Caballero sin espada

El gobernador Hubert Hooper tiene que elegir al candidato que sustituya al recién fallecido senador Sam Foley. Las presiones que recibe de Jim Taylor, un político corrupto, hacen que Hubert delegue su elección a una moneda que tira al aire, y cuyo resultado a la caída da como elegido a Jefferson Smith (James Stewart, 'Historias de Filadelfia'), un hombre reformista e idealista.

A su llegada a Washington D.C., su carácter afable y honesto, pero también ingenuo, hace que la prensa empiece a hablar mal de él como un tipo blando que no hace nada en la capital, empañando rápidamente la reputación de Smith. A pesar de todo, le proponen que lleve a cabo un proyecto de Ley para salir de su situación y ganarse el afecto de algunos senadores.

Sin embargo, las cosas no van bien y la reputación de Smith sigue cayendo. Varias personas le recuerdan que está donde está gracias a las presiones de sus superiores, pero que ese es un juego desconocido para él. El joven senador es acusado sin pruebas de un delito que no ha cometido. Todo está en su contra, a pesar de su inocencia, pero su convicción hará mantenerse firme hasta las últimas consecuencias.