Los dos años de crisis vital de Ruth Lorenzo: "Rompí con mi mánager, con mi pareja, con todo"

Dice que ha conseguido vencer al miedo, palabra que utilizó para titular su último trabajo. Ahora, con 'Crisálida', su nuevo single, Ruth Lorenzo asegura estar en una etapa de empoderamiento y aceptación, de ganas de saltar al vacío y no tener en cuenta el qué dirán. Porque, más allá de su aparente seguridad, la artista ha pasado ciclos en los que lo externo condicionaba su forma de actuar, fases de cambio vital en las que todo parecía tambalearse. Y de eso ha hablado en una sincera entrevista para Europa Press de la que puedes disfrutar dándole al play.

Durante dos años, desde 2018 hasta que irrumpió la pandemia, la cantante aprendió a conocerse más gracias a una serie de obstáculos personales que hicieron un clic en su mente. "Rompí con todo, con mi mánager, con mi pareja, con mi casa, con todo, con absolutamente todo", ha enumerado. Parte de la culpa de este vaivén la tuvo la dichosa crisis de los 35, en la que su mundo "empezó a dar vueltas" y se topó de bruces con la madurez, esa "que te hace ver las cosas con muchas más calma".

Compuso nueva música, descubrió un patrón de palabras encadenadas en sus canciones que contaban en qué punto se encontraba por entonces y entendió que su subconsciente quería decirle algo. Un aprendizaje que ha plasmado en esta 'Crisálida' que acaba de lanzar al mercado y que nos muestra a una Ruth Lorenzo "más reforzada, con mucha coherencia artística, con mucha sensibilidad, pero llena de fuerza, que es algo que a mí me caracteriza muchísimo".

Durante los primeros meses de confinamiento, donde aportó su granito de arena regalando su música a todo su vecindario desde el balcón de su casa de Barcelona, creó su propio lugar en el que encajar y entendió que es algo que no se puede buscar, que llega solo. Ahora, intentando buscar soluciones, ve su futuro con incertidumbre, intentando "reconstruir" todo lo que ha dejado por el camino la crisis sanitaria del covid-19 en la industria cultural.

"Es igual que en una guerra se destruyen edificios y tienes que dedicarle luego mucho tiempo para volver a ser lo que era. Pues con el tema de la música, la restauración y todos estos sectores que se están viendo tan afectados tanto. Creo que nos tocará arrimar el hombro y tirar palante", ha augurado con optimismo, deseando que esta pandemia llegue a su fin para volver a disfrutar de esos conciertos que tanto echamos en falta desde que perdimos la vieja normalidad.