Final de una era en un Liverpool "devastado": sin Champions tras tres finales y un título

El Manchester United tenía una deuda pendiente y ayer fue saldada. El pasado 5 de marzo el Liverpool le endosó un 7-0 a los de Ten Hag en una de las mayores goleadas históricas entre estos dos equipos. Ayer el United se la devolvió y se tomó su particular 'vendetta' con su victoria ante el Chelsea, con la que dejó sin opciones de Champions a su eterno rival.

"Estamos felices de que el Liverpool no se clasifique", recordó Bruno Fernandes nada más acabar el partido. Este resultado fue la confirmación de un pronóstico ya esperado por el técnico alemán ("Para mí estaba claro que los otros equipos obtendrían ese punto") y deja al Liverpool sin participar en la máxima competición continental tras seis temporadas consecutivas.

Hasta la llegada del Klopp a mediados de la temporada 2015-2016, el conjunto 'red' navagaba por la Premier sin un rumbo sólido. A finales de la temporada 2016-17 logró clasificarse para la Champions en un hecho que terminó convirtiendo en costumbre. 

Los de Klopp lograron batir el récord del club clasificándose seis temporadas consecutivas para la máxima competición del fútbol europeo. En estas seis temporadas, el conjunto inglés ha llegado a tres finales, logrando levantar el título en 2019 en la final ante el Tottenham. Un trofeo que el club no ganaba desde hacía 14 años. Pero no habrá una séptima.

"Cometimos errores, no fuimos lo suficientemente consistentes" ha añadido el alemán en la rueda de prensa previa al último partido de liga. Y es que realmente, el Liverpool no ha ocupado en ningún momento de la temporada alguna de las cuatro plazas que dan acceso a la Champions. A pesar de ganar la Community Shield (Supercopa inglesa) ante el Manchester City, la temporada no empezó de la mejor manera, con solo diez puntos obtenidos en los ocho primeros partidos.

Es cierto que las lesiones han jugado un papel importante, sobre todo al inicio de la temporada. Pero exceptuando estos dos últimos meses, el juego del equipo ha sido irreconocible con respecto a otros años. La diferencia con la temporada pasada es abismal, ganaron la FA Cup y la Carabao Cup, llegaron a la final de Champions y disputaron el título de Premier hasta la última jornada. Este año cayeron en dieciseisavos en la FA Cup, y en octavos tanto en Champions como en la Carabao Cup. Y en la competición doméstica, el arreón final de los últimos meses les ha alcanzado para hacerse con la quinta plaza. El club trató de contrarrestar la marcha de Mané, invirtiendo generosamente en jugadores como Darwin y Gakpo, pero sus lentos periodos de adaptación acabó lastrando al equipo.

Justo tras confirmarse la noticia, Mohamed Salah publicó en sus redes: "Estoy totalmente devastado. No hay ninguna excusa posible. Somos el Liverpool y clasificarnos para Champions es lo mínimo". Klopp ha comentado esta mañana en rueda de prensa que entiende la frustración de su jugador. "Era una descripción normal de sus sentimientos y después del partido, no es el momento de enviar mensajes optimistas. Pero lo vi ahora en la cantina y estaba sonriendo", ha comentado un sonriente Jürgen Klopp.

La no clasificación para Champions es un duro golpe tanto en lo deportivo, como en lo económico para el club. El proyecto 'red' sufrirá tanto la falta de inyección económica que supone competir al máximo nivel europeo como la del reparto televisivo. Sin embargo, el técnico alemán augura un buen futuro. "Estamos muy unidos y eso es lo bueno. Si puedes pasar por momentos difíciles como los que hicimos es una muy buena base para un futuro mejor. Encuentro muchas razones para una visión optimista", concluía Klopp, quien tiene contrato con el equipo inglés hasta 2026.