La noticia de que Naomi Campbell se convirtiera en madre traspasó fronteras. Nadie se esperaba que la top model hubiera tenido un bebé después de que, pocas semanas antes de su nacimiento, esta acudiera a la Semana de la Moda de Nueva York sin ningún signo que levantara sospechas de embarazo. Lo que provocó muchas felicitaciones a la icono de la moda, pero también muchas críticas.
Naomi nunca aclaró nada respecto al tema, y aunque si que aseguró que es lo mejor que ha hecho en su vida, aún a día de hoy, dos años después de la sorprendente noticia, la top no ha aparecido ni posado públicamente junto a su pequeña. O al menos no hasta el día de ayer.
Con motivo de su 53 cumpleaños, Naomi se dirigía a la exclusiva fiesta que habían organizado para ella desde Boss mientras tenía lugar el emblemático Festival de Cannes. Evento en el que, por cierto, la modelo nos ha dejado estilismos tan impresionantes que han conseguido alzarla, como era de esperar, en una de las mejor vestidas de su alfombra roja.
La top no posó en ningún momento junto a su hija, mucho menos en el photocall del acto. Sin embargo, si que fue pillada llegando con la pequeña en brazos minutos antes de entrar a la fiesta. Una estampa enternecedora en la que, por primera vez, conocemos el rostro de la niña.
Aunque, al parecer, esto no debió de hacerle mucha gracia a la empresaria y supermodelo británica, ya que, a los pocos segundos de ver las cámaras, decidió ocultar la cara de la pequeña.
Aunque esto no valió para ocultar su estilismo, que por cierto iba completamente a juego con el de su progenitora. ¿Pueden ser más adorables?
La pequeña llevó un vestido corto dorado con falda amplia y unas medias blancas en contraste y Naomi, por su parte, un impresionante vestido largo a tono cubierto en su totalidad por brillos y lentejuelas y cantidad de plumas en la misma tonalidad en el bajo de la pieza. Dos propuestas maravillosas para aparecer juntas por primera vez.
