Bandera de España

Adoptada en 1785 tras las reformas del rey Carlos III, la bandera rojigualda de España ha sido usada de manera ininterrumpida desde entonces, salvo por el periodo de la Segunda República previo al estallido de la guerra civil española.

Por su parte, el escudo de la bandera goza de una historia completamente diferente, rebosante de dinamismo y reformas con fines políticos. De hecho, no sería hasta 1981 que el escudo de España encontraría su versión definitiva, la cual permanece vigente hasta nuestros días.

Así, pues, si os interesa conocer la historia de la bandera y el escudo de España, así como los simbolismos que se esconden tras su impresionante diseño, el siguiente artículo te resultará de gran utilidad.

Características de la bandera de España 🇪🇸

Características de los colores de la bandera de España

Estas son las principales características que se esconden tras los colores de la bandera de España:

• La bandera de España está dividida en tres franjas horizontales.
• Los colores de dichas franjas son: rojo, amarillo (oro o gualda) y rojo, en ese mismo orden.
• La anchura de la bandera equivale a 3/2 de la altura de la misma.
• Las dos franjas rojas ocupan, cada una, ¼ de la altura de la bandera.
• La franja amarilla ocupa ½ de la altura total de la bandera. En otras palabras, esta ocupa dos veces más espacio en la bandera que cada una de las franjas rojas.

Características del escudo de la bandera de España

A continuación os mencionamos las principales características del escudo que se observa en la bandera de España:

• El escudo está enmarcado dentro de la franja amarilla de la bandera.
• El escudo se ubica a una distancia equivalente a ½ de la altura de la bandera respecto al lado izquierdo de la misma.
• Los limites superiores e inferiores del escudo están separados de las franjas rojas por una distancia equivalente a 1/20 de la altura de la bandera.
• El escudo ocupa 2/5 de la altura de la bandera, esto es, el 80% de la altura de la franja amarilla.
• El escudo está compuesto, a su vez, por seis escudos menores:
  • Escudo de la dinastía Borbón-Anjou, cuyo máximo representante es el actual rey de España Felipe VI.
  • Escudo del Reino de León.
  • Escudo del Reino de Aragón.
  • Escudo del Reino de Castilla.
  • Escudo del Reino de Navarra.
  • Escudo del Reino de Granada.
• El escudo está sostenido por dos soportes, que, a su vez, están decorados por cintas en las que se puede leer en latín PLVS VLTRA (en español, más allá).
• El soporte izquierdo del escudo está coronado por la corona del Sacro Imperio Romano Germánico.
• El soporte derecho del escudo está coronado por la corona real española.
• De igual manera, el escudo en su totalidad está coronado por la corona de la Monarquía Hispánica, siendo esta varias veces más grande que la que se encuentra en el soporte derecho del escudo.

Significado de la bandera de España 🇪🇸

Significado de los colores de la bandera de España

Oficialmente, no existe información que explique el porqué de los colores de la bandera española. Sin embargo, existen algunas hipótesis al respecto.

La más común de todas es aquella que establece que el color rojigualdo de la bandera representa el oro de las Américas y la sangre derramada por los españoles en todas las guerras que conforman la historia de su país.

Por otra parte, existe una segunda hipótesis que se inclina a favor del sentido pragmático de los colores de la bandera española respecto a su uso en la Armada.

Según esta, se cree que el famoso color rojigualdo surgió en respuesta a la confusión creada por la similitud existente entre las banderas de distintas armadas regidas por la Casa de Borbón, las cuales, debido a su característico fondo blanco, eran difícilmente distinguibles a distancia.

Finalmente, existe una tercera y última hipótesis que establece que el color rojigualdo no es más que un recordatorio honorario a los colores de los escudos de los reinos de Aragón, Navarra y Castilla, los cuales forman parte fundamental de la historia y nacimiento de la Monarquía Hispánica.

Significado del escudo de la bandera de España

Escudos menores

En el interior del escudo de la bandera de España se pueden encontrar seis escudos menores, de los cuales cinco pertenecen a reinos hispánicos predecesores de la Monarquía española (León, Aragón, Castilla, Navarra y Granada), y uno pertenece a la casa real imperante en España, la dinastía Borbón-Anjou.

Soportes

Estos representan las columnas de Melkart, Heracles o Hércules, un elemento mitológico de la antigüedad perteneciente a distintas culturas (fenicios, griegos, romanos, numídicos, entre otros). Las columnas de Melkart flanqueaban el estrecho de Gibraltar, que era, en ese entonces, el límite del mundo conocido.

Cinta de los soportes

En la cinta de color rojo, que decora ambos soportes del escudo, se puede leer la frase latina PLVS VLTRA (más allá), la cual está relacionada con la expresión latina Non terrae plus ultra, que significa No hay tierra más allá.

Los reyes de España adoptarían dicho lema (el cual aún permanece vigente) como recordatorio de la gallardía de sus marineros, militares y nobles, quienes, tras adentrarse en el Atlántico, lograron descubrir América y conquistar el Nuevo Continente.

Corona del soporte izquierdo

Esta representa la corona del Sacro Imperio Romano Germánico, la cual estuvo unificada a la Monarquía Hispánica desde el ascenso de Carlos I el César, el 14 de marzo de 1516, hasta la muerte del rey Carlos II el Hechizado, el 1 de noviembre del 1700.

Corona del soporte derecho y corona principal (central)

Ambas coronas representan la corona real española.

Historia de la bandera de España 🇪🇸

Historia del escudo de España

Escudo de los Reyes Católicos

Tras la unión dinástica de Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón hacia finales del siglo XV, surgió la necesidad de representar a la incipiente Monarquía Hispánica mediante un nuevo escudo.

Así, pues, tras la conquista del Reino de Granada, último bastión musulmán de la península Ibérica, en enero de 1492, Fernando e Isabel, ahora llamados Reyes Católicos, ordenaron el diseño de un nuevo escudo para representar sus dominios.

En cuanto a su composición, el Escudo de los Reyes Católicos estaba formado por cuarteles que alternaban las Armas de Castilla y León con las de Aragón y las de Sicilia, así como también por el emblema del recién conquistado Reino de Granada.

Detrás del escudo de la dupla hispánica, se encontraba el Águila de San Juan; y junto a la cola del águila, el yugo y las flechas, que eran los emblemas de los Reyes Católicos.

Dinastía Habsburgo

Con la entrada de los Habsburgo y la subida al trono imperial de Carlos I de España y V de Alemania, a quién muchos llamaron el César, el Águila de San Juan del Escudo de los Reyes Católicos sería remplazada por el Águila Bicéfala o Imperial de color negro, la cual, pese a ser de origen bizantino, fue empleada tanto en España como en el Sacro Imperio Romano Germánico.

Más allá de la incorporación del Águila Bicéfala, la composición interna del escudo también sufrió algunos cambios, pues ahora este incorporaba territorios como Austria, Borgoña, Brabante, Flandes y el Tirol, así como también las Armas del Reino de Portugal y el Toisón de Oro, la más alta distinción de la Casa Habsburgo.

Primera dinastía borbónica

Tras la derrota de la Casa de los Habsburgo y el arribo de los borbones al trono imperial durante los acontecimientos de la guerra de sucesión española (1700–1713), el Toisón de Oro de Austria sería remplazado por el Escusón con las Flores de Lis, que fue y continúa siendo el emblema de la Casa de Borbón.

Reinado de José I Bonaparte

El hermano de Napoleón Bonaparte, José I Bonaparte, rediseñó por completo el escudo de España. Durante su breve reinado, el escudo estuvo compuesto por seis cuarteles: León, Aragón, Navarra, Granada y el Nuevo Mundo, además del emblema propio de su casa real, es decir, el Águila Napoleónica.

Reinado de Amadeo de Saboya

Tras los acontecimientos de la Revolución de 1868 y el arribo de la casa de Saboya al trono imperial, la corona real es incorporada nuevamente al escudo de España, junto al escusón de la casa real imperante.

Primera República Española

Luego de la institución de la Primera República Española el 11 de febrero de 1873, el escudo de España fue modificado nuevamente, aunque este seguiría pareciéndose mucho al que se instauró durante el breve Gobierno Provisional de 1868.

Este nuevo escudo recuperaba las columnas de Melkart a la par que cambiaba la corona real por una corona mural, la cual era típica de los reyes de Castilla de la Edad Media.

Segunda República Española

El gobierno de la Segunda República Española recuperó el escudo del pasado periodo republicano, aunque realizó algunas modificaciones. La más evidente fue, quizás, la que sufrió el león del Cuartel de las Armas del Reino de León, al cual le sustrajeron su corona.

Dictadura de Francisco Franco

Durante el régimen franquista, el escudo de España sufriría su modificación más radical en aras de volver a las raíces históricas de la monarquía.

Así, pues, el Águila de San Juan de los Reyes Católicos, a quienes Franco veía como los padres de la nación española, sería recuperada, así como también la composición interna del escudo y sus cuarteles.

Historia de la bandera de España y sus colores

La primera bandera de España

Según el trabajo de investigación de Ramón Vega Piniella y Hugo Vázquez Bravo, la primera bandera española oficial de los Reinos Unidos, de la cual se tiene constancia, fue la utilizada por el capitán Gonzalo Fernández de Córdoba hacia el año 1500.

A diferencia de la bandera actual, esta primera versión de la bandera de España era cuadrada y no rectangular, y, si bien era bicolor, no empleaba el clásico rojigualdo, sino una combinación de verde y amarillo (oro) expresado en dos únicas franjas verticales.

En cuanto a su escudo, el capitán Gonzalo Fernández empleó el escudo de los Reyes Católicos, enmarcándolo justo en medio de la bandera.

La Casa de Borgoña y la Cruz de San Andrés

Felipe I el Hermoso, consorte de Juana I de Castilla y, por tanto, yerno de los Reyes Católicos, sería el encargado de aportar a la Monarquía hispánica el símbolo borgoñón de la Cruz de San Andrés sobre el fondo blanco.

Con el pasar de los años, el uso de la bandera de la Cruz de San Andrés, también conocida como el aspa de Borgoña, se fue arraigando en el ejército y la Armada española, aunque no de manera exclusiva, pues esta coexistiría junto a otras banderas, como, por ejemplo, la bandera del Pabellón de los Galeones, la cual fue empleada por algunos barcos de guerra de los reyes de España durante la dinastía de los Habsburgo.

La bandera del Pabellón de los Galeones

Durante la guerra anglo-española, la bandera del Pabellón de los Galeones fue enarbolada en algunos buques de la Armada española.

Esta se componía de tres franjas horizontales:

1. La primera, de color rojo.
2. La segunda, de color blanco.
3. Y la tercera y última, de color amarillo.

En cuanto a su escudo, el Águila Coronada, estaba situado justo en el medio de la bandera, y, además, se encontraba enmarcado dentro del Toisón de Oro.

La primera dinastía borbónica

Con la llegada de los borbones a principios del siglo XVIII, las antiguas banderas hispánicas instauradas por los Habsburgo pasarían a convertirse en las banderas coronelas, según los nuevos lineamientos y organización de los ejércitos de España.

Estas banderas borbónicas se caracterizaban por su composición clásica y sencilla: un fondo blanco con el escudo de las Armas Reales del monarca de turno.

No obstante, y pese al nuevo status quo borbónico, las banderas de la Cruz de San Andrés permanecieron vigentes durante el siglo XVII y parte del siglo XIX.

Las reformas de Carlos III el Político

En 1785, ante la confusión que generaba el fondo blanco de las banderas coronelas de los buques y navíos mercantes de España, Antonio Valdés y Bazán, el entonces ministro de Marina de España, sugeriría al rey Carlos III la celebración de un concurso de diseños de banderas como solución a dicho problema.

Una vez el concurso de ideas concluyó, Antonio Valdés presentó al rey Carlos III un total de doce bocetos de banderas, de las cuales el monarca escogería solo dos: la rojigualda (aunque con algunas diferencias de la actual), que sería empleada para la armada de guerra, y una variante de la misma de cinco franjas, cuyo uso estaría destinado exclusivamente a los navíos mercantes.

La guerra de la Independencia española

Durante la sublevación en contra de la ocupación francesa, en el marco de las guerras napoleónicas, en España, se iría alternando el uso de varias banderas, aunque ninguna de estas gozaría de pleno carácter oficial.

A medida que el conflicto avanzaba, la bandera rojigualda comenzó a ganar relevancia en el campo militar, al punto tal de ser utilizada con fines políticos y propagandísticos a favor de la sublevación española y la formación de nuevos cuerpos de seguridad.

Finalmente, la bandera rojigualda alcanzaría su cénit político e institucional luego de la promulgación de la Constitución de Cádiz el 19 de marzo de 1812.

Tras esto, se convirtió tanto en la bandera oficial de las Cortes de Cádiz como en la bandera oficial de la recién creada Milicia Nacional.

Las guerras carlistas

Tras el estallido de las guerras carlistas en 1833, la bandera rojigualda sería utilizada indistintamente por ambos bandos, el isabelino y el carlista, dado que ambos consideraban legítimas su reclamación dinástica.

Ante tal situación, los carlistas decidirían añadir algunas modificaciones a la bandera en forma de lemas para así diferenciarse de los isabelinos. De esta manera, nacería la bandera rojigualda carlista, en cuya franja central se podía leer el famoso lema Dios, Patria y Rey.

A lo largo de las sucesivas batallas enmarcadas en la primera guerra carlista, la bandera de la Espada de San Andrés también sería empleada por los regimientos de los ejércitos de la reina Isabel II, y no por el ejército carlista, como usualmente se piensa.

Tras la victoria del bando isabelino a principios de julios de 1840, la reina Isabel II procuró dar un carácter definitivo a la rojigualda, decretándola bandera oficial de la nación y de todos sus cuerpos de seguridad (Ejército, Armada y Milicia Nacional) el 13 de octubre de 1843.

Primera República Española

Dada la naturaleza breve de la Primera República Española, ninguno de sus gobiernos pudo aplicar una reforma sustancial a la bandera, más allá de eliminar la corona real del escudo.

De hecho, este cambio fue, cuando menos, burdo y apresurado, pues simplemente se limitaron a cocer un trozo de tela gualda encima del escudo.

Restauración Borbónica

En 1927, durante la dictadura de Primo de Rivera y el reinado de Alfonso XIII, el uso de la versión de cinco franjas de la bandera rojigualda, que habían empleado los navíos mercantes desde las reformas de Carlos III, sería prohibido definitivamente.

Segunda República Española

A inicios de la Segunda República Española, el clásico color rojigualdo de la bandera sería sustituido por una nueva versión tricolor de la misma, donde la franja roja inferior fue reemplazada por una de color purpura.

Sin embargo, tras el estallido de la guerra civil en 1936, el general sublevado Miguel Cabanellas firmaría un decreto para devolver a la bandera española su clásico color rojigualdo.

Régimen franquista

En febrero de 1938, el general Francisco Franco, en su cualidad de autócrata, ratificaría el uso exclusivo de la bandera rojigualda en España.

A la par, añadiría una nueva reforma a su escudo, recuperando el Águila de San Juan y la composición clásica del antiguo escudo de los Reyes Católicos.

La actual bandera de España

Tras la entrada en vigor de la Constitución española vigente, el 29 de diciembre de 1978, la bandera actual de España quedaría establecida según lo escrito en el artículo 4.1 de la Carta Magna, aunque sin mención alguna al escudo.

Tres años después, mediante ley y real decreto, el actual diseño del escudo de la bandera española sería definido, permaneciendo así de manera ininterrumpida hasta la actualidad.