¿Te ha gustado **Feud **y quieres ver más? Estas son las mejores series de Ryan Murphy, según la crítica, de títulos de terror como American Horror Story a iconos de la ficción queer como Pose. El veterano productor estadounidense, abiertamente gay y comprometido con el colectivo LGTB+, es uno de los hombres más poderosos de la industria de la televisión, y su fichaje de hace unos años por Netflix (por 300 millones de dólares) fue solo un síntoma más. Hoy abordamos su contribución al panorama no solo creativo, también social, durante más de 15 años.
19. Vigilante
Las historias escabrosas basadas en hechos reales son una indudable especialidad de Ryan Murphy, que en Vigilante produjo lo que podría haber sido una temporada de American Horror Story, pero con un punto más de irónico thriller de sobremesa. Protagonizada por Naomi Watts y Bobby Cannavale, narra lo que le sucede a una familia cuando se muda a una exclusiva mansión y empieza a recibir anónimos.
18. The Politician
Nos sorprende que la que fue la serie inicial de Ryan Murphy para Netflix ocupe uno de sus puestos más bajos, pero es cierto que The Politician condensa las grandes irregularidades de sus otros títulos. A pesar del inteligente retrato del hombre gay incapaz de mostrarse a los demás, no termina de definirse entre serie política y adolescente, y sus intrigas satíricas no son suficientes.
17. The New Normal
En 2012 y durante solo una temporada, Ryan Murphy produjo para Fox esta sitcom sobre un joven matrimonio homosexual (Andrew Rannells y Justin Bartha) que acogen en su casa a la chica cuyo futuro bebé quieren adoptar. Hoy chocaría por esa anticuada dualidad entre el gay gay y el gay hetero, pero fue atrevida en su cuestionamiento de los valores tradicionales de la familia.
16. The Prom
Es la primera excepción que hacemos en la lista para incluir una película, aunque se nos ocurren pocas cosas buenas que decir sobre The Prom. Y eso que tenía ingredientes muy Murphy. Es la adaptación de un musical de Broadway sobre unas estrellas del teatro que, para relanzar su imagen, se comprometen a darle a una chica lesbiana su baile de graduación soñado. Suena cuqui, pero es mediocre.
15. Dahmer
No compartimos del todo la valoración de la crítica sobre Dahmer, de Netflix, pero es desde luego una serie muy contradictoria. A medio camino entre Ratched o una temporada de American Horror Story y una buena entrega de American Crime Story, esta ficción sobre un asesino en serie al que la policía dejó escapar en varias ocasiones no encuentra el equilibrio entre el comentario social y el morbo violento.
14. Hollywood
En esta ocasión estamos de acuerdo. No solo es que Hollywood, que reimagina una industria del cine en la que había lugar para las estrellas negras y gais, sea aburridísima y carezca de sentido, historia y dirección, sino que su tratamiento de temas como la prostitución o el abuso de poder es un tanto problemático. Es desde luego una de las producciones más fallidas del prolífico Ryan Murphy.
13. Popular
Esta serie de 2002 es el primer crédito del guionista estadounidense como creador, y ya adelantó muchas de las inquietudes que años después veríamos en 'Glee'. Y en (casi) todas sus otras ficciones. Popular, sobre dos hermanas adolescentes muy diferentes, era una interesante sátira que oponía dos modelos de teen fiction: la inteligente y la del humor negro y la superficial y la de la trivialidad.
12. Ratched
La tercera serie de Murphy para Netflix reúne los aspectos más criticados de sus otras ficciones para la plataforma. Entre otras, una mezcla de géneros que parece querer convencer a todo el mundo (el terror, el misterio, el melodrama) y un problema de tono que despista a la hora de saber si estamos ante una sátira o una reflexión. Ratched gira en torno a la enfermera de Alguien voló sobre el nido del cuco.
11. American Horror Stories
American Horror Stories nació como un complemento a American Horror Story en una de las épocas más atareadas de Ryan Murphy, pero ahora, con una segunda temporada, podemos decir que ya es una producción independiente. Se trata de una ficción antológica de terror en la que cada capítulo cuenta una historia diferente y donde se mezclan personajes y relatos de la serie original.
10. Halston
No sabemos muy bien si es que Halston fue incomprendida o que ya le exigimos demasiado poco a las series que Ryan Murphy produce para Netflix. Este biopic del primer diseñador estrella, Roy Halston, tiene a un Ewan McGregor pasadísimo de tuerca, y estamos de acuerdo en que transita de forma superficial sobre algunos temas, pero nos gusta su reflexión sobre los genios gais y su legado.
9. Glee
Llegamos a la que sigue siendo su ficción más popular (¿o lo es American Horror Story?), o al menos la más recordada por una generación de adolescentes que hoy todavía ven sus series. Glee fue muy valiente en su formato musical y en su propuesta por la libertad y la diversidad, pero sucedió con ella algo común en la televisión en abierto: el desgaste creativo prolongado durante seis temporadas.
8. Nip/Tuck, a golpe de bisturí
Poco después de Popular y durante seis temporadas, Ryan Murphy produjo su primera ficción para la cadena FX, donde ha estrenado sus mejores producciones. Nip/Tuck, a golpe de bisturí (quizá recuerdas verla de madrugada en la televisión española) es desde luego su serie más heterosexual. Narra la vida de dos exitosos cirujanos plásticos y aborda temas como el incesto o las parafilias.
7. Scream Queens
Ryan Murphy apostó en Scream Queens (que sobrevivió durante dos temporadas, en 2015 y 2016) por un improbable encuentro entre sus series de terror a lo American Horror Story y sus teen fictions a lo Glee. Era la vez un homenaje al slasher y al cine de serie B y una sátira de títulos adolescentes. Tuvo un recorrido irregular, pero su humor negro destacó como el más brutal de la tele en abierto.
6. American Horror Story
No necesita presentación ni explicación. La saga terrorífica del productor norteamericano es su serie más mainstream y la más relevante por su habilidad para tratar cuestiones sociales a través de las convenciones del horror. Nos quedamos con Asylum, pero es cierto que en American Horror Story hay para todos los gustos. También para el girl power, la visibilidad LGTB+ y un discurso muy meta sobre el terror.
5. 9-1-1
¿Te imaginas a Ryan Murphy dirigiendo una serie policíaca? Cuidado con lo que deseas, porque también existe. Y es una de sus producciones más recientes. Angela Bassett, Connie Britton (dos de sus musas en American Horror Story) y Peter Krause protagonizan esta serie sobre el día a día del servicio de emergencias en Los Ángeles. Tiene un spin-off, Lone Star, con Rob Lowe como estrella.
4. American Crime Story
American Crime Story nació como una compañera para American Horror Story inspirada en crímenes que marcaron la crónica negra de Estados Unidos. Y consiguió mucho más: una radiografía social de la Norteamérica actual a través de los prejuicios de otras épocas. La primera se centró en el caso de O. J. Simpson, la segunda en el asesinato de Gianni Versace y la tercera girará en torno a Monica Lewinsky.
3. Feud
¿La obra maestra de Ryan Murphy? Sin duda, su serie más bonita, compasiva y madura. El creador propuso en la primera temporada de Feud (deliberada antología sobre rivalidades de Hollywood) un tributo a dos estrellas que marcaron su infancia, Joan Crawford y Bette Davis, y la enemistad que vivieron durante décadas. Una reflexión sobre ese dicho que mantiene que las mujeres son malas entre ellas. Una preciosidad. La segunda entrega, Capote vs. the Swans, está centrada en el duelo entre el escritor Truman Capote y las mujeres de alta sociedad a las que traicionó.
2. The Normal Heart
Hemos hecho unasegunda trampa, porque The Normal Heart no es una serie, pero sí un título para televisión. Es una película de HBO Max sobre la crisis del sida en la Nueva York de los 80, con estrellas en su reparto como Julia Roberts, Mark Ruffalo, Matt Bomer, Jim Parsons y Jonathan Groff (tres de los actores gais más relevantes de la tele). Murphy la produjo, dirigió y triunfó con ella en los Emmy.
1. Pose
Es por consenso de la crítica el número uno de las mejores series de Ryan Murphy, y desde luego la más política, la más sensible, la más solidaria. Pose, ambientada en la escena del voguing de la Nueva York de los años 80 (como The Normal Heart), es un homenaje a las mujeres trans que se dejaron la piel en la defensa del colectivo LGTB+ (se trata el sida, la LGTBfobia…) y un manifiesto por la libertad de ser y sentir.
