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Tony Levin: el prolífico Hombre Stick

Tony Levin
Foto: Juergen Spachman

Pocos músicos en este planeta son como el bajista Tony Levin. Dueño de una técnica única bautizada como “funky-fingers”, desde 1976 ha sido el principal ejecutante del Chapman Stick, un bajo de diez o doce cuerdas en forma de estaca de madera. Ha tocado con cientos de músicos, pero su fama comenzó cuando conoció a Peter Gabriel –a cuya banda pertenece desde 1976- y Robert Fripp, quien lo invitó a integrarse a King Crimson en 1981.

Con motivo de la visita de Stick Men esta semana a España,  recuperamos la entrevista realizada en 2010 en ocasión del concierto en Caracas que coincidía con la publicación del disco debut del trío.

Juan Carlos Ballesta

 

Músicos inquietos y talentosos como Tony Levin no abundan. Nacido en Boston, musicalmente adoptado por Nueva York, a lo largo de 40 años ha desarrollado una depurada técnica y un distintivo sonido que le ha permitido tocar en cientos de discos y a presentarse con una gran cantidad de músicos dentro del jazz, el rock, el folk, la fusión, la world music y otros géneros, entre ellos David Bowie, Paul Simon, Carly Simon, Laurie Anderson, T-Bone Burnett, Tracy Chapman, Judy Collins, Alice Cooper, Eumir Deodato, Dire Straits, Peter Frampton, Art Garfunkel, Gowan, Tim Hardin, John Lennon, Ivan Lins, Chuck Mangione, Mike Manieri, Herbie Mann, Stevie Nicks, Lou Reed, Shankar, Andy Summers, Steven Wilson….

Sin embargo, lo que puso en el mapa musical a Levin fue su unión a la banda de Peter Gabriel en ocasión del primer disco en solitario del ex vocalista de Genesis, editado en 1977. A su lado ha permanecido desde entonces, como una pieza clave en su sonido y puesta en escena.

Poco después, en 1981, es requerido para la nueva encarnación de King Crimson junto a Adrian Belew, Bill Bruford y Robert Fripp con los que editó en aquella primera etapa, la fabulosa trilogía Discipline (1981), Beat (1982) y Three of a Perfect Pair (1984). A partir de ese período, Levin ascendió al Olimpo.

Luego vendrían varios proyectos de altos quilates, entre ellos Liquid Tension Experiment, Bruford Levin Upper Extremities y Bozzio Levin Stevens. Su debut en solitario se produjo en 1995 con el exquisito World Diary, que de paso dio inicio a su disquera Papa Bear. En Resonator (2006) debutó como cantante solista. El siguiente, Stick Man (2007) fue la inspiración directa para la formación del trío Stick Men.

Con motivo de la primera visita a Caracas con Stick Men, conversamos con él

Puede que tu primera participación en una sesión de grabación haya sido con Gap Mangione Trio en 1968, seguida en 1970 por su hermano Chuck, Sabica & Joe Beck y Jean-Pierre Ferland. ¿Qué recuerdas de aquellos días iniciales?

¡Buena memoria¡ ¡Esos nombres acaban de volver a mí! Recuerdo el trabajo con Gap muy bien. Primero porque fue mi primera sesión de grabación verdadera en Nueva York y segundo porque yo todavía estoy en contacto con él, tocamos hace unos pocos meses en un concierto conmemorativo. Tocar jazz con Gap y con su hermano Chuck fue parte de mi proceso de aprendizaje con el bajo. Después de trabajar mucho con ellos en los 60 en Rochester, decidí tocar rock y me mudé a Nueva York. Ese entrenamiento fue muy valioso. Estando en NY, fui requerido para tocar en un “Rock Encounter” con una sección rítmica de rock y con Sabicas. Fue un gran honor conocer al padre del flamenco moderno y de paso hacer música con él.

Entonces, ocurrió otro afortunado encuentro, como fue tocar con Jean-Pierre Ferland en su álbum Jeaune, una muy importante referencia en el movimiento político que buscaba oficializar el idioma francés en Québec. Así, desde entonces, siempre que toco en Québec, con quien quiera que sea, hay alguien en la audiencia con ese álbum para que se lo firme.

En los 70 grabaste para muchos artistas importantes y exitosos como Carly Simon, Alice Cooper, Herbie Mann, Deodato, Don McLean y Paul Simon y saliste de gira con varios de ellos. ¿Cuál de aquellos conciertos disfrutaste más?

No tengo favoritos entre todos esos álbumes y conciertos de los que fui parte. Me considero muy bueno enfocándome en la música que estoy haciendo en el momento, y pongo mucho de mi pensamiento y energía en tratar de innovar mi forma de tocar. Pero nunca he sido bueno en mirar hacia atrás y escuchar lo que hice antes. De hecho, la única razón por la cual siempre he estado consciente de la mayoría de los álbumes en los que he tocado es porque los recuerdo cuando estoy haciendo entrevistas.

No hay duda que tu nombre comenzó a ser bien conocido en 1977. ¿Cómo te encontraste con Peter Gabriel y cómo ha sido esa especial y duradera colaboración?

Como de costumbre, fui afortunado en encontrarme a Peter. Su productor, el gran Bob Ezrin, que había producido muchos proyectos de rock clásicos, me incluyó en algunos discos –como Lou Reed y Alice Cooper– y pensó que yo debería ser adecuado para Peter. En esa misma grabación, conocí a Robert Fripp, quien más tarde me invitaría a unirme a King Crimson.

Tanto Gabriel como King Crimson me ayudaron a amoldar mi ejecución y la forma de aproximación a la música progresiva. Yo de todas formas estaba buscando formas distintas de tocar, pero aquellas situaciones me enseñaron mejores maneras de encontrar mi propia voz y no cesar en el esfuerzo de desarrollar mi forma de tocar.

¿Cuándo comenzaste a tocar el Chapman Stick y cómo creaste la técnica del “Funky- Fingers”?

La primera vez que toqué el Chapman Stick fue en 1976 en el Tour con Peter Gabriel, antes de usarlo en una grabación. La nueva dirección que tomó King Crimson para el disco Discipline fue el vehículo perfecto para comenzar con la técnica. A través de los años he tocado el Stick en muchas situaciones musicales, siendo la culminación, creo yo, mi disco Stick Man y la formación del grupo con el que he estado presentándome en los últimos años, Stick Men.

En este grupo, junto con Michael Bernier – también ejecutante del Stick, luego sustituido por Markus Reuter– he podido explorar la más angulosa música que quiero componer y las muchas facetas de este instrumento, el cual permite realizar una gran cantidad de cosas inusuales, aún con un solo ejecutante. ¡Imagina si hay más de uno!

King Crimson
Belew, Fripp, Bruford y Levin: King Crimson en los 80
Sin duda, una piedra angular de tu carrera la representó King Crimson en 1981, no sólo por la importancia de esa banda sino por el encuentro con el gran baterista Bill Bruford. Levin-Bruford es una de las más imaginativas y sólidas bases rítmicas de jazz-rock, quizá la mejor de su tipo. ¿Qué balance haces de tu estancia en KC?

Si, King Crimson, y cada uno de los tres miembros a los que me uní, me han influenciado mucho. Bill Bruford me otorgó inspiración y me llevó hacia nuevas áreas relativas a una sección rítmica. La forma de tocar guitarra de Adrian Belew es única, por lo que he sido afortunado de estar en una banda con él. Igualmente Robert Fripp, cuya visión de KC es lo que seguimos en el grupo.

Me encantan los otros proyectos que hice con Bill (todos los músicos que participaron en Bruford Levin Upper Extremities están frecuentemente diciendo lo mucho que les gustaría reactivarlo). También me gustó mucho tocar con Bill en la encarnación de Yes que fue llamada Anderson Wakeman Bruford & Howe.

¿Podrías escoger 3 o 4 de tus colaboraciones preferidas de todos los tiempos? Entre mis favoritas están Cloud About Mercury de David Torn y From the Caves of the Iron Mountain de Levin Marotta Gorn.

Aunque de nuevo debo recalcar que no tengo favoritos, escojo algunas de las colaboraciones que realmente me gustan más: Bozzio Levin Stevens, con quienes hice dos discos; Liquid Tension Experiment, con los virtuosos de Dream Theater, con quienes edité dos álbumes e hicimos una gira. Por supuesto que Cloud About Mercury es estupendo. Y también me encanta BLUE, con David Torn, Bill y Chris Botti.

Hice un corto tour con Allan Holdsworth (fallecido en 2017), Terry Bozzio y Pat Mastelotto. Yo llamo a la banda HoBoLeMa. ¡Tocamos solo música improvisada! Ese es un grupo que también debe ser sumado a mi lista de de favoritos.

¿Qué tipo de música escuchas usualmente? ¿Podrías mencionar 2 o 3 discos que te hayan gustado en los últimos meses?

Escucho mucha música clásica. Hay momentos cuando estoy muy ocupado haciendo música y pensando en eso que no puedo escuchar casi nada. Últimamente he estado oyendo a un grupo que me gusta bastante, Sleepytime Gorilla Museum.

¿Qué deberíamos esperar del show de Stick Men en Caracas? ¿Van a tocar alguna pieza de King Crimson?

Tocaremos una variedad de música. Haremos algo de mi álbum Stick Man y del próximo disco del grupo. Pero por supuesto que no podremos resistir tocar música de Crimson, teniendo a dos de sus miembros en un grupo de tres integrantes. La mayoría de los temas serán instrumentales, pero Michael Bernier y yo compartiremos algunas voces. Incluso habrá una extraña pieza que cantamos todos sobre los supercolliders.

Somos una banda dentro de la estética progresiva, pero eso no significa que no tratemos de exigirnos a nosotros mismos y como banda para no hacer necesariamente lo que hicimos hace años y que normalmente se espera de nosotros. Afortunadamente, la música es siempre de alta calidad y, definitivamente, el show reflejará mi atracción por el rock más filoso y arriesgado.

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