El hogar al que regresan Antoine Griezmann y Erika Choperena, vecinos de Simeone

Poco podía imaginar Antoine Griezmann (ni nadie) cuando en la primavera de 2019 dejaba el Atlético de Madrid para jugar en el Barcelona que solo dos años más tarde volvería a la que fue su casa durante cinco años. En aquel momento publicó en sus redes sociales un vídeo muy emotivo donde resumía los grandes momentos vividos en el club y fuera de él en sus años en Madrid. Entonces era una despedida, ahora ya está confirmado que podrá publicar en algún momento una segunda parte de la cinta, pues ha regresado para quedarse. De hecho, él mismo ha respondido a una publicación del club anunciando el cierre de su fichaje con las palabras “encantado de volver a casa”.

Y además de en sentido figurado, lo hace en sentido literal, y es que la familia regresa a la casa de La Finca en la que se instalaron en 2014 cuando aterrizaron en España por primera vez. Allí hicieron las maletas para marcharse y allí las deshacen ahora, a juzgar por las palabras del futbolista, encantados. Y es que se trata de una vivienda con todo tipo de comodidades, una construcción unifamiliar al nivel del resto en la exclusiva urbanización madrileña, en la que junto a su familia disfruta especialmente de la zona del jardín y de la piscina. Además, cuando todavía residía en ella era muy común verle salir por la mañana a correr por los lagos y zonas verdes de las que dispone en los alrededores.

Una de las anécdotas que se recuerda acerca de la vivienda del francés es cómo descubrió en su día que su entrenador era su vecino: “Cuando me mudé a La Finca, mi barrio en Madrid, me advirtieron que Diego Simeone vivía allí. Pero descubrí que su casa era realmente la de enfrente mía. Afortunadamente, está un poco cuesta arriba, por lo que no vemos de la una a la otra, así que no necesito cerrar las cortinas para estar tranquilo. De todos modos, el entrenador no interfiere en nuestras vidas”, contaba divertido en sus inicios en la ciudad.

En aquel momento ni siquiera él mismo podía hacerse una idea de cuántos momentos inolvidables viviría en la ciudad española, enmarcados en la casa que junto a su pareja eligió cuando se mudó. Y es que Erika Choperena, su actual mujer, y él se prometieron y se casaron en España, concretamente en Toledo en 2017, y también fue aquí donde formaron la familia de cuatro miembros que son ahora. Por ello no es de extrañar que guarden buenos recuerdos y que para ellos volver a Madrid sea volver a casa.

NI ella ni él jamás han hablado de su vida privada, pero sí comparten algunos de sus momentos familiares en Instagram y a raíz de esto habían sido muchos los seguidores que apuntaban a que en Barcelona, donde llevaban los dos últimos años, no habían terminado de encontrar su lugar. Tan solo ellos conocen con certeza cómo ha sido su temporada en la Ciudad Condal de puertas para dentro, pero parece evidente que la idea de regresar les ha entusiasmado.

Y es que, aunque su estancia en el Barça se trataba de una cesión de una temporada más una segunda opcional con opción a compra obligatoria, sorprendió que el movimiento se hiciera en el último día del mercado de fichajes de la liga de fútbol española. Pero el asombro no ha sido igual en todos los casos, y es que parece que su mujer ya preveía lo que finalmente ha sucedido, y en redes dejó pequeñas pistas para quien quiso cogerlas. Hace ya más de un mes, concretamente el 23 de julio, compartía una imagen con la siguiente reflexión: "Yo sé que estás haciendo un esfuerzo enorme, que a veces todo te cuesta el doble, pero paciencia, porque el que sabe esperar siempre recibe lo que se merece". Y ahora ha sido ella la encargada de recordar aquella ‘premonición’ a la que finalmente han acompañado la circunstancias.

Erika siempre ha jugado un papel fundamental en la carrera de su marido. Se conocieron cuando él todavía jugaba en la Real Sociedad y ella se convirtió en imprescindible a la hora de tomar decisiones, tanto es así que en una entrevista con la revista ‘Icon’ poco antes de su boda afirmaba que ella era la “jefa” de la relación, "porque es la que me lleva todo. Hay obras en casa y es ella la que lo maneja todo, los papeles de la casa, del club… Yo me olvido del papeleo. Así solo pienso en el fútbol. Eso me viene muy bien". Ahora es además su mujer y la madre de sus hijos. Juntos forman un buen equipo al margen del terreno de juego y juntos harán las maletas, una vez más, felices para instalarse en la casa en la que han vivido sus mejores momentos.