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- Pol�mica Ellen DeGeneres, la presentadora de los 280 millones de euros ca�da en desgracia
Hace unos d�as, Ellen DeGeneres regres� a la escena p�blica con el primer mon�logo de la gira que le llevar� a recorrer California este verano, y que aparentemente marca el final de su exilio, en buena parte autoimpuesto, del mundo del espect�culo.
La carrera de la presentadora, que hab�a sido uno de los rostros m�s queridos de la peque�a pantalla durante d�cadas, entr� en una espiral descendente en 2020 tras la salida a la luz de una serie de acusaciones de productores y empleados, que suger�an que hab�a permitido que se creara un ambiente "t�xico" en el plat� de su programa.
La pol�mica fue aumentando con el paso de los d�as y la aparici�n de nuevos testimonios, incluido de algunos invitados que pintaban una imagen de la humorista muy diferente a la que ella hab�a cultivado de cara al p�blico. Todo ello contribuy� a que su programa llegara a su fin en mayo de 2022 y, tras la emisi�n del �ltimo episodio, tom� la decisi�n de mantenerse alejada de la vida p�blica.
Ellen no ha pasado de puntillas sobre su ca�da en desgracia en su primer mon�logo en dos a�os. Ella misma asegura que se convirti� "en la persona m�s odiada de Estados Unidos" porque, de repente, el p�blico se hab�a dado cuenta de que aparentemente no practicaba el mensaje de amabilidad que predicaba.
"La chica 's� amable' no era amable. Ese era el titular", le asegur� a los espectadores que acudieron a verla.
Ellen tambi�n ha reconocido que cay� en una depresi�n y que su estado de �nimo afect� directamente a su matrimonio con la actriz Portia Di Rossi, quien ve�a c�mo iba perdiendo poco a poco todo por lo que hab�a peleado durante muchos a�os sin poder hacer nada por ayudarla. Aunque lo que m�s le doli� de toda aquella situaci�n fue tener que despedirse de su programa de la forma en que lo hizo.
"Le ha pasado factura a mi ego y mi autoestima. Hay tantos extremos en este negocio, que la gente o te quiere y te idolatra o te odia, y estos �ltimos son de alguna manera los m�s ruidosos", ha admitido.