Betis - Villarreal: Duelo de aspirantes en el Villamar�n

Despu�s de empezar con victoria sus estrenos en los torneos continentales, la Liga Europa y la Conference League, respectivamente, Betis y Villarreal se citan esta noche en el Benito Villamar�n, un estadio donde los verdiblancos han hecho pleno en el arranque liguero con dos victorias, registrando cuatro goles a favor y porter�a a cero. Comparecen los de Pellegrini obligados adem�s a reinventarse por el alto coste de la victoria continental, que se cobr� las lesiones de Juanmi y V�ctor Ruiz.

El conjunto amarillo visita Sevilla con la intenci�n de confirmar su mejor inicio de temporada. Los amarillos se han mostrado como un equipo hecho y solvente hasta la fecha. Un muro insuperable para sus rivales que le ha llevado a convertirse en el �nico equipo de las cinco grandes ligas europeas que todav�a no ha encajado un tanto esta temporada en competici�n liguera. Igualmente sus n�meros en ataque no desmerecen y le han permitido sumar puntos con facilidad en este arranque del curso. Ha llegado el momento, para ambos conjuntos, de presentar sus credenciales ante rivales directos, aunque el curso apenas haya comenzado.

Alternativas

A Manuel Pellegrini le toca reinventarse, justito de efectivos tras un mercado complicado y habiendo perdido en la �ltima semana a dos referentes como Fekir y Juanmi, m�ximo goleador verdiblanco la pasada temporada. El franc�s sufri� una lesi�n muscular frente al Real Madrid en el Santiago Bernab�u, y estar� apartado del equipo, al menos hasta despu�s del par�n de selecciones. Pellegrini recupera para la defensa a Pezzella, baja por sanci�n ante el conjunto de Ancelotti.

Por su parte, el once amarillo por el que apostar� Emery ofrece pocas sorpresas, si bien el vasco est� pendiente de la evoluci�n de Ra�l Albiol, baja en la cita europea a causa de un proceso v�rico. El veterano "mariscal" sigue siendo clave a sus 37 a�os y referencias obligada para entender la fortaleza defensiva castellonense. Su ausencia abrir�a una brecha en un muro, inquebrantable hasta le fecha, por el que podr�an llegar las primeras preocupaciones para Emery.