El italiano Mario Balotelli milita en la Superliga de Turquía y si bien suele deslumbrar con alguna gran definición, su temperamento también llama la atención. No es la primera vez que el delantero tiene una reacción inesperada en un partido y esta vez fue al finalizar el cruce ante Umraniyespor cuando tuvo una discusión con el entrenador que fue captada por las cámaras y ¡hasta tuvieron que separarlos!
Este sábado el Adana Demirspor ganó 1-0 con gol del francés Kevin Rodrigues a los 6 minutos, pero parece ser que algo no le gustó para nada a Super Mario que estalló en bronca. Luego de que el árbitro hiciera sonar el silbato final, la transmisión mostró como el italiano despidió a la terna arbitral y se acercó a decirle algo a Vincenzo Montella.
A pesar de que quienes estaban relatando el partido no lograron detallar qué fue lo que ocurrió, la imagen habló por si misma. Balotelli le dijo algo al DT que reaccionó y se le fue al humo. En ese instante integrantes del cuerpo técnico y de la seguridad del partido se acercaron para separarlos, pero la bronca del técnico de 48 años quedó en evidencia.
Si bien desde el club todavía no brindaron detalles sobre cuál será la consecuencia de la conducta del ex jugador del Inter de Milán, habrá que ver si el entrenador decide aplicar alguna sanción. Una vez más Super Mario copa la escena por su conducta y no por su destreza.
Mientras tanto el equipo volverá a jugar el domingo próximo a las 13:15 hs de Argentina ante Hatayspor con el objetivo de seguir ampliando la diferencia en la tabla de posiciones. Tras cuatro fechas disputadas en esta temporada 2022/2023 el Demirspor se encuentra segundo y quiere levantar el trofeo local.
La primera reacción inesperada de Balotelli en Turquía
A tres fechas de llegar al Adana Demirspor, protagonizó un primer episodio que lo puso en boca de todos al reaccionar de manera poco habitual (aunque para él no tanto) al ser reemplazado por un compañero durante el partido ante Konyaspor.
Balotelli fue sustituido a los 12 minutos del segundo tiempo, con el marcador igualado en cero, y en cuanto se sentó en el banco expuso todo su enojo con gritos, gestos ampulosos e incluso un golpe de puño al brazo de uno de sus compañeros de equipo.
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