¿Dónde bañarse en el Lago de Como?

Con la llegada del calor, las localidades del lago de Como proponen un ambiente ideal para pasar el día y disfrutar de las transparentes aguas y la belleza de sus montañas. Saliendo desde Milán en tren, desde Estación Central o desde Porta Garibaldi, se puede llegar a algunos pequeños pueblos con mucho encanto y sobre todo, playas de acceso gratuito para poder bañarse.

El lago de Como a lo largo de sus 170 kilómetros de costa entre las provincias de Como y Lecco, presenta varias posibilidades para el turismo de playa. Sin embargo, como en toda Italia, es muy común que las playas estén tercerizadas y sea necesario pagar una entrada para poder llegar al agua.

Las siguientes playas son de acceso gratuito y muy fácil de alcanzar con transporte público desde Milán, además, las horas de luz en la playa se extiende hasta el atardecer.

Abbadia Lariana

Es la playa más grande de la zona, y la primera a la que se llega con el tren que parte de Lecco, por lo tanto, es la más visitada. Durante el fin de semana, es recomendable salir en el primer tren de la mañana para poder llegar con tranquilidad.

La playa de Abbadia Lariana es un largo litoral natural de guijarros blancos, donde podrá pasar momentos de relax a orillas del lago de Como. El nombre de Abbadia se remonta a la presencia de una antigua abadía benedictina construida en el siglo IX y su amplia costa recibe luz todo el día.

Acompaña la riviera del lago un camino peatonal, y en algunos lugares se puede disfrutar de la sombra de los árboles. Cuenta con un parador donde se pueden alquilar reposeras y disfrutar de opciones gastronómicas varias.

Desde Borbino, el pueblo junto a la playa, comienza el Sendero del Viandante, un camino por etapas que une Abbadia con Morbegno.

Lo mejor: playa amplia y hermosos atardeceres
Lo peor: muy frecuentada

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Lierna

Un par de paradas más allá de Abbadia Lariana, se encuentra este pequeño pueblo con su playa Riva Bianca. De tamaño más reducido, esta pequeña bahía, se encuentra junto a un pequeño borgo medieval llamado Castello di Lierna. Probablemente de origen celta, Lierna toma su nombre de la Hibernia romana (campamentos de invierno de las legiones romanas).

El pueblo medieval ha permanecido inalterado a lo largo del tiempo; se puede ver una iglesia románica con interesantes frescos del siglo XVI en su interior, y una reliquia de San Mauricio que es llevada en procesión cada año en la tarde del 22 de septiembre.

La playa cuenta con un kiosco restaurante muy bien equipado, que ofrece la posibilidad de almorzar o cenar, o simplemente hacer un aperitivo con vista al lago. Una parte de la plata tiene césped y sobre la vereda peatonal, se puede disfrutar de un poco de sombra.

Lo mejor: El borgo antiguo
Lo peor: La playa es pequeña

Dervio

Esta playa más distante de Milán, es una de las más visitadas por el turismo alemán. Su costa tiene amplios espacios verdes y arbolados, pero para acceder al agua es necesario bajar por las rocas.

Dervio recibe la fuerza de dos vientos, el Breva y el Tivano, que hacen el lugar ideal para los deportes náuticos: hay cuatro escuelas de vela en la zona. Sobre su gran paseo marítimo se pueden encontrar restaurantes de todo tipo.

Las montañas que rodean a Dervio ofrecen muchas oportunidades para realizar excursiones y paseos, como los que llevan a los refugios de Bellano y Nogara o a los montes Legnone y Legnoncino. 

Lo mejor: playas con césped y sombra
Lo peor: el tiempo de viaje

Colico

Esta playa es la elegida para los amantes de los deportes de agua, como el windsurf o el kitesurf, por el constante viento de la zona. Cuenta también con amplias playas de acceso gratuito cubiertas de césped.

El agua no es de lo más cristalina de la zona y las zonas balnearias tienen poca profundidad, haciendo que el lago sea ideal para ir con niños pequeños. 

Desde Milán es la más lejana, por lo que es necesario salir bien temprano por la mañana. Desde Colico en dirección Dervio, se puede transitar una de las tapas del Sendero del Viandante, uno de los itinerarios de trekking más bellos de la Lombardia. En la zona además, se puede visitar un fuerte militar de la I Guerra Mundial.

Lo mejor: el entorno natural
Lo peor: la poca profundidad del lago en la playa