Bournemouth y Manchester United jugaron un encuentro en el que más allá del resultado evidenciaron a las mil maravillas cómo está siendo la temporada de ambos (2-2). Mientras que los de Iraola no le tienen miedo a nada y arriesgan sea el que sea el rival al que enfrentan, los de Ten Hag son un flan en defensa. La Champions ya está casi imposible para ellos.
En la primera mitad, 'The Cherries', apretaron arriban y salieron con la clara intención de encontrar las cosquillas de la zaga mancuniana. En el 6' Maguire ya tuvo que sacar un balón bajo palos. Sin embargo, el asedio local empujado por el ambiente del Vitality Stadium, no cesaba.
En el 16' Solanke rompió el resultado 'gafas'. Con su diana logró la número 17 de la temporada en su cuenta, lo que supone el récord individual de un jugador del Bournemouth en una misma temporada en Premier League. El delantero inglés bailó en la frontal al joven Kambwala, para batir desde esa misma posición con un tiro seco a Onana.
El United no reaccionó y las ocasiones siguieron llegando, pero un heroico Onana mantuvo a los suyos en el partido. En el 30', Bruno Fernandes a bocajarro aprovechó una jugada embarullada para poner tablas en el marcador.
El Bournemouth se rebeló y siguió apretando, dando un aviso con un tiro de Dango rozando el palo, y volviendo coger ventaja en el 35' gracias a Kluivert, quien aprovechó la fragilidad atrás de los red devils para meterse dentro del área como si fuera su propiedad y anotar con un tiro raso al primer palo. Entre el larguero y luego Onana, los visitantes consiguieron llegar al descanso con vida.
Bruno Fernandes al rescate en la segunda mitad
Tras la reanudación el guion del encuentro cambió un poco. El Manchester United adelantó líneas en busca del empate y el Bournemouth, que no se echó atrás en ningún momento, sí que dejó de ser efectivo en su presión.
Tras un tramo de juego intrascendente, un claro penalti por mano de Smith le dio la oportunidad a Bruno Fernandes de rescatar al Manchester United. El portugués no falló desde la pena máxima y engañó a Neto.
En el tramo final, ambos a su manera lo intentaron, aunque con ocasiones tímidas. En el United todo pasaba por la inspiración de Bruno, mientras que en los rojinegros los centros laterales sin rematador se sucedían.
Sin embargo, en la última jugada del partido hubo susto mayúsculo para los visitantes, puesto que el colegiado en primera instancia pitó penalti de Kambwala. Por suerte para ellos, tras una larga revisión del VAR el colegiado señaló falta fuera del área y el lanzamiento de Enes Unal impactó en la barrera.