y Tiepolo, entre otros.
El primer piso alberga el Museo Arqueológico, y en los claustros se exhiben elementos arquitectónicos de la época románica.
Justo al lado del museo se sitúa la Iglesia de los Ermitaños, famosa por su impresionante techo de madera y las numerosas tumbas monumentales que contiene.
Desafortunadamente, un bombardeo en 1944 durante la Segunda Guerra Mundial devastó casi la totalidad de los valiosos frescos que se encontraban en ella.
Gracias a la restauración de la Capilla Ovetari, podemos apreciar la obra maestra del afamado pintor Andrea Mantegna.
7.- Palacio Zuckermann
El Palacio forma parte del complejo de los Museos Cívicos de Padua, accesible con el mismo boleto que permite entrar a la Capilla de los Scrovegni y al Museo de los Ermitaños.
Situado justo al otro lado de la calle respecto a los demás, actúa como una extensión del edificio principal de los Museos. En su interior, se albergan las Colecciones de Artes Aplicadas y Decorativas, que incluyen desde joyas, bronces y cerámicas hasta muebles, entre otras piezas.
En el primer piso se encuentra la Colección Bottacin, conocida especialmente por su vasta muestra de monedas que abarca desde la antigüedad greco-romana hasta la actualidad.
8.- El Palacio de la Razón
El Palacio de la Razón se sitúa entre las dos plazas más importantes de Padua: Plaza de la Fruta (Piazza della Frutta) y Plaza de las Hierbas (Piazza delle Erbe). Ambas plazas están llenas de diversas tiendas, cafeterías y restaurantes (convirtiéndose en el punto de encuentro predilecto para los aperitivos vespertinos de los estudiantes) y los sábados también albergan mercadillos con fruta, verdura, productos típicos locales.
Construido en 1218 por la autoridad municipal, el palacio se destinó principalmente a albergar el tribunal.
Con el tiempo, se añadió su icónica cubierta que recuerda el casco de un barco. El nivel superior, denominado «El Salón», alberga un amplio y único espacio, considerado uno de los salones suspendidos más grandes a nivel mundial, con dimensiones de 81×27 metros.
Los muros están adornados con frescos que representan motivos astronómicos y sagrados; en su parte central se mantiene una escultura monumental de un caballo de madera del siglo XV.
9. Plaza de las Hierbas (Piazza delle Erbe)
Antiguamente conocida como «Della Biada» y luego «Del Vino», esta plaza ha sido testigo del comercio de mercancías diversas, desde verduras y granos hasta hierro trabajado y materiales menos valorados bajo sus icónicos pórticos.
Plaza delle Erbe fue el punto final de la Corsa del Palio, donde el ganador recibía un drappo de seda, y los siguientes, curiosamente, una oca y una civetta, respectivamente.
Desde 1838, desde la balconada del Palazzo della Ragione se sorteaban los números del Lotto, una tradición que incluso llevó a las monjas del Monastero anexo a la Chiesa di S. Pietro a ganar una considerable suma en 1734.
En ella pueden admirar el Palazzo del Podestà del siglo XVI y una adición del siglo XX que incluye una representación marmórea de Padua, marcando las 912 bombas caídas durante la Primera Guerra Mundial. La plaza sigue siendo el escenario de uno de los mercados al aire libre más pintorescos de la ciudad, manteniendo viva la tradición comercial que ha caracterizado este espacio por siglos.
No te pierdas la gran meridiana en la fachada sur, y, el Palazzo delle Debite, que reemplazó al antiguo edificio de la prisión conectado por un puente al Palazzo della Ragione.
Y en el corazón de la plaza, la colorida fuente de 1930 rodeada por bancas de flores que adornan la piazza cada mañana.
Además hay muchos locales, bares, restaurantes, tiendas, ideal para un apertivo, un rico desayuno o una cena animada. Durante todo el día y el año, esta plaza representa lo mejor de la vida diaria de PAdua, y por ello es una de mis preferidas.
10. Plaza de la Fruta (Piazza della Frutta)
Piazza della Frutta, un lugar que ha sido el epicentro comercial de la ciudad desde tiempos remotos. Antaño conocida tanto por «Della Biada» como por «Del Vino» debido a los mercados que allí se celebraban, esta plaza rebosa historia en cada rincón.
Es la hermana «gemella» de la Plaza delle Erbe, ya que se ubica justo al otro lado del Palacio della Ragione, así que dependiendo de que lado están, visitarán una o la otra. Ambas representan el corazón de Padova, y desbordan de alegría y vida.
La plaza está dominada por el imponente Palazzo della Ragione y la Torre degli Anziani, y es célebre por la Colonna del Peronio, un punto focal de encuentros y comercio.
La plaza ha sido testigo de incontables historias y tradiciones. Aquí se celebraba la Corsa del Palio, y durante el «zoba masa», el primer jueves de mayo, tenía lugar el espectáculo del albero della cuccagna. Además, alberga algunas de las boticas y pastelerías más antiguas de Padua, como la histórica hierbería «Ai due catini d’oro».
El Peronio, una columna medieval que probablemente servía de soporte para carpas comerciales, se erige en el centro de la plaza, simbolizando la rica historia comercial de Padua. Tras un período en Prato della Valle, la columna fue restaurada a su ubicación original en la década de 1990, completando así el vínculo entre el pasado y el presente de la plaza.
Hoy, Piazza della Frutta sigue siendo un vibrante mercado al aire libre, donde los «scariolanti» despliegan sus coloridas mercancías, continuando la tradición comercial de la plaza. Además de explorar los puestos del mercado, no te pierdas la oportunidad de admirar los edificios históricos que la rodean y sumergirte en la atmósfera única que solo un lugar con tanta historia puede ofrecer.
11.- Palacio del Bo
Fundada en 1222, la Universidad de Padua es una de las más antiguas del mundo. Originalmente, no tenía una sede fija y las clases se impartían en casas privadas.
La necesidad de un espacio dedicado llevó a la elección del Hospitium Bovis en el siglo XVI, dando origen al actual Palazzo Bo.
¿Sabías que? El nombre «Bo» viene del buey, y un tesoro oculto del lugar es el teschio di un bue (cráneo de buey) incluido en el escudo de la universidad.
¿Qué Ver en Palacio Bo?
- La Sala dei Quaranta: Famosa por los 40 retratos de estudiantes extranjeros ilustres, incluye la histórica cátedra de Galileo Galilei.
- El Teatro Anatomico: Establecido en 1594, es el más antiguo teatro anatomico aún conservado, donde las autopsias eran enseñadas a los estudiantes de medicina.
- El Aula Magna y el Aula de Medicina: Salas históricas que siguen en uso hoy en día, donde se destaca la influencia del arquitecto Gio Ponti en su diseño.
- El antiguo patio: Con su logia doble decorada con los escudos de armas de antiguos rectores y consejeros, remonta a los visitantes al período entre 1592 y 1688.
Palazzo Bo se puede visitar mediante una visita guiada, que dura aproximadamente 1 hora. Es una oportunidad única para explorar la rica historia universitaria y sus fascinantes rincones.
Entradas: Tienen un costo de 7€ y se pueden adquirir tanto en la taquilla como en línea.
Ubicación: Situado en Via VIII Febbraio 2, en el corazón del centro histórico de Padua, cerca del famoso Caffé Pedrocchi.
Dos datos dignos de nota: Elena Lucrezia Cornaro Piscopia, la primera mujer en el mundo en recibir un título universitario, se graduó aquí en filosofía en 1678. Mientras que Galileo Galilei, quien enseñó durante 18 años en Padua (desde 1592 a 1610), dijo que fueron los mejores años de su vida.
En esta sede suelen celebrarse las proclamaciones de las licenciaturas de todas las universidades de la ciudad, así que el complejo está siempre lleno de gente (y podéis aprovechar de estas ocasiones para dar una ojeada a la estructura, en las salas que se encuentran abiertas 😉 ).
12.- Caffè Pedrocchi
El Caffè Pedrocchi se halla en el corazón de la ciudad, a pocos pasos del Palacio del Bo.
Reconocido mundialmente, sus espacios suelen albergar exposiciones, eventos significativos y lanzamientos.
El edificio, de un antiguo estilo neoclásico, data de 1831 y se levanta donde previamente había una taberna de café. Operaba las 24 horas hasta 1916, razón por la cual se le apodaba el “Café sin puertas”, y era el punto de reunión favorito de intelectuales, académicos, estudiantes y políticos.
El significado histórico de este sitio también se vincula a un acontecimiento relevante: en 1848, un estudiante de la universidad resultó herido dentro del café, desencadenando una de las revueltas propias de la era del «Risorgimento Italiano».
Esto ha dado pie a una peculiar creencia entre los estudiantes de Padua, quienes consideran que visitar el Café antes de graduarse les impedirá alcanzar su licenciatura.
Una de las cosas que amo hacer cada vez que visito Padua, es tomarme un rico café a la menta, un gusto particular, inolvidable. Se los recomiendo definitivamente. Pueden tomarlo en la barra o en una de las mesas.
13.- Plaza de los Señores
Piazza dei Signori, uno de los rincones más encantadores y llenos de vida de Padua. Este espacio, que alguna vez albergó el «Palazzo della Signoria», ha sido testigo de la evolución de la ciudad desde el dominio de los Carraresi hasta nuestros días.
Originalmente conocida por nombres que evocaban desolación y luego triunfos por las festividades que acogía, esta plaza ha sido un punto de encuentro, comercio y celebración a lo largo de los siglos.
La plaza, rodeada de edificios históricos y porticados, ha sido el escenario de eventos memorables, desde las justas y torneos medievales hasta la representación de la caza al toro en el Carnaval. Aquí también se celebró la peculiar «Corsa degli asini» en conmemoración de la victoria de los venecianos en 1509.
Entre los tesoros de la plaza, destaca la Iglesia de S. Clemente, un pequeño templo que data de 1190 y que se integra armoniosamente en el paisaje urbano. La plaza también es hogar del Palazzo del Capitanio, un imponente edificio que se levanta sobre los cimientos de la antigua residencia de los Carraresi y alberga la famosa Torre dell’Orologio.
14.- La Torre del Reloj en Piazza dei Signori
La Torre del Reloj, ubicada en Piazza dei Signori, alberga un impresionante reloj astronómico que muestra el mes, el día, la fase lunar y la posición astrológica. Su esfera de un intenso azul resalta sobre el fondo blanco de la torre, que divide el Palazzo Capitanio del Palazzo dei Camerlenghi, datando de la época en que la República de Venecia tomó control de Padua en 1405.
La Torre dell’Orologio de Padua es una maravilla arquitectónica y tecnológica del siglo XVI, que captura la esencia del Renacimiento italiano. En 1532, Giovanni Maria Falconetto fue el encargado de diseñar su nueva y definitiva fachada, inspirándose en los clásicos arcos triunfales y el gusto renacentista.
Con un imponente frente de piedra d’Istria, la torre se alza orgullosa, flanqueada por columnas dóricas y coronada por el majestuoso Leone di S. Marco. A sus lados, dos figuras de Vittorie Alate vigilan el paso del tiempo, mientras que dos figuras masculinas sostienen los escudos del podestà y del capitano de la época.
La torre, con sus elementos decorativos, inscripciones conmemorativas, y su reloj azul cielo salpicado de estrellas doradas, evoca el esplendor y la riqueza de la Repubblica Serenissima.
Esta torre medieval, que originalmente funcionaba como acceso fortificado por el este al Palacio Carrarese, adquirió su apariencia presente gracias a las reformas que empezaron en 1426 y finalizaron con la inauguración del reloj durante la celebración de Sant’Antonio en 1437.
Este ingenioso dispositivo, inspirado en el inventado por el médico y astrónomo Giovanni Dondi en 1344, sigue funcionando con su mecanismo original, un testamento viviente del ingenio humano y un legado de la historia de la tecnología que merece ser admirado.
Una peculiaridad de este reloj es la ausencia del signo zodiacal de Libra entre los adornos que lo decoran. La leyenda cuenta que esto fue un acto de represalia del constructor hacia sus comitentes, quienes presuntamente le pagaron menos de lo acordado, simbolizando la falta de justicia en su trato.
15.- Prato della Valle
Prato della Valle destaca como la plaza más amplia de la ciudad, posicionándose también entre las más extensas de Italia y Europa, ocupando un área de 88,620 metros cuadrados. Su diseño único le otorga un impresionante efecto visual. Debido a su vasto tamaño, es el escenario habitual de diversos eventos, especialmente conciertos.
La plaza de Prato della Valle es una zona exclusivamente peatonal, cuyo centro está embellecido por una fuente, rodeada de amplias áreas verdes y estatuas. Un canal rodea la isla central, que también posee una forma elíptica.
Ubicada a corta distancia de otras plazas importantes de la ciudad, Prato della Valle es fácilmente accesible a pie, permitiendo a los visitantes disfrutar de las diversas tiendas en sus alrededores. En una de sus esquinas se erige la Basílica de Santa Giustina.
Todos los sábados, la plaza se anima con un extenso mercado que se extiende siguiendo su característico diseño elíptico.
Además, muy próximos se hallan el Jardín Botánico (establecido por la Universidad de Medicina como un jardín de plantas medicinales, siendo el jardín botánico más antiguo del mundo destinado a fines educativos) y la basílica de San Antonio.
16.- Las murallas medievales
En distintos rincones de la ciudad todavía se pueden hallar vestigios de las murallas que en tiempos pasados rodeaban y salvaguardaban Padua. Las construcciones defensivas más antiguas datan de la época medieval y se situaban a lo largo del río Bacchiglione y los canales que delimitaban el núcleo romano original.
En los tiempos medievales, las imponentes murallas de Padua eran el orgullo de la ciudad, consideradas por muchos como invencibles y un símbolo de su floreciente cultura y prosperidad. Estas defensas, construidas primero por el Comune en el siglo XIII y luego expandidas por los Carraresi en el XIV conforme Padua crecía, junto con castillos y bastiones, dejaban a cualquier visitante boquiabierto.
Actualmente, solo se conservan fragmentos de estas y dos de las originales 19 puertas: Porta Altinate y Porta Molino.
Asimismo, merecen mención las murallas erigidas en el siglo XVI, una era de significativa transformación para Padua. Este sistema de fortificación, que se extendía por 11 kilómetros e incorporaba cerca de veinte bastiones aún en buen estado, incluía destacadas obras de valor artístico como la Puerta Venecia (también llamada Portello), Puerta San Juan y Puerta Savonarola.
Aunque de esa magnificencia hoy día queda poco —la mayoría de la estructura original fue reemplazada o desapareció con el tiempo—, aún se pueden encontrar vestigios de la muralla más antigua, testimonio de la grandeza pasada.
17.- Observatorio Astronómico La Specola
La Specola es un lugar único inicialmente diseñado para albergar una prisión, pero en el año 300 el señorío de los Carraresi lo transformó en una torre de vigilancia incorporándose al castillo de la ciudad de Castelvecchio.
Posteriormente tuvo un lento declive, hasta 1767 cuando se convirtió en un observatorio astronómico de excelencia y luego se convirtió en un cuerpo legal autónomo en 1923 y, a partir de 2002, un centro de investigación del Instituto Nacional de Astrofísica. En 1994 se transformó en un museo astronómico que brinda a los visitantes la oportunidad de admirar exposiciones de instrumentos antiguos.
El itinerario serpentea por el interior de la antigua torre, pasando por la Sala de Inscripciones, la Sala de la Columna, la Sala Meridiana y la Sala de las Figuras, donde es posible conocer los espacios frecuentados por grandes astrónomos del pasado. Dado que es necesario subir 200 escalones para acceder a él, el museo es inaccesible para personas con discapacidad y no recomendado para personas con problemas cardíacos o que sufran de vértigo.
18. Iglesia de Santa Giustina
En el corazón de Padua, justo al lado de Prato della Valle, se erige la imponente Basílica de Santa Giustina, un tesoro de la arquitectura que guarda las reliquias de Santa Giustina y San Lucas. Este lugar, posiblemente construido sobre un antiguo templo pagano, se fundó en el siglo V en honor a Giustina, una noble martirizada en el 304, convirtiéndose en el sitio de culto más antiguo y emblemático de Padua.
Con el paso de los siglos, especialmente después del terremoto de 1117, la basílica original fue reemplazada por la estructura actual entre 1532 y 1579, gracias a arquitectos como Andrea Moroni y Andrea da Valle. Aunque la fachada quedó inacabada, la basílica destaca por sus ocho cúpulas y un campanario que domina su vasta estructura.
Dentro, su interior renacentista, dividido en tres naves y bañado por la luz que filtran sus cúpulas, es una obra maestra que alberga tesoros como el Pozzo dei Martiri, el Sacello di S. Prosdocimo con sus mosaicos, y la Cappella di S. Luca. También se recuerda a Elena Lucrezia Cornaro Piscopia, la primera mujer graduada en el mundo, quien yace aquí.
El monasterio anexo, que alguna vez hospedó a figuras ilustres y papas, fue cerrado por Napoleón en 1810 pero restaurado como abadía en 1943. Hoy, sus claustros románicos y el riquísimo patrimonio de su biblioteca monástica, aunque mermado por la historia, siguen impresionando a visitantes y estudiosos.
19. Museo Arqueológico de Padua
20. Iglesia de San Nicolò
Situada en la acogedora Plaza de San Nicolò, un sitio que captura la esencia del Padua medieval y está rodeado por el Palacio Meschini y el Palacio Brunelli-Bonetti de estilo barroco, se encuentra la histórica Iglesia de San Nicolò.
Originalmente parte del complejo de la Reggia Carrarese, esta iglesia data del año 1088. No obstante, en trabajos de restauración realizados en 1973, se hallaron fundamentos mucho más antiguos. Desde el año 1178, cuando fue designada como una de las parroquias de la ciudad, existía un cementerio en lo que hoy es su atrio, lugar donde reposan los restos de numerosas familias patricias de Padua.
El acceso principal acompañado por un campanario de estilo románico, se erigió a finales del siglo XV, mostrando un característico diseño lombardo. El interior, organizado en varias naves y cubierto por bóvedas de crucería, fue objeto de una detallada restauración entre los años 1966 y 1971.
La capilla inicial a la derecha resguarda una obra titulada «Sant’Agnese en gloria». En lo que era la Capilla Bautismal, anteriormente con acceso independiente, destaca un bautisterio del siglo XVI.
Justo detrás, en el lugar de descanso final de la familia Forzaté, se encuentra un tríptico de madera del siglo XIV, de autoría anónima, representando a la Virgen y el Niño acompañados por San Santiago y San Leonardo.
El sarcófago exhibe en su parte central un diseño de ciervos en actitud de salto, símbolo distintivo de los Forzatè, detalle que aún adorna la fachada actualmente.
21. Museo de Historia de la Medicina de Padua (MUSME)
El MUSME, Museo de Historia de la Medicina, abierto el 5 de junio de 2015, es un museo moderno que narra el impresionante desarrollo de la medicina, desde sus orígenes antiguos hasta su estatus de ciencia contemporánea, utilizando tecnología de punta y permitiendo la interacción de los visitantes.
Combinando elementos de colecciones tradicionales con los de un centro de ciencia moderno, el MUSME capta la atención de todos, adaptando su recorrido a diferentes públicos. Para los niños, la historia se entrelaza con el juego y la experimentación, mientras que los adultos y académicos pueden profundizar en temas variados.
Gracias a las exposiciones temporales y su estrecha colaboración con la Universidad de Padua, el museo sigue renovándose, por ello les recomiendo una visita en vuestro próximo viaje a Padua.
El MUSME se ubica en un palacio del siglo XV, tiene sus propias historias de innovación. Originalmente fue el primer hospital de Padua, fundado en 1414, y en el siglo XVI, se convirtió en el lugar donde los estudiantes de medicina comenzaron a aprender prácticas clínicas directamente de los pacientes, marcando el inicio del enfoque didáctico moderno en medicina.
¿Dónde alojarse en Padua? Mejores hoteles
Es bastante fácil moverse en el centro histórico de Padua, pueden caminar o utilizar los medios de transporte, por ello indicativamente pueden elegir un hotel o apartamento en cualquier zona central y llegar a pie a las principales atracciones. Obviamente si visitan Padua en peregrinación la mejor zona donde dormir se ubica cerca la Basílica de San Antonio, seguida de la Catedral de Santa María Assunta. La estación de trenes de Padua queda un poco alejada del centro (relativamente), es una buena zona donde alojarse si se mueven en tren y llegan tarde de noche o parten temprano en la mañana, podrán dejar el equipaje rápidamente en el hotel y seguir vuestra visita por el centro. Como todas las estaciones de trenes es una zona bastante movimentada.
Veamos algunos entre los mejores hoteles, apartamentos donde alojarse en Padua:
- Hotel Casa Del Pellegrino 3 estrellas – Excelente ubicación a pocos pasos de la Basílica de San Antonio, ofrece habitaciones amplias con todos los servicios, para 2, 3, 4 y 5 personas. Buena relación calidad/precio.
- Hotel Donatello 3 estrellas – Excelente ubicación cerca de la Basílica de San Antonio, el antiguo Orto botánico, y de Prato de la Valle. Cómodas habitaciones, desayuno abundante.
- Palazzo Folchi – B&B pequeño y sencillo en las cercanías de la estación de trenes. Amplias habitaciones con una pequeña cocina, excelente para comer en «casa» y ahorrar.
- Isola Memmia b&b – B&B a conducción familiar, ubicado en el casco antiguo en la Plaza Prato della Valle. Habitaciones cómodas a buen precio.
- Más hoteles y apartamentos donde alojarse en Padua
Si desea saber más pueden ver nuestro post dedicado: ¿Dónde alojarse a Padua? Mejores hoteles y apartamentos.
Cómo llegar a Padua / Padova
Si se mueven en coche, pueden llegar a Padua a través de la autopista A4. Está muy bien señalizado en la autopista. Padua queda a una hora más o menos de Venecia.
Muy fácil es también llegar en tren, pues las líneas que conectan el norte-este de Italia (como las que llegan de Trieste o Venecia) al centro de la península (Bolonia-Florencia- Roma etcétera) siempre paran a Padua.
Se puede llegar también con muchas líneas de autobuses que paran en la estación Boschetti, cerca del centro de la ciudad.
Si desean saber más pueden leer nuestro post dedicado: Cómo llegar a Padua en tren, avión, coche y autobús. Cómo moverse y cómo llegar desde Milán, Venecia y Roma.
Ciudades cercanas que visitar
Si visitan Padua no se pierdan las interesantes ciudades que se encuentra en sus cercanías:
Belen dice
He estado en padua lo he visto y me ha parecido maravilloso ,una ciudad muy bonita ,muchísimo más de lo que me esperaba. Encantadora .volvería locamente allí.
tcalo dice
Belen: es cierto! es una ciudad muy bella. viene un poco ignorada, pero vale totalmente la pena!
saludos
t.
Daniel dice
Bellisima, elegante y culta . . . .
Reyes dice
Muy hermosa la cd y sus portales
Reyes dice
Volvería con mucho gusto.
NEUZA MARIA dice
Estive em Pádova em 2018 e fiquei maravilhada com a Basílica, a tumba de Santo António, a clausura, as relíquias e a cidade.
Tudo muito lindo, sobretudo a tumba branca do santo e, também, a chance de orar em contato com o túmulo. Fantástico momento de comunhão…
Fernando Trejo dice
Estuvimos en Padua el 11 de mayo del 2022.
La ciudad nos encantó.
La capilla Scrovagni es impresionante.
El Prato de la Valle es muy bonito.
El Palacio de la Razon parece un simple bodegón pero está lleno de murales impresionantes.
La Basílica de San Antonio preciosa.
UN día marvilloso para visitar esta ciudad tan pintoresca y llena de historia y cultura