Género de Acción (Cinematográfico) | Historia y Características

Género cinematográfico de acción: Historia, características y subgéneros

El cine de acción es un género cinematográfico que hasta hace poco era despreciado y relegado a un género menor. Un género popular que no ganaba el favor de la crítica a excepción de contadas ocasiones pero que a su vez es uno de los más complejos y caros de realizar por el gran número de personas detrás de la cámara y especialistas que se ponen en riesgo para poder realizar la toma perfecta. 

El género de acción ha estado presente en el cine desde sus inicios y en este artículo haremos un repaso en general al género, introduciendo al lector en este mundo cinematográfico tan apasionante y mostrándote los distintos subgéneros. Además, si te quedas con ganas de más, te hemos confeccionado una lista con las mejores películas de acción de todos los tiempos

Actores del cine de acción

Historia del género cinematográfico de acción

Marca del zorro Género de acción

Cartel de La marca del zorro (1920)

Orígenes del género de acción

Aunque la acción ha sido una parte fundamental del cine, dando dinamismo a las películas y emocionando al espectador, el género de acción no es reconocido como tal hasta los años 80. Hasta ese momento las películas de acción solían estar combinadas con algún otro género con la que se les clasificaba y la acción quedaba relegada a un segundo plano, como una serie de acciones y elementos que se añadían a la historia para hacerla más entretenida.

Según algunos críticos, la primera película de acción fue Asalto y robo de un tren (The Great Train Robbery) de Edwin S. Porter estrenada en 1903. Este film además supuso el primer Western y es éste género, con escenas de tiroteos, persecuciones y asaltos que; junto al subgénero del cine de aventuras, de las películas de capa y espada con sus combates, duelos de espada y cabriolas; dieron las primeras muestras del cine de acción desde los años 20. Las máximas estrellas de estas películas fueron Douglas Fairbanks y Errol Flynn.

Fueron famosas La Marca del Zorro (1920) de Fred Niblo, El prisionero de Zenda (1937) de John Cromwell. Si hablamos de Westerns tenemos el film Roarin g Rails de Tom Forman (1924) o El valle del arco iris (1935) de Robert N. Bradbury. A estos ejemplos se le puede añadir la comedia física o también conocida como slapstick. El slapstick es un subgénero cómico fundamentado en los golpes que tuvo gran popularidad en los inicios del cine.  

Actores de este subgénero como Buster Keaton eran ellos mismos los que realizaban las escenas de riesgo, golpeándose y lanzándose cosas con tal de generar risa en el público. Referentes de la comedia física fueron Harold Lloyd, conocido por El hombre mosca ( Safety Last! ) ((1923) de Fred C. Newmeyer y Buster Keaton, quien protagonizó El maquinista de la General ( The General ) (1926), dirigida por Clyde Bruckman y el propio Keaton.

El maquinista de la general (1926)

Después de la segunda guerra mundial

En los años 40 y 50 se extiende el cine bélico motivado por la Segunda Guerra Mundial y un cine de hazañas bélicas por tierra, mar y aire se hace con el género de acción. Aunque siguen habiendo Westerns y películas de aventuras en las que las escenas de acción son fundamentales. 

En el cine bélico las escenas de acción se fundamentan en los tiroteos, las explosiones y asaltos. Ejemplo de ello son Los cañones de Navarone (1961) de J. Lee Thompson, Regreso del infierno (1955) de Jesse Hibbs (1955) y La Gran Evasión (1963) dirigida por John Sturges. Aunque si hablamos de un género que potenciará la creación de lo que hoy se conoce como género de acción ese el cine de espías.

En el cine de espías, las persecuciones, los tiroteos, las explosiones o los robos dotan de emoción a las películas de esta temática. Ejemplo de ello es el clásico de intriga Con la muerte en los talones (1959) de Alfred Hitchcock, que entre sus escenas memorables está la persecución final en el Monte Rushmore. No obstante, si hablamos de espías tenemos que nombrar al más conocido y de una saga con su nombre que dio el espaldarazo definitivo al género cinematográfico de acción. Estamos hablando de James Bond

James Bond mejores películas de acción
Sean Connery en 1962

La influencia e importancia de esta saga al género es así porque las adaptaciones de las novelas de Ian Fleming (que se llevan haciendo desde 1962) han establecido algunas de las características del cine de acción como: un héroe ingenioso capaz de acabar con un villano y su ejército. 

El héroe acaba con este villano sin ayuda de nadie o con la ayuda de una serie de armas o artilugios con los que el protagonista resuelve los todos sus problemas. Estas historias están llenas de grandes persecuciones y peleas, algunas de ellas han pasado a formar parte de la cultura popular. La primera película de la saga fue Agente 007 contra el Doctor No (1962) estuvo dirigida por Terence Young y protagonizada por Sean Connery

Inicio de Agente 007 Contra el Dr No (1962)

La popularidad de James Bond fue tal que surgieron copias del formato, por lo general de bajo presupuesto, en países como Italia, Francia y España. Films como El tigre se perfuma con dinamita (1966) de Claude Chabrol, S077: Operación Relámpago (1966) de Giorgio Stegani o El cobra (1967) de Mario Sequi y en Estados Unidos con la saga de Matt Helm en la que destaca La mansión de los siete placeres (1968) de Phil Karlson.

En 1968 se estrenó en EEUU Bullitt, dirigida por Peter Yates y protagonizada por Steve McQueen, una película policial sobre la investigación del asesinato de un desertor de la mafia. Este film pasó a la historia por su famosa persecución en las calles de San Francisco entre el Ford Mustang de McQueen y el Dodge Charger de los malos e influyó en la forma de dirigir y plantear las persecuciones de automóviles en las películas de acción.

Los 70 y 80: La era de la acción

Otra película clave en la forma de grabar las persecuciones fue The French Connection, contra el imperio de la droga (1973) de William Friedkin. En ella destaca la persecución de Gene Hackman contra el metro en las calles de Nueva York. En cierta forma, estas películas marcarían uno de los caminos del género de acción en los 70: el del cine policíaco o de thriller. En estos films, el policía, un hombre rudo que no le importaba saltarse las normas para conseguir justicia, acababa con los criminales de forma brutal mediante tiros y persecuciones. 

Un cine que tuvo por estandarte a Harry el Sucio (1971) de Don Siegel y por imagen a Clint Eastwood en el papel de Harry Callahan, representando a un policía duro que impartía justicia con su Magnum del 44. Algo que ya se vio en anterioridad en otra película del director (que además fue su primera colaboración con Eastwood), La jungla humana (Coogan’s Bluff) (1968).

Persecución contra el metro en The French Connection 

lista de las mejores películas de acción de todos los tiempos

Cartel de Harry el Sucio 

Este tipo de personaje rudo que se salta las normas para hacer justicia creó tendencia y generó escuela con películas como América Violenta (The stone killer) (1972) de Michael Winner  y protagonizada por Charles Bronson. Director y actor iniciaron una carrera de colaboraciones que dejaron películas como Fríamente… sin motivos personales (1972) que tuvo un remake en 2011 protagonizado por Jason Statham y dirigido por Simon West y El justiciero de la ciudad (1974). 

Esta última película dio origen a una saga de 6 films y significó el inicio de Justiciero, un ciudadano que ante el crimen y la inacción del sistema decide tomar la justicia por su mano. Esta saga junto a Harry el sucio, marcaron el género en esa época. Una época de crisis, alta criminalidad y la necesidad de un héroe de a pie que acabará con los malos era necesaria. 

Aunque este cine no solo tuvo héroes, sino que existía otra cara: la de los criminales. Como en Los amos de la noche (1979) de Walter Hill, en la que adaptó el libro Anábasis de Jenofonte al Nueva York de la época centrándose en el mundo de las bandas callejeras. 

Esto tuvo su respuesta en Europa con las películas de Euro-crimen, o como se conoció en Italia, Poliziottesco. Un género policial que nació como protesta de la inacción de las instituciones de un sistema tan podrido como el italiano. Dentro de este sistema sobresalían agentes íntegros que se veían obligados a infiltrarse en el mundo de la mafia para poder resolver sus casos. Pero el éxito comercial de películas como La policía detiene, la ley absuelve (1973) de Enzo G. Castellari hizo que poco a poco este cine de protesta diera paso a un cine meramente comercial y violento en el que la violencia y las persecuciones automovilísticas eran la parte fundamental. Esto se vio en películas como Milán odia: la policía no puede disparar (1974) de Umberto Lenzi. 

En España el cine de acción tuvo su versión en el cine quinqui. Un cine de contenido social sobre los criminales de poca monta que poblaban las calles y que contenían escenas de acción con numerosas persecuciones. Fue popular a finales de los 70 y principios de los 80. De este género destacan Los últimos golpes de El Torete (1980) de José Antonio de la Loma  y Deprisa, Deprisa (1981) de Carlos Saura. 

Escena de Kárate a muerte en Bangkok 

El otro camino que tuvo el cine de acción en los 70 fue el de las artes marciales. En esta década el cine de artes marciales de Hong Kong y Taiwán llega a Occidente y gana popularidad. Un cine que, aunque se llevaba haciendo desde los 50 por estudios como los Hermanos Shaw, en esta década se populariza. En un primer momento se introduce en los cines urbanos a la par de los cines pornográficos y con un público mayoritariamente afroamericano y posteriormente llegaría a un público de clase media gracias a la televisión.

Un cine que generó una pasión por las artes marciales y tuvo por estrella a Bruce Lee, actor estadounidense de origen chino que ganó popularidad en su momento por su papel de Kato en la adaptación televisiva de El avispón verde (serie de 1966). En esta serie, Lee demostraba sus dotes en escenas de peleas y llegó a su cima cuando rodó con Golden Harvest, Karate a Muerte en Bangkok (The Big Boss) (1971), Furia Oriental (Fist of Fury) (1972) de Lo Wei, El Furor del Dragón (Way of the Dragon) (1972) dirigida por el propio Lee y Operación Dragón (Enter the Dragon) (1973) de Robert Clouse (y que supuso la primera película de artes marciales producida en Occidente). 

Bruce Lee artes marciales

Bruce Lee en 1973 

Pero la muerte en 1973 de Bruce Lee sacudió el mundo del cine y nació el mito de Bruce Lee que derivó en un propio subgénero dentro de las artes marciales: las películas de Bruce Lee. En este sentido, se explotaron películas de artes marciales protagonizadas por actores parecidos en nombre y/o cara a Bruce Lee y se usaban escenas de películas de Lee o partes de películas inacabadas para crear filmes. 

Ejemplo de ello es Juego con la muerte (1978) de Robert Clouse en la que se unieron escenas de películas anteriores de Lee, del propio funeral del actor y escenas con dobles para crear una película, siendo reconocida por la pelea del final en la que Lee, vestido con un mono negro con rayas negras, se enfrenta a Kareem Abdul-Jabbar. Este tipo de películas dejaron de ser populares a finales de los 70, pero no así el cine de artes marciales que había llegado para quedarse en occidente y su influencia en el cine de acción se notará en las siguientes décadas. 

El cine de acción también se hizo popular en Japón y con un nombre propio, Sonny Chiba. Conocido recientemente por su papel de Hatori Hanzo en Kill Bill (2003) de Quentin Tarantino. En los 70 Chiba protagonizó películas de acción como Karate Kiba (1973) de Tatsuichi Takamori, The Street fighter (1974) de Shigehiro Ozawa que dio pie a una saga y le dio a conocer en occidente. Y en thrillers de acción como Golgo 13 (1977) de Yukio Noda o Doberman Cop (1977) del director Kinji Fukasaku.

Con esto llegamos a la década que definirá al cine de acción como un género propio: los 80. Un momento en el que la llegada de Reagan y el vídeo dio lugar a lo que se llamó «la era de la acción». Esta era tuvo una serie de nombres que quedaron marcados como símbolos del género, estos eran: Chuck Norris, Sylvester Stallone, Arnold Schwarzenegger, Dolph Lundgren, Steven Segal y Jean Claude Van Damme entre otros. 

En el caso de Norris, ya venía protagonizando películas de acción desde los 70 con películas que combinan el cine de artes marciales con temas policiales como Los valientes visten de negro (1978) de Ted Post. Pero fue en los 80 cuando se convertiría junto a un veterano Charles Bronson en la imagen de la productora Cannon Films. Una productora de cine de serie B estadounidense dirigida por Menahem Golan y Yoram Globus que dominó el cine con películas de acción. Películas que iban desde Invasión U.S.A. (1985) de Joseph Zito, Delta Force (1986) de Golan o la trilogía de Desaparecido en combate protagonizadas por Chuck Norris. Y las secuelas de la saga Justiciero de la ciudad protagonizadas por Charles Bronson. 

Trailer de En busca del arca perdida (1981) 

Por otro lado, en 1981, Steven Spielberg asociado a George Lucas estrenan En busca del arca perdida. Una película de aventuras inspiradas en las películas de James Bond y en películas como las Minas del Rey Salomón de Compton Bennett y Andrew Marton. En busca del arca perdida fue un éxito de taquilla e inició una saga de varias secuelas convirtiéndose Harrison Ford en Indiana Jones

Y en 1982 se estrenó Límite: 48 horas de Walter Hill, la que es considerada la primera Buddy cop. Un subgénero de cine de acción en la que dos protagonistas deben trabajar juntos para resolver un crimen o vencer a un criminal, al tiempo que van entablando una amistad o bien refuerzan una relación existente.

Tuvo como su máximo ejemplo la saga de Arma letal (1987) de Richard Donner y protagonizada por Mel Gibson y Danny Glover. En 1982 también se estrena Acorralado de Ted Kotcheff que dio a conocer el personaje de John Rambo y su secuela Rambo. Acorralado, parte II (1985) dirigida por George P. Cosmatos. Tanto él como Sylvester Stallone forjaron la figura de Rambo en la cultura popular y lanzaron la carrera de Stallone como héroe de acción con películas como Cobra, el brazo fuerte de la ley (1986) y la buddy cop Tango y Cash (1989)

Otra figura clave del cine de acción de los 80 fue Arnold Schwarzenegger; el culturista de origen austriaco que se dio a conocer por su papel de Conan el Bárbaro en la película homónima de 1982 de John Milius y en 1984 por su papel de Terminator en el clásico del cine de acción y ciencia ficción Terminator de James Cameron. Schwarzenegger en esa década protagonizaría películas como Comando de Mark L. Lester (1985), Depredador (1987) de John McTiernan. 

McTiernan al año siguiente dirigiría la considerada la mejor película de acción de todos los tiempos por muchos, en España se llamó La jungla de Cristal, aunque su nombre original fue Die Hard (Duro de matar), protagonizada por Bruce Willis en el papel de John McClane lanzando la carrera del actor. Supuso un éxito de crítica y público, además de dar origen a una saga de cinco películas. 

Esta década también fue fructífera en otras partes del mundo, en Hong Kong donde Sammo Hung y Jackie Chan actualizaron el género al añadir una dosis mayor de comedia a las películas de acción. Ambos se convirtieron en estrellas al protagonizar películas como La armadura de Dios (1986), Police Story (1985) de Jackie Chan, Ganadores y pecadores (1983), Los supercamorristas (1984) de Sammo Hung o Yes, Madam de Corey Yuen (1985) protagonizada por Michelle Yeoh y Cynthia Rothrock. 

Rothrock se convertiría en la primera actriz occidental en protagonizar una película de acción hongkonesa en 1989 con Female Reporter, también conocida como The Blonde Fury, de Mang Hoi. 

Stallone en Rambo 3 

En los 80 también se popularizó en Hong Kong las películas de John Woo, un director que en los 70 empezó haciendo películas sociales y comedias, y que tras una serie de fracasos se fue a Taiwán. Donde en 1986 regresó estrenando Un mañana mejor (A Better Tomorrow), que revolucionó el género de acción en una historia de mafiosos donde destacó el actor Chow Yun Fat, que se convirtió en el actor fetiche del director. Juntos trabajaron en películas como Honor, Plomo y Sangre (1988). Posteriormente John Woo fue a trabajar a Hollywood y dirigió películas de acción como Cara a Cara (1997) y recientemente Manhunt (2017), que estuvo en el Festival de Venecia fuera de competición en 2017. 

En Francia el cine de acción estaba protagonizado por Jean Paul Belmondo, el actor conocido por su papel en películas como Al final de la escapada (A bout du soufflé) (1960) de Jean-Luc Godard. Belmondo se convirtió en un héroe de acción en el cine galo desde que en 1964 cuando protagonizará El hombre de Río de Philippe de Boca y Cien mil dólares al sol de Henri Verneuil. Con Verneuil haría en 1975 Pánico en la ciudad y en 1981 protagonizó El profesional de Georges Lautner que fue un éxito de taquilla.

Escena de La jungla de cristal

El género cinematográfico de acción desde los 90 hasta la actualidad.

Los 90 supusieron la revolución digital. La introducción del CGI cambió el género al poder hacerlo más espectacular y llevarlo al límite, además de fusionarlo con otros géneros que antes acompañaba, como fue el Western, el cine de espías o la auto-parodia. Otro punto destacable de la década fueron las secuelas. Siguieron realizándose segundas y terceras partes de películas que triunfaron en la anterior década, por ejemplo, La  jungla 2: Alerta roja (1990) o Misión Imposible (1996) de Brian de Palma,  adaptación de una serie de televisión de los años 60 y protagonizada por Tom Cruise. Supuso un éxito de taquilla e introdujo a Cruise como un héroe de acción, dando inicio a una saga de 6 películas. 

Un fenómeno cultural de esta época fue la llegada del videoclub y predominaron las películas directas a vídeo. Películas relevantes de esta época fueron El último gran héroe (1993) de John McTiernan, que parodiaba las convenciones del género, Men In Black (1997) de Barry Sonnenfeld, Desperado (1995) y Abierto hasta el amanecer (1996) de Robert Rodríguez, esta última con guion de Quentin Tarantino. 

En esta década también se empieza tomar el cómic como base para el cine de acción. El éxito de la adaptación de Batman que realizó Tim Burton en 1989 lo acrecentó y  se vieron varias secuelas de Batman o también Blade (1998) de Stephen Norrington. En esa línea también estaba la adaptación libre de el libro Un mundo feliz de Aldous Huxley que supuso Demolition Man (1993) de Marco Brambilla protagonizada por Sylvester Stallone, Sandra Bullock y Wesley Snipes. 

Escena de Blade: Cazador de vampiros

La Buddy movie seguía de moda con el éxito de Hora punta (1998) de Brett Ratner con un Jackie Chan recién llegado a Hollywood desde Hong Kong, donde dominaba el cine de acción con películas como la Leyenda del luchador borracho (1994). En cuanto a la influencia del CGI al cine de acción, la película más influyente de primeros de década fue Terminator 2: el juicio final (1991) dirigida por James Cameron. Este film supuso un paso siguiente en la tecnología, que llegaría a su máximo esplendor con el estreno en 1999 de Matrix, de Lana Wachowski y Lilly Wachowski, protagonizado por Keanu Reeves. Con esta película se introdujo nuevos mundos al cine de acción con influencias del anime japonés, el cine de acción hongkonés y la Ciencia Ficción. Reeves también protagonizaría Speed (1994) de Jan de Bont y Le llaman Bodhi (1991) de Kathryn Bigelow. 

En esta década además destacan dos grandes directores de acción, uno es Michael Mann, quien desde Ladrón (1981) con James Caan, llevaba dirigiendo películas de acción como El último Mohicano (1992) o Heat (1995). Un thriller de acción protagonizado por Robert De Niro y Al Pacino que en bandos opuestos se enfrentan en una historia de robos dejando uno de los mejores tiroteos de la historia del cine de acción e influenciando en las películas de atracos posteriores y videojuegos, como el Grand Theft Auto V, donde se recrea en una misión el primer golpe de la películas o la saga de videojuegos de Payday. Posteriormente Mann dirigirá el thriller dramático El dilema (1999),  Ali (2001),  Collateral (2001) y Enemigos Públicos (2009)

Michael Bay director de cine de acción

Michael Bay rodando Transformers en 2007

El otro director de acción destacado es Michael Bay, quien con el paso del tiempo se ha convertido en un sinónimo del género en cuanto a espectacularidad se refiere. En 1995 dirigió su opera prima, Dos policías rebeldes, con Will Smith y Martin Lawrence y que, al año siguiente, dirigirá una de las consideradas mejores películas del género: La Roca (1996) , transcurrida en Alcatraz y con Sean Connery, Nicolas Cage y Ed Harris encabezando el reparto.

Otras películas del director son Armagedón (1998),  Pearl Harbour (2001), con la que ganó un Oscar a mejor sonido. En 2007 dirigió Transformers , adaptando al cine la línea de juguetes de Hasbro, que dio pie a una saga de 6 películas. Otros films fueron Dolor y dinero (2013) y la más reciente, 6 Underground (2019), estrenada y producida en Netflix. 

En Reino Unido la saga de James Bond continuaba, Pierce Brosnan se convirtió en Bond y protagonizó GoldenEye (1995), El Mañana nunca muere (1997) y El Mundo nunca es suficiente (1999). En Francia destacó Luc Besson, que en esa década dirigió Nikita (1990), León: El profesional (1994) protagonizada por Jean Reno y Natalie Portman, El quinto elemento (1997) una película de Ciencia Ficción y acción protagonizada por Bruce Willis y Milla Jovovich. Además de escribir por un lado Taxi Express (1998) y en la siguiente década The Transporter (2002), ambas dieron pie a sagas. En el caso de The Transporter, lanzó a la fama como héroe de acción a Jason Statham, quien ya había ganado fama por las películas de Guy Ritchie.

El nuevo milenio trajo una renovación del género, no solo motivado por el CGI sino porque ya son películas que pueden superar los 100 millones de presupuesto. La cartelera se llenó de blockbusters que llenaron las salas y el género de acción se convirtió uno de los géneros más rentables. En los primero años de la década se estrenó A todo gas (The Fast and the Furious) (2001) de Rob Cohen, protagonizada por Vin Diesel y Paul Walker. Esta película sobre un policía que se infiltra en una banda de corredores de coches ilegales se convirtió en un hito generacional y dio pie a una saga que sigue en pie a día de hoy. Ha tenido spin-offs como A to do gas: Tokyo Race (2006) y Fast & Furious: Hobbs & Shaw (2019)

Además, en 2009 la saga tuvo un cambio de rumbo, alejándose del mundo callejero del tuning y tomando un camino de pura acción. Las películas se basaron más en un cine de atracos y espionaje desde el estreno de Fast & Furious: Aún más rápido (2009) y llegando a la 9º película prevista para 2021 además de la 10º, prevista que sea la última de la saga actual. 

En esta década además vemos un cambio de en la saga de James Bond con Daniel Craig como actor y un Bond más realista y sucio cercano al héroe arquetípico de acción que al playboy que se venía encarnando desde Sean Connery. Estamos hablando de películas como Casino Royale (2006), Quantum of Solace (2008) y continuando este estilo con Skyfall (2012) y la más reciente Sin tiempo para morir (2020)

Trailer A todo gas 3: Tokyo Race 

Otras sagas que continúan en esta década son Misión Imposible, Star Trek, que en 2009 recibe un reboot de mano de J.J. Abrahms, Matrix, Transporter y Star Wars entre otros. De estas destaca la franquicia creada por George Lucas en los 70 que en esta década completa la trilogía de la precuela con el Episodio II: El ataque de los clones (2002) y Episodio III: La Venganza de los Sith (2005). En estas películas las dosis de acción se ven aumentadas con las peleas de sables y las persecuciones espaciales dentro de batallas de grandes cruceros en el espacio. Y la saga de Bourne, que se inició en 2002 con El caso Bourne de Doug Liman. Basándose en las novelas de Robert Ludlum, estando protagonizadas por Matt Damon y que a día de hoy ha tenido 5 películas. 

Pero también se inician otras sagas como el Universo cinematográfico Marvel (UCM), una unión de largometrajes, cortometrajes y series basadas en los cómics de la compañía estadounidense. Pasando en menos de 10 años de ser una saga, más a ser un estandarte en niveles cinematográficos del cine de masas y a dominar las taquillas a nivel mundial. Gracias sobre todo a la figura de Kevin Feige, que ha hecho del cine basado en superhéroes, una de las piezas clave del cine actual. Y en parte todo esto se debe a la compra de Marvel en 2009 por parte de la compañía Disney y las prácticas de la compañía de Anaheim que ha potenciado el producto consiguiendo que Vengadores: Endgame (2019) se convirtiera en la película con más recaudación de todos los tiempos. Vengadores: Endgame significó el cierre de la saga que se inició con la primera película Iron Man (2008) de Jon Favreau.

Trailer de Vengadores: Endgame 

Otro super-héroe, en este caso de DC Comics: Batman, es el protagonista de una trilogía dirigida por el director británico Cristopher Nolan, protagonizadas por Christian Bale, que encarna a Bruce Wayne en Batman Begins (2005), El Caballero Oscuro (2008), El caballero oscuro: la leyenda renace (2012). De la trilogía destaca El Caballero Oscuro, que ganó dos Oscars, uno a mejor actor de reparto para Heath Ledger en su papel de Joker y de mejor edición de sonido. 

Otra famosa serie de películas fue Kill Bill, donde Quentin Tarantino realiza un homenaje al cine de acción, al cine de artes marciales hongkonés y al spaghetti western.  Estamos hablando de Kill Bill Vol. 1 (2003) y Kill Bill Vol.2 (2004). Estos filmes presentaban a Uma Thurman como una heroína de acción, en una década que se empezaban a ver más protagonistas femeninas en las películas de acción como Lara Croft: Tomb Raider (2001)

La década de  2010 se presenta igual que la anterior, las secuelas y el reboot se establecen como un método fácil y rentable de ganar dinero. El éxito de Marvel hace que el resto de estudios prueben a tener su propio universo de películas de acción y aventuras, como el caso de DC y el universo extendido de DC,

Se crearían películas como El hombre de acero (2013), Batman v Superman (2016), El amanecer de la justicia (2016) Liga de la Justicia (2017). Estas películas no funcionaron entre crítica y público, pero Wonder Woman (2016) de Patty Jenkins, Aquaman (2018) de James Wan o ¡Shazam! (2019) de David F. Sandberg, apuntalan el universo. 

Trailer de Logan

Otras sagas de superhéroes son X-Men, a pesar de ser parte del Universo Marvel, la dueña de los derechos cinematográficos era 20ºCentury Fox. Esta saga se inició en el 2000 con X-Men (2000), X-Men 2 (2002) y X-Men: La decisión final (2006) y que desde X-Men: primera generación (2011) ha tenido una serie precuela donde destaca Logan (2017) de James Mangold. Dentro de este universo se encuentra también Deadpool (2016), adaptando el personaje de Marvel al cine con un estilo cómico y autoparódico. 

Dentro de los productos de Marvel también se encuentra Spiderman, el personaje que se encuentra en manos de Sony y que a principios de los 2000 recibió una trilogía al igual que Batman en el caso de DC. En este caso dirigida por Sam Raimi y protagonizada por Tobey Maguire y compuesta de Spider-Man (2002), Spider-Man 2 (2004) y Spider-Man 3 (2007).

Ajeno al cine de superhéroes, en esta década empezaron dos trilogías que cambiaron el cine de acción, por un lado, en 2010 se estrenó Los Mercenarios de Sylvester Stallone. Una película de acción que juntaba en una misma película a estrellas del género de la era de acción como Stallone, Schwarzenegger, Willis junto a figuras más populares del cine de acción actual, como Jason Staham o Jet Li. Hasta el día de hoy ha tenido dos secuelas, añadiéndose cada vez más estrellas de acción como Jean Claude Van Damme, Víctor Ortiz, Ronda Rousey o Antonio Banderas.

Y en 2014 se vio el estreno de John Wick (Otro día para matar) (2014), de Chad Stahelski y David Leitch con guion de Derek Kolstad. Una obra maestra que dio un vuelco el género y renovando a Keanu Reeves como actor de acción. Este filme dio lugar a una trilogía de películas con spin-offs y una serie sobre las historias transcurridas en el Continental, el hotel-cuartel de la organización de sicarios. 

Trailer de John Wick: Pacto de sangre

Los logros de John Wick son en gran parte gracias a su director, Chad Stahelski, quien fue doble de Reeves en Matrix  y usó su experiencia para coreografiar las escenas.  De las mejores del género en los últimos años y siendo por otro lado uno de los mejores ejemplos del gun-fu, que próximamente será explicado en otro apartado.  Keanu Reeves dirigió en 2013 su opera prima, El poder del Tai Chi, una película de acción transcurrida en la República Popular de China y Hong Kong protagonizada por Tiger Hu Chen y el propio Reeves.

2. Características del género de acción

El cine de acción presenta las siguientes características: 

  • Planificación. Aunque por lo general las películas suelen ser precisamente planificadas, en el cine de acción las escenas de acción se planifican minuciosamente para buscar el máximo espectáculo con la máxima seguridad para que se pueda realizar en una toma y sin heridos. En especial aquellas que requieran explosiones y destrucción de cosas en la coordinación de equipos técnicos, que van desde maestros armeros, a pirotécnicos y el equipo de especialistas y dobles, que realizan las escenas de acción y se ponen en riesgo con tal de tener la toma perfecta. 
 
  • El protagonista. Aunque ya desde los 80 había actrices protagonizando películas de acción. El género se ha caracterizado por presentar en sus películas hombres atléticos que suelen preferir trabajar solos, representando el ideario individualista típico de la Sociedad Estadounidense. Otro punto de estos personajes con las secuelas emocionales que le motivan, pero no muestra, como ejemplo de la frialdad emocional que se suele asociar con el ideal masculino. 
steadicam ejemplo de plano secuencia

Steadicam

  • Las secuelas. Es un género caro de producir, pero a su vez deja grandes beneficios. Las películas de acción suelen tener secuelas para poder seguir explotando la idea dentro de sagas y franquicias. Por ejemplo, el éxito de las películas de Marvel ha motivado a que éstas secuelas estén conectadas dentro de un universo cinematográfico conjunto. Ejemplo de ello son: La Jungla de Cristal , Misión Imposible o James Bond
 
  • La Steadicam o estabilizador de cámara. Este aparato que permite grabar escenas desde el punto de vista de un personaje de forma estable, compensando el movimiento del cámara. Fue creada en 1975 y su importancia en el cine de acción es su facilidad al grabar persecuciones y seguir personajes en secuencias de acción. 
 
  • El uso de chascarrillos o “One liners”. Frases cortas con un sentido cómico. Suelen ser la marca del personaje y en ocasiones hasta del actor. Son usadas en momentos clave tanto por el héroe o el villano. Ejemplo de ello es: “Sayonara, baby” pronunciada por Arnold Schwarzenegger en Terminator 2: El juicio final (1991) de James Cameron que se convirtió en una marca del actor o “Yipi ka yei hijo de puta” por parte de Bruce Willis en el papel de John McClane en La jungla de cristal ( Die Hard) (1988) de John McTiernan. 
 
  • Armas y luchas. Un elemento base de cine de acción suelen ser los combates, por un lado, tenemos los tiroteos en los que se usan armas de todo tipo, ya sean pistolas, metralletas o en casos más extremos, lanzagranadas y lanzallamas, en este caso ya nos encontramos con m aterial militar. Por el otro, están los combates cuerpo a cuerpo con técnicas de combate militar, de boxeo y de artes marciales o mixtas.

«Sayonara Baby» El Terminator 2: El juicio final

3. Subgéneros

Acción de ciencia ficción: 

En este subgénero se combinan elementos de Ciencia Ficción, como armamento futurista, o naves espaciales, aunque también se suelen incluir películas sobre distopías, en las que los héroes se rebelan contra un sistema opresor que de alguna forma les arrebata la libertad. Ejemplo de este género son: Demolition Man (1993) de Marco Brambilla, El quinto elemento (1997) de Luc Besson, 1997: Rescate en Nueva York (1983) de John Carpenter, Battle Royale (1999) de Kinji Fukasaku y recientemente las sagas de Los Juegos del Hambre

Buddy cop: 

Es un subgénero popular en la que dos protagonistas (agentes de policía) son por lo general opuestos en carácter, ideas o formas y deben trabajar unidos en un caso para poder resolver un crimen o acabar con un criminal. Y de paso crear o reforzar una relación de amistad. A este subgénero pertenecen películas como Límite: 48 horas (1982) de Walter Hill, Arma Letal (1987) de Richard Donner o Bad Boys (1995) de Michael Bay.

Comedia de acción: 

Este subgénero fusiona el cine de acción con la comedia. Aunque por lo general las películas de acción suelen tener frases y momentos cómicos, en la comedia de acción toma mayor relevancia. Ejemplo de este submundo son las comedias “slapstick”, que se popularizaron en el cine mudo, con Buster Keaton o Charlie Chaplin como referentes. Otros referentes son Jackie Chan, que a sus películas añadía un toque cómico a sus combates frente al estilo dramático de Bruce Lee. O Eddie Murphy, que en los 80 protagonizó Límite: 48 horas (1982) y Superdetective en Hollywood (1984) de Martin Brest. 

Escena de Jackie Chan

Disaster film o películas de desastres: 

Las películas de este subgénero suelen centrarse en algún desastre natural o generado por el hombre, ya sean accidentes o guerras nucleares, inundaciones, volcanes o terremotos. Un género que tuvo gran popularidad en los 70 con películas como El coloso en llamas (1974) de John Guillermin, Volcano (1997) de Mick Jackson o 2012 (2009) de Roland Emmerich. A este subgénero se le puede añadir películas en mundos postapocalípticos como Mad Max 2 (1981) de George Miller. 

Espionaje: 

Las películas de este mundo es un agente secreto de un gobierno u organización enviado para acabar con alguna amenaza que ponga en riesgo al sistema y que sea lo suficientemente peligrosa o compleja para no enviar un ejército. A este subgénero por otro lado fue el que potencio el cine de acción, pertenecen las sagas de James Bond, Misión Imposible y recientemente Atómica (2017) de David Leitch y Operación U.N.C.L.E. (The Man from U.N.C.L.E.) (2015) de Guy Ritchie. 

Gun-fu: 

Este subgénero combina tiroteos y artes marciales, por un lado, está el uso de armas de fuego, y por el otro, la coreografía y la sofisticación de las artes marciales. Surgió en el cine hongkonés de los 80 y tiene como padre a John Woo con A Better Tomorrow (1986). 

En este filme vemos una historia de matanza heroica nos presentaba ideas del cine de Kung Fu como: el honor, la hermandad y la redención en un contexto actual y urbano de mafias combinado con tiroteos precisamente coreografiados .  La película que lanzó a este subgénero en Hollywood fue John Wick: Otro día para matar (2014). Otras películas importantes de Gun Fu son Kingsman: Servicio secreto (2014), o Kick-Ass (2010).

A Better Tomorrow

Thriller de acción: 

En este subgénero se presentan películas relacionadas con el cine negro y misterio. Suele tener un protagonista ética-mente justo que en ocasiones es empujado a romper las normas con tal de conseguir su objetivo. Además de presentar violencia en altas cantidades. A este subgénero se puede encuadrar el cine de vigilantes como El justiciero de la ciudad y de policías justicieros como Harry el Sucio

Películas de superhéroes: 

Este subgénero recientemente ha surgido como uno de los más importantes del cine de acción. Combina acción con ciencia ficción y fantasía, al tratar de seres con cualidades sobrehumanas. Estas películas suelen basarse en personajes de cómics. Son filmes orientados a la acción, aunque suelen darse dosis de comedia y drama. 

En tiempos recientes estas películas han tratado de humanizar a estos personajes, dándole secuelas psicológicas o fallos que les marcan. Personajes populares de este subgénero son Batman, Superman, Iron Man, Spider-Man, Lobezno o Deadpool. Y de este subgénero han surgido franquicias como Marvel y DC.