Ander Guevara fue siempre un recambio de lujo para Imanol Alguacil, pero ahora es el líder del Deportivo Alavés. No ha podido jugar la Champions League con el equipo en el que creció, pero su guarismo de minutos alcanzado en marzo con el cuadro gasteiztarra cuadriplica ya el de toda la temporada pasada como txuri urdin. El domingo se enfrentará por segunda vez a la Real con el Alavés.
"Jugar allí estaba caro, fue un privilegio estar tanto tiempo en un equipo de tanto nivel", dice Guevara en Radio Marca Donostia. Al margen de la postura del club, que quería mantenerle en la plantilla pero no puso pegas a su marcha, y de la opinión de la afición, "yo entendía que tenía que salir, que estaba en un momento de mi carrera en el que necesitaba otro reto y estoy orgulloso de haber sido valiente en tomar esa decisión", sostiene.
A gusto en Anoeta
No fue una decisión fácil para el gasteiztarra porque "en la Real estaba muy a gusto y muy cómodo". Al principio, le dio pena tener que dejar la Real y a compañeros y amigos como Aihen que fue compañero de piso, pero "una vez ya fuera de allí, yo no tenía sensación de malestar, pero sí de pena, por marcharme de Zubieta después de tantos años".
Es, con diferencia, el jugador de campo con más minutos esta temporada en el Alavés: 2.652, divididos en 31 partidos. "Está siendo un año muy bonito, en mi vuelta a la que había sido mi casa al principio", reconoce en la misma entrevista. "Estoy disfrutando mucho de todo lo que nos está pasando, de todo lo que estamos haciendo y no puedo decir otra cosa que lo que siento es felicidad".
En este sentido, reconoce que "lo que me estoy encontrando aquí no lo he tenido en los años anteriores". Celebra estar gozando de "mucho protagonismo" por lo que afirma que "me siento importante, la cantidad de minutos que empiezo a acumular es algo muy difícil de conseguir en Donosti".
Comodín de Imanol
Imanol solía echar mano de Guevara para los partidos de Copa, los de Europa League de menor entidad y algunas segundas partes. El técnico se lo habría quedado encantado, pero no se sintió con fuerzas para cortarle las alas: “Era el momento de dar un paso, de buscar otro proyecto en el que pudiera tener más oportunidades de jugar y la última conversación con Imanol al respecto me ayudó muchísimo”, dice Ander, que agradece mucho la forma de actuar del entrenador: “Voy a guardar con mucho cariño esta última conversación”.
Lo vendió por 1,8 millones
La Real vendió a Guevara al Deportivo Alavés el pasado mes de junio a cambio de 1,8 millones de euros más un 25% de un futuro traspaso. El club txuri urdin se mostró comprensivo con el jugador, al que todavía le quedaba un año más de contrato y tenía una cláusula de rescisión de 50 millones de euros. En el club gasteiztarra firmó hasta 2027.
Guevara nació en Gasteiz en 1997. Es, por lo tanto, de la generación de Oyarzabal, Zubeldia y Aihen, con los que compartió vestuario muchos años en la Real.
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