Fue otro de los grandes nombres de la jornada. “Para mí ha sido el mejor del partido”, declaró abiertamente sobre Yangel Herrera. La actuación del venezolano ante el Rayo Vallecano permitió dotar del equilibrio necesario al equipo, algo que ya vino haciendo en los últimos dos partidos en los que el Girona salió derrotado, con la diferencia de que el equipo supo contrarrestar las transiciones rivales.
Fue precisamente eso lo que nutrió al ‘vinotinto’ sobre el césped. A modo de oxígeno, el centrocampista se impuso en buena parte de sus intervenciones, ya fueran duelos, balones divididos o intervenciones tácticas que dotaron notablemente al juego de Míchel.
En su segundo año como jugador ‘blanc-i-vemell’, Yangel ha abandonado buena parte de sus molestias y lesiones para dar un paso al frente e imponerse a nivel defensivo y ofensivo. El interior bien podría definirse como ‘todoterreno’, pues sus condiciones son válidas para cualquier momento o condición del partido.
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Si el juego pide temple, Yangel se encarga de bajar las pulsaciones, tanto a sus compañeros como al rival. Es entonces cuando emplea su modo de poner el cuerpo y prepararse para cortar esféricos cada vez que el rival arma un contraataque. Si las intenciones de la cita, en cambio, piden un paso más en zona de finalización, por ahí aparece la versión más llegadora del venezolano. Tanto es así que las dos tímidas ocasiones que los gerundenses gozaron en el primer tiempo tuvieron como protagonista al centrocampista.
Yangel es indiscutible para los intereses del cuadro ‘gironí’. Es el encargado de equilibrar la balanza y repartir los pesos cuando el equipo se ve descompensado en cualquier zona del verde. Está en uno de sus mejores momentos de forma y, con él, el Girona quiere cerrar sus objetivos y certificar la tan deseada Champions.