Ancelotti quiere premiar a Kepa... pero en función de la puesta a punto de Courtois

El Real Madrid acaricia LaLiga. Necesita ganar siete puntos -o que los pierda el Barcelona- para consagrarse campeón. Por ello, ante la cercanía de un nuevo título para sus vitrinas y las semifinales de la Champions League la semana que viene y la siguiente, ya se piensa en rotaciones y en dar rodaje a Courtois. Dar paso a futbolistas que hayan jugado menos y puedan reivindicarse a la vez que den un respiro a sus compañeros que más minutos acumulan en sus piernas.

Esas rotaciones llegarán hasta la portería. En el vestuario tienen muy claro que Kepa (29 años), suplente desde la Supercopa de España, merece despedirse del Real Madrid jugando. Según ha podido saber Relevo, Ancelotti premiará la gran actitud del vasco, quien, a pesar de las dificultades que ha atravesado, ha ayudado al grupo y se ha entrenado al máximo de sus posibilidades. Por ello, le dará alguno de los partidos de liga que quedan de aquí al final, y no se descarta que sea ya en San Sebastián el próximo viernes. Un gesto que respaldan los pesos pesados.

Aunque, según las palabras de Ancelotti en rueda de prensa previa al partido ante la Real Sociedad, el turno del vasco llegará en función de la puesta a punto de Courtois. "Tengo que pensar la alineación, porque algunos jugadores no han recuperado al 100%, y también en la portería. Courtois está bien y podría jugar contra el Cádiz", señaló el italiano.

La idea de tener con Kepa esa consideración ya rondó la cabeza de los técnicos contra el Mallorca. Se valoró la posibilidad de que Kepa jugase en Son Moix, pero se descartó debido al error de Lunin en el primer gol del City en el Bernabéu. Si bien todos conocen su frialdad, querían que recuperase sensaciones, además de evitar enturbiar el ambiente abriendo falsas quinielas respecto a la titularidad en la vuelta. Por ello, Ancelotti acabó decidiéndose por el ucraniano.

Como mejor ejemplo de su saber estar, la última semana. Primero, en el Etihad, donde ayudó a Lunin con los penaltis contra el City. La imagen icónica de los dos junto a Llopis preparando la tanda se recordará durante mucho tiempo. Después, en el Clásico, se le vio animoso desde la banda y, tras la victoria, celebrando con el resto de compañeros. Nunca se ha apartado del grupo, incluso en sus peores momentos.

Esto no altera el plan del club, que no piensa quedarse con Kepa en propiedad, por lo que deberá volver al Chelsea a final de curso. A partir de julio afrontará una situación complicada: en Londres no cuentan con él, pero le queda un año de contrato. Esta temporada, en la que apenas ha jugado 18 partidos, no le ayuda en su búsqueda de un nuevo destino. Además, sus opciones de acudir a la Eurocopa de Alemania se han esfumado cuando Luis de la Fuente contaba con él como uno de sus fijos.

Por otro lado, Thibaut Courtois (31 años). El belga todavía se entrena en solitario después de su operación de menisco, pero cada vez se encuentra mejor y Ancelotti espera su vuelta con el grupo pronto, quizás para Cádiz, antes del final de curso y que pueda jugar algún partido. Él, por el contrario, prefiere ser cauto y no se pone fechas. "Hay que ir poco a poco, no tengo prisa. No hay fecha de vuelta. Lunin lo está haciendo muy bien, por eso no hay prisa. Cuando me sienta bien ya veré cuándo puedo jugar", dijo para El Golazo de Gol a la salida de Valdebebas.

En Valdebebas saben lo importante que sería recuperar a Tibu lo antes posible. En la hoja de ruta estaba previsto que pudiese regresar para los cuartos contra el City, pero la desgraciada lesión de menisco lo descartó. Ahora, con más calma, pero las mismas ganas, todos esperan su vuelta. Por delante, un mes para que se ponga a tono. Su fecha límite, pese a las palabras de Ancelotti, es el 26 de mayo en la última jornada contra el Betis.

Otros futbolistas como Ceballos o Arda Güler, que apenas han contado a lo largo del año, podrán foguearse y demostrar que pueden aportar de cara al año que viene. Entrarán en las rotaciones de un técnico que, al tener gran parte del trabajo, puede manejar los onces con más margen. También, en una portería que fue un quebradero de cabeza en algún momento del año.