Gabriel Arias fue expulsado en el minuto 96 en la victoria por 0-1 de Racing de Avellaneda ante Platense. El arquero hizo gestos obscenos dedicados a la afición local en respuesta a las ofensas hacia su persona que se dieron durante el encuentro.
La grada comenzó a llamarle: "Chileno, hijo de put*.", debido a que el guardameta se nacionalizó chileno para jugar con su combinado nacional. Entonces, el portero comenzó a hacer gestos irrespetuosos a los hinchas.
Tras esto, los jugadores locales rodearon a Gabriel Arias y uno de ellos le tocó el rostro. Esto provocó que el de Racing enloqueciese y agarrase del cuello a un rival. Y después abandonó el terreno de juego expulsado por el colegiado.
Todo el asunto no acabó ahí, ya que el argentino acabó en la Comisaría Segunda de Vicente López, según informó 'Olé'. El arquero tuvo que declarar por sus gestos que incitaron a la violencia y fue acompañado por Fernando Gago, Miguel Jiménez y Rubén Capria.
September 19, 2022