Rainiero III de Mónaco, el príncipe constructor

Rainiero III de Mónaco, el príncipe constructor

HACE 70 AÑOS

El príncipe Rainiero de Mónaco (1923-2005) sucede a su abuelo Luis II en el trono del principado, que convierte en un centro turístico y de negocios reconocido internacionalmente

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Rainiero III, príncipe de Mónaco

Rainiero monarca y noble perteneciente a la Dinastía Grimaldi, llega al trono a los 25 años.

Por aquel entonces Mónaco es un diminuto país incapaz de explotar sus dos recursos tradicionales, turismo y juego (casinos) tras la posguerra.

Rainiero ejerce como Príncipe del principado de Mónaco desde el 12 de abril de 1950 hasta su muerte el 6 de abril de 2005.

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Durante esos 55 años de reinado Rainiero logra convertir su principado en un floreciente centro financiero reconocido internacionalmente. Avispado hombre de negocios, en pos de ello construye rascacielos de hormigón, y enormes edificios de 30 plantas que hacen de Mónaca la antesala urbanística del infierno, uno de los lugares más caros del mundo, así como uno de los más feos.

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Su matrimonio con la actriz de Hollywood Grace Kelly contribuye a ello.

El príncipe que por aquel entonces cuenta ya 32 años tiene prisa por casarse. Si no hay descendencia pronto, Mónaco, perderá su independencia y pasará a ser protectorado francés. Su relación sentimental con la actriz francesa Gisèle Pascal no goza del favor de sus súbditos monegascos. Aconsejado por su buen amigo, Aristóteles Onassis abandona a su novia de turno, la actriz francesa Giselle Pascal y se une a Grace la heredera norteamericana, hija del ‘rey del ladrillo’. Los vínculos de la ya célebre actriz, con la meca del cine convierten a Mónaco en un enclave estratégico.

Cuando Rainiero fallece su fortuna personal se estima entre 1.800 y 2.000 millones de euros. El príncipe cuenta 81 años.

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