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¿Qué fue de la vida de Rivaldo?
BARCELONA, España.- Se llama Vítor Borba Ferreira Gomes, pero dejó su huella, y qué huella, en la historia del fútbol con el nombre de Rivaldo en la camiseta.
Ganador del Balón de Oro en 1999, brilló allí donde jugó, pero sus mayores éxitos los logró vistiendo el azulgrana del Barcelona y el amarillo de la Canarinha, con la que salió campeón de la Copa Confederaciones 1997, de la Copa América 1999 y del Mundial de 2002.
En el Camp Nou ganó dos Ligas de España, una Copa del Rey y una Supercopa de Europa. Enamoró a la hinchada culé con su magia y al mundo entero con un truco antológico en forma de chilena que, a día de hoy, sigue siendo uno de los mejores goles de la historia del Barcelona. Tras cinco años como blaugrana se marchó al Milan, donde estuvo dos temporadas en las que llegó a ganar una Champions League.
En la recta final de su carrera, tras jugar en Grecia y en dos destinos tan exóticos como Uzbekistán y Angola, volvió a Brasil para retirarse por primera vez en 2014 con el Mogi Mirim, equipo del que era presidente y por el que salió de su retiro un año después para tratar de salvarlo del descenso. Apenas unos meses después, con 43 años, colgaría las botas de forma definitiva.
NUEVA VIDA EN ORLANDO
Rivaldo dejó Brasil a finales de 2014 tras la muerte de su exmujer y puso rumbo a Orlando. Lo que inicialmente empezó como un viaje a Disneyworld con sus hijos para desconectar terminó convirtiéndose en el inicio de una nueva etapa. Compró una casa y se estableció allí con su esposa e hijos.
Uno de los pilares de la vida del brasileño es la fe. No hay día que Rivaldo no saque tiempo para cultivar su relación con Dios a través del estudio de la Biblia, momentos que comparte con su esposa y con sus seguidores en las redes. Cuenta el propio Rivaldo que en 2004 decidió entregar su vida a Dios para acallar una voz en su interior que lo atormentaba diciéndole que iba a morir en un accidente de tráfico.
SIGUE LA LEYENDA
Rivaldo dejó el fútbol, pero no el deporte. Y es que el brasileño no perdona un día de ejercicio. Normal que a sus 49 años siga estando en plena forma, tanto que es uno de los pocos exjugadores que en el equipo del Barça Legends del que forma parte está igual o mejor que cuando estaba en activo.
Precisamente, como leyenda del Barcelona que es, el brasileño es una de las voces más autorizadas del entorno culé, y nunca pierde de vista la actualidad azulgrana. Su último mensaje en clave Barça fue con el regreso de Xavi, al que le deseó lo mejor en el reto que tiene por delante.
Como para todos, para Rivaldo también pasan los años, y con los años se van perdiendo cosas, pero el mago brasileño no solo conserva la figura, también la magia.
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