Dolph Lundgren (Estocolmo, 1957) es, adem�s del actor sueco que m�s veces ha hecho de ruso, ingeniero, pol�glota, conversador ameno, karateka a ratos muertos, amante del sol marbell� y, lo m�s importante, Iv�n Drago. Su carrera empez� en 1985. El mismo a�o que debutaba en Panorama para matar se hac�a con un puesto de honor en la memoria de cualquier aficionado al cine. O al linimento. Nunca le perdonaremos que matara de la manera que lo hizo a Apollo. Y menos que nadie Rocky. Y a�n menos el hijo de Apollo. De entonces a ahora han pasado m�s de 30 a�os, decenas de producciones arrojadas �directamente al v�deo� y la certeza de que nadie mejor que �l para el papel de He-Man. Qu� recuerdos. Tras el reciente estreno de Aquaman, donde flota con una corona en la cabeza, ma�ana mismo le veremos al lado de Stallone en Creed II. Vuelve a ser Drago. Y esta vez para siempre.
P. �Es consciente de que con esta pel�cula cierra un c�rculo no s� si personal, pero s� en el imaginario del cine popular?
R. S�, en muchos sentidos es as�. Drago fue mi primer personaje. Y �l cre� toda mi carrera, pero tambi�n me hizo da�o en cierta forma. Era un tipo que no dec�a m�s que un par de palabras, era mal�simo y lo hice bien. Tal vez demasiado bien. Y ahora ten�a que neutralizar esa imagen. Adem�s, tambi�n es una forma de poner un broche tambi�n con Stallone. Todo esto te hace reflexionar sobre tu vida y tu carrera. Han pasado 33 a�os.
P. Este personaje ha sido una bendici�n pero, como dice, tambi�n una maldici�n. De alg�n modo, Drago le oblig� a hacer una y otra vez de Drago.
"Iv�n Drago cre� toda mi carrera, pero tambi�n me hizo da�o. Era un tipo que no dec�a m�s que dos palabras, era mal�simo y lo hice bien. Tal vez demasiado bien"
R. S�, y por eso he tenido que volver a interpretarlo, para exorcizarlo. Al final del camino est� el perd�n y la redenci�n. Dos cualidades que ahora mismo son muy importantes en mi vida. En Aquaman tambi�n he interpretado un personaje con esos valores. Todo lo que hago ahora intento que transmita valores positivos, de reconciliaci�n.
P. Con Aquaman y Creed tengo la impresi�n de que est� viviendo un renacimiento, que es una oportunidad para que nuevas generaciones...
R. S�, es una oportunidad tambi�n para m�. No soy el mismo hombre que era hace diez a�os. Arrastraba un trauma desde la infancia con mi padre. He tenido que trabajar en ello con terapia y meditaci�n durante seis a�os, hasta que he empezado a sentirme mejor conmigo mismo.
"No soy el mismo hombre que era hace diez a�os. Arrastraba un trauma con mi padre. He tenido que trabajar en ello con terapia y seis a�os de meditaci�n"
P. �Cu�nto hay de la relaci�n traum�tica con su padre (sufri� abusos de ni�o) en los personajes que interpreta?
R. Confieso que lo uso a veces, pero no en este personaje en particular. Para Drago viejo, lo m�s importante es el dolor de ser un luchador. Recurr� al dolor f�sico de otras pel�culas de acci�n, al de mi divorcio, al de estar separado de mis dos hijas, al de ser rechazado en Hollywood, al de ser visto como un actor que solo sabe hacer una cosa... �se es el dolor que he usado para esta pel�cula. La parte que tiene que ver con mi padre est� ah�, puedo usarla si quiero, pero es demasiado personal.
P. Habla del fracaso que ha presidido su carrera, pero tambi�n para fracasar hay que hacerlo con estilo. Me confieso fan de Masters del universo...
"Soy ingeniero qu�mico, he sido luchador, luego actor... poseo muchas caras diferentes y Hollywood no ha sabido explotarlas"
R. Bueno, cada uno tenemos nuestro camino. Mi camino ha sido aguantar, aunque las cosas no pintaran tan bien. Me consta que en Inglaterra hay un mont�n de fan�ticos de la pel�cula que eran unos cr�os cuando se estren�. Entonces, me llev� una gran decepci�n ...
P. �Cree que Hollywood le debe algo?
R. Es una forma interesante de verlo. Creo que lo que pasa es que he tenido una vida at�pica. Primero soy ingeniero qu�mico, he sido luchador, luego actor... He hecho cierto tipo de pel�culas a pesar de que soy una persona muy emocional, muy vulnerable... Poseo muchas caras diferentes y Hollywood ha tenido dificultades para usar todas esas facetas. Nunca tom� la iniciativa, as� que no creo que Hollywood me deba nada, pero s� creo que ahora hay otra gente que se interesa por m�.
"Para este personaje recurr� al dolor de otras pel�culas de acci�n, al de mi divorcio, al de estar separado de dos hijas, al de ser rechazado por Hollywood..."
P. Mirando a su pasado, usted representa cierto tipo de masculinidad unidimensional. �C�mo cree que ha cambiado el concepto de masculinidad? �C�mo se siente en el centro de la revoluci�n MeToo?
R. R�e] Es interesante. Bueno, han cambiado cosas, pero si retrocedes a dos generaciones por detr�s de la m�a, los cambios han sido radicales. Las mujeres no pod�an votar, hab�a esclavos... S�, la sociedad va transform�ndose y cuando empec� a trabajar en el cine ser una estrella de acci�n era un trabajo muy f�sico porque ten�as que hacer muchas de las escenas t� mismo, no pod�as usar dobles en las escenas de riesgo. No hab�a tecnolog�a digital. Adem�s, cuando vienes del mundo de la lucha tienes una personalidad muy marcada: Arnold o yo, ten�amos un aura muy de machotes. Y ahora no hace falta tener tantas cualidades f�sicas para ser una estrella de acci�n. Te sientes un poco como un dinosaurio. Me parece muy bien que ahora haya m�s equilibrio, que los hombres puedan ser vulnerables y que las mujeres tengan los mismos derechos. Es importante y muy efectivo que alguien como yo aparezca llorando porque es algo inesperado [rompe a re�r].
P. �Qu� recuerdos guarda de Marbella?
R. Todav�a tengo una casa en Marbella. Viv� ah� durante diez a�os y mis hijas crecieron y se educaron all�. Una l�stima que tuviera que volver a Hollywood. Pero no hubo m�s remedio, mi carrera se ven�a abajo si segu�a bebiendo vino en la playa. Llegu� a ser el embajador oficial de Marbella, signifique esto lo que sea, hace una par de a�os.
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