Opinión | Sergi Roberto no deja lugar al debate de la capitanía
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Sergi Roberto no deja lugar al debate de la capitanía

Sergi Roberto, capitán ante el Valladolid

Sergi Roberto, capitán ante el Valladolid / Valentí Enrich

Jordi Gil

Jordi Gil

Con el adiós de Sergio Busquets y Jordi Alba se ha abierto un debate mediático sobre quién debe llevar el brazalete la próxima temporada. Una agitación que, sin embargo, ofrece pocas dudas en la realidad. Sergi Roberto es el segundo capitán y es el relevo natural de Busquets. Pero además reúne todas las características para ser el nuevo capitán del Barça.

Para empezar, lleva en la entidad desde los 15 años y nadie mejor que él entiende en el vestuario todo lo que conlleva “el club más difícil del mundo”, como definió Xavi. Sergi Roberto conoce el entorno y guiará a sus compañeros ante conflictos que se puedan generar para evitar incendios.

El de Reus es un barcelonista de cuna. Mirará los intereses del club por encima de los personales, como ha hecho durante toda su carrera, jugando lesionado mucho tiempo sin decir nada, pese a que luego le cayeran críticas. Prefirió callar, ayudar a los entrenadores que lo reclamaban y trabajar en silencio.

Renovaciones

Uno de sus últimos gestos más generosos ha sido aceptar dos renovaciones consecutivas por unas cantidades mínimas y año a año. Una iniciativa que ha sido un alivio para el dañado ‘fair-play’ financiero del Barça, que suma a un jugador que cubre muchos huecos a nivel deportivo sin que ello repercuta en la economía. Su presencia en el equipo es una bendición para Xavi Hernández.

El técnico fue clave para su continuidad. Y también Joan Laporta, quien valora mucho el comportamiento que siempre ha tenido el futbolista. El buen ‘feeling’ entre el presidente y el capitán es un elemento que suma para abordar distintas situaciones que puedan suceder a lo largo de la temporada.

Aglutinador

Otro motivo para que Sergi Roberto sea el nuevo líder del vestuario es su sintonía con los diferentes grupos del vestuario. Los canteranos o jóvenes, como Gavi, Araujo o Pedri, lo ven como un ejemplo y con los extranjeros tiene un gran entendimiento. Su dominio del inglés y talante abierto a todo tipo de sensibilidades han ayudado. Con Ter Stegen o De Jong, por decir dos nombres, se lleva de maravilla. Los compañeros saben que Sergi Roberto siempre les echará una mano si lo necesitan.

Los otros compañeros de viaje en la capitanía están por decidir. Ter Stegen será el segundo y quedan por dilucidar el tercero y cuarto. El vestuario decidirá, pero si los elegidos son De Jong, Araujo, Pedri o Lewandowski, por citar cuarto ejemplos, tendrán en cabeza un Sergi Roberto para poner sensatez. La caseta azulgrana queda en buenas manos.