An�lisis de Rage (Xbox 360, PC, PS3)

En un a�o como ha sido este 2011 repleto de juegos de acci�n en primera persona, y los que quedan por llegar, Rage no es uno m�s. Llega avalado por sus creadores, id Software, a los que se puede considera pr�cticamente como los padres del g�nero, cuyos nuevos trabajos se reciben con mucha expectaci�n y respeto. Wolfenstein 3D -1992-, Doom -1993- Quake -1996-, todos referentes y que marcaron un antes y un despu�s entre los juegos de acci�n, tanto en jugabilidad como en tecnolog�a, y que le han proporcionado tanta fama y admiraci�n a la compa��a tejana. Ahora con Rage, una nueva saga de id Software 15 despu�s, ofrecen un producto muy ambicioso con cinco a�os de desarrollo a sus espaldas y una nueva tecnolog�a, el motor gr�fico id Tech 5.

Haya sido intencionado o no, a lo largo de estos meses, en nuestros numerosos avances y noticias, hemos comprobado c�mo muchos lectores se esperan que Rage sea una mezcla entre Fallout y Borderlands, un juego de acci�n en un mundo abierto con cantidad de misiones secundarias y sitios por explorar, y aunque ya lo hab�amos advertido, una vez terminado lo confirmamos: Rage no es un juego de mundo abierto. Esto no es un comentario positivo o negativo, es simplemente descriptivo, pero antes de entrar en numerosos detalles, quer�amos dejar claro lo que no es. Lo que s� es, lo pod�is leer a continuaci�n.

Sobrevive en un mundo post-apocal�ptico, hostil y salvaje

A�o 2029, el asteroide Apophis se dirige a la Tierra, por lo que se ha preparado el proyecto Ed�n, una serie de capsulas llamadas Arcas enterradas a gran profundidad y dise�adas para "despertar" varios a�os despu�s de la fecha del impacto. Creadas para preservar el conocimiento, muestras gen�ticas y a los propios humanos, finalmente el asteroide roza la Luna e impacta en la Tierra. 106 a�os despu�s, nosotros tomamos el papel del �nico superviviente de una de estas Arcas; despertaremos, saldremos al exterior y comprobaremos que la Tierra se ha convertido en un yermo, un mundo des�rtico y en ruinas. Record�ndonos est�ticamente a la trilog�a de pel�culas Mad Max o a la saga Fallout, este mundo post-apocal�ptico est� poblado de mutantes, humanos que se han convertido en monstruos debido a una sustancia que transportaba el asteroide, aunque quedan supervivientes que sobreviven en peque�as aldeas o ciudades fortificadas. Tambi�n nos enfrentaremos a varios clanes de bandidos y a las fuerzas de la autoridad, el nuevo poder establecido, ya que como supervivientes de un Arca somos un bien muy preciado.

Al comenzar, Dan Hagar l�der de un peque�o poblado nos salvar� el pellejo, y nos pondr� al tanto de la peculiar situaci�n del mundo. Realizaremos algunos encargos, como acabar con un clan de bandidos que est�n molestando, hacernos con unas ropas m�s apropiadas para la situaci�n actual o recoger las piezas de un veh�culo, para contar con un medio de transporte. En estos primeros compases vamos comprobando la mec�nica del juego, que consiste en aceptar misiones tanto principales como secundarias, pudiendo tener varias activas a la vez. Nos convertiremos en los recaderos de todo el mundo, como acostumbran los juegos de rol, aceptando la misi�n, cogiendo nuestro coche y desplaz�ndonos hasta la fase donde transcurrir� la acci�n. Una vez en el escenario de la misi�n, tendremos que superar un nivel completamente lineal, lleno de tiros y acci�n fren�tica, con jugabilidad "made in id Software". Esto ser� lo que hagamos a lo largo de toda la aventura, salpicada con alg�n que otro minijuego bastante curioso, y con una narrativa de fondo bastante endeble.

La jugabilidad y la configuraci�n de botones es la de cualquier otro shooter aunque con algunas peculiaridades. Podemos, en la versi�n de consolas, llevar equipadas cuatro armas y cuatro �tems, a los que se accede r�pidamente, pero podemos tener mucho m�s armamento y equipamiento, al que se accede en el men� del personaje, y que tendremos que asignar si lo queremos tener a mano, lo que a veces es un poco engorroso. No hay limitaci�n de inventario como en otros juegos de rol, ni por peso ni por cantidad de objetos, y como vas descubriendo poco a poco, los elementos de rol son anecd�ticos por no decir inexistentes, y en todo momento se nota que id Software solo ha querido realizar un juego de acci�n, sin adentrarse en el terreno de los RPG o los sandbox

Hasta 8 armas conseguimos, desde una pistola, dos tipos de escopetas, ballesta, fusiles, rifle francotirador y lanzacohetes, a las que podemos agregar algunas mejoras, como estabilizadores, punteros l�ser o una extensi�n para incrementar el alcance de la escopeta. Aunque no parezcan muchas armas, estas se combinan con varios tipos de munici�n, por lo que las posibilidades se multiplican. Municiones explosivas, de m�s calibre, el�ctricas o hasta flechas de control mental, manejando durante unos segundos al enemigo para luego explotar. Eso s�, quiz�s se puede acusar al armamento de poco imaginativo y original, siendo m�s interesantes los accesorios o �tems. Los escenarios est�n llenos de todo tipo de objetos y basura, as� como los bolsillos de muchos enemigos que conviene bien revisar por si tienen dinero. Algunos de estos objetos sirven solo para venderlos, pero otros son muy �tiles.

Seg�n progresamos y exploramos, conseguimos recetas de ingenier�a. Si tenemos los ingredientes apropiados, desde el men� podremos crear nuevos objetos, tanto curativos como municiones o accesorios de ataque, e incluso revienta puertas. Los �tems tienen un peso muy importante en la jugabilidad, casi tanto como las armas, y para salir airosos deberemos hacer un buen uso de las granadas, los coches bombas teledirigidos, las torretas, los robots ara�a, o los carism�ticos wingstick, una especie de boomerangs con los que sorprendemos a los enemigos decapit�ndolos. Esta gran cantidad de objetos combinada con las armas y sus varios tipos de munici�n, dan a la acci�n un gran punto de complejidad y profundidad, teniendo que pensar muy bien c�mo usar adecuadamente nuestros recursos en cada situaci�n. La munici�n en muchas ocasiones no abunda, por lo que tendremos que usarla con cabeza, o pertrecharnos bien en las tiendas antes de salir de las ciudades, y el dinero tiene mucho peso a lo largo del juego, y tampoco es f�cil encontrarlo.

Los niveles son muy lineales, y para que lo entend�is mejor pese a que m�s de uno le de una connotaci�n negativa a esta palabra, son "pasilleros", hasta el extremo dir�amos, con obst�culos por todas partes que nos impiden salirnos del camino preestablecido. Tendremos que avanzar hacia delante acabando con todos los enemigos que nos salgan al paso y activando alg�n que otro interruptor, sin apenas momentos para explorar el entorno, simplemente 100% acci�n, y casi siempre muy fren�tica e intensa, sin mucho tiempo para el descanso. No hay ning�n tipo de sistema de coberturas, y somos solos nosotros y nuestra habilidad disparando, junto con el extenso equipamiento, enfrent�ndonos a decenas de enemigos bastante diferentes entre s�. Los mutantes llevan armas blancas en las manos y se lanzan de frente a toda velocidad hacia nosotros, sin dejarnos muchos tiempo para pensar ni reaccionar, por lo que la escopeta en estas situaciones es vital, y tremendamente divertida, con ese feeling que quienes hayan jugado a otros juegos de id Software entender�n. Estos escalan por las paredes y por cualquier tipo de obst�culo, e incluso aunque vengan de cara, a veces nos hacen un peque�o quiebro a un par de metros, que en caso de errar el tiro con la escopeta nos dejar� vendidos.

Luego hay otros tipos de enemigos, en varios clanes m�s o menos sofisticados �algunos muy locos y salvajes-, y que portan armas de fuego de todo tipo, volvi�ndose aqu� la acci�n m�s t�ctica y pausada. Tambi�n nos enfrentaremos a las fuerzas de la autoridad, soldados bien equipados con escudos de energ�a que tendremos que eliminar con unas granadas especiales, en unos combates todav�a m�s exigentes. Hay en ocasiones jefes de final de fase, aunque no muy numerosos ni complejos, y la inteligencia artificial de los enemigos cumple, sin ser excesivamente brillante. Se protegen bien, te lanzan granadas, pero tampoco te sorprenden con sus comportamientos.

El sistema de salud es cuanto menos peculiar. Tenemos regeneraci�n autom�tica de vida, pero con un par de tiros te dejan muy malherido, por lo que las vendas son importantes, unos objetos que nos curan instant�neamente sin tener que esperar a la regeneraci�n. En caso de quedarnos sin vida por completo, el desfibrilador entra en acci�n, un peque�o minijuego moviendo los sticks anal�gicos y sincroniz�ndonos, que dependiendo c�mo de bien lo hagamos nos reanimaremos con mayor o menor vida. Una vez usado el desfibrilador este tarda unos minutos en volver a cargarse, por tanto si volvemos a caer, moriremos definitivamente. M�s avanzados en el juego llegamos a conseguir un segundo desfibrilador, pero hay que decir que la dificultad est� bastante bien medida, y si se juega de manera negligente y corriendo a lo loco entre los enemigos veremos c�mo con dos o tres disparos podemos caer al suelo, siendo bastante m�s exigente que otros shooters, pese a contar con la ayuda de las vendas y los desfibriladores.

Al comienzo de la aventura hay dos peque�as aldeas donde realizamos los primero encargos, pero no tardaremos muchos en llegar a la primera gran ciudad. Aqu� hay todo tipo de personajes que nos encargan misiones o con los que podemos jugar a algunos minijuegos. Los hay de azar como una especie de tragaperras, de reflejos como uno en el que tenemos que sincronizarnos al clavar un cuchillo entre los dedos de una mano, y uno muy curioso y bastante trabajado, un juego de cargas al estilo Magic: The Gathering. Vamos encontrando cartas escondidas por los escenarios y cuando vamos a jugar creamos nuestro mazo, es divertido y engancha, pero a nuestro parecer demasiado f�cil, y a lo largo de la campa�a solo tenemos dos contrincantes a los que enfrentarnos. Solo hay un par de ciudades de este tipo y tampoco son enormes, funcionando como puntos de partida para las misiones, para equiparnos y para jugar los distintos minijuegos.

Una de las caracter�sticas m�s importantes y elemento diferenciador son los veh�culos. Hasta cuatro tipos de coches o buggies podemos conseguir y mejorar, a�adiendo ruedas con pinchos, motores m�s potentes, mejores amortiguadores y armas, o distintas apariencias. Estos cumplen dos funciones, por un lado en las dos ciudades podemos echar carreras y competiciones, ya sea quedando los primeros en una serie de vueltas, con o sin armas, o en un escenario abierto consiguiendo trozos de meteorito que caen del cielo antes que los rivales. Por otro lado, estos veh�culos nos sirven para partir de las ciudades y llegar a los lugares de las misiones. Circularemos por carreteras y nos cruzaremos con distintos bandidos a los que nos tenemos que enfrentar con metralletas o misiles, pudiendo usar �tems como minas o escudos protectores. Los coches se manejan de manera perfecta y muy sencilla, teniendo el imprescindible turbo, y los amantes de la conducci�n seguro se picar�n con las muchas competiciones disponibles. En el Yermo hay algunos coleccionables en forma robots voladores que tenemos que destrozar mediante un salto, no muy numerosos aunque s� entretenidos de realizar.

Al principio el juego arranca muy fuerte, a lo que acompa�a el impacto visual y la excelente atm�sfera. Unos niveles y escenarios incre�bles, con acci�n desenfrenada e incluso momentos de tensi�n y terror, en un mundo que parece grande y con muchas cosas por hacer, sobre todo cuando llegamos a la ciudad con sus m�ltiples personajes y minijuegos, y las carreras de coches. Pero poco a poco, ya avanzados en la aventura, este empieza a demostrar una estructura bastante r�gida, e incluso en los tramos finales un poco repetitiva. Hablamos con un personaje, aceptamos realizar la misi�n, cogemos nuestro coche, recorremos un peque�o tramo por el Yermo, y llegamos al lugar donde transcurrir� la misi�n, en un nivel completamente lineal.

No hay apenas exploraci�n y libertad en el Yermo, son estrechos ca�ones y carreteras que conectan los diferentes niveles con las ciudades, con algunos combates con los bandidos, y poco m�s podemos hacer en su reducido espacio. Es m�s ni siquiera llegamos a ver un mapa con la totalidad del mundo del juego, ya que este demostrar�a que son una serie de carreteras, con unas pocas explanadas ente medias, que conectan las diferentes partes del juego. No lo estamos diciendo como una queja ni como un fallo, pero queremos ser insistentes �y pesados- y que quede claro, ya que hemos detectado cierta confusi�n sobre qu� es Rage. De hecho hay pocas misiones secundarias, y muchas de las que hay son decepcionantes. En un tabl�n de anuncios en el pueblo, podemos aceptar trabajos. Algunos consisten en una misi�n de escolta con nuestro rifle francotirador, pero la mayor�a son volver a un nivel ya superado a recoger un objeto, reciclando los escenarios que ya hemos superado us�ndolos dos veces, lo que deja una ligera sensaci�n de intentar alargar el juego artificialmente.

El mundo creado es fascinante, la premisa argumental es muy interesante, pero luego el gui�n es pr�cticamente inexistente. Nos dedicamos a realizar encargos para todo el mundo y no hay ni giros ni sorpresas en la narrativa, ni en las situaciones de esta, ni se desarrolla m�s all� de la premisa inicial. De hecho el tramo final deja un ligero sabor amargo, y a lo largo de la aventura ni llegamos a entablar grandes amistades, ni llegamos a tener un n�mesis o enemigo u objetivo claro, lo que hace que en momentos del final perdamos cierto inter�s, y se haga un poco repetitivo. Es 100% acci�n, fluida, intensa, divertida, y en esto juega todas sus cartas, y claro, id Software son aut�ntico maestros de esto. Pese a sus muchos a�adidos, en su coraz�n se esconde un shooter muy cl�sico, con coches y otros adornos, que no consiguen disimular lo que es, lo que lleva haciendo tantos a�os esta compa��a norteamericana de manera sobresaliente.

Nosotros, con casi todas las misiones secundarias superadas, nos lo hemos terminado en 13 horas, por encima de la media del g�nero. Queriendo conseguir todos los coleccionables, y superando todas las competiciones y mejorando los coches, se puede ir a las 16 o 17 horas, pero no mucho m�s, lo que no est� nada mal para ser un juego de acci�n. No innova, no aporta nada nuevo al g�nero, y puede que esto decepcione a los que se esperaban algo m�s, o a los que pensaban que ser�a un mundo abierto y con muchas cosas por hacer. Pero en lo suyo, en lo que pretende, acci�n fren�tica, tiros y m�s tiros, es de matr�cula de honor, de lo mejor que ha aparecido este a�o, y una propuesta totalmente distinta a los tan de moda shooters b�licos, aqu� con acci�n de la vieja escuela, pero con unos gr�ficos impresionantes.

Adem�s de la campa�a, tenemos los peculiares modos multijugador. El Road Rage, cuatro modos de combate online entre veh�culos con un m�ximo de cuatro jugadores. Rally de meteoritos, en el que tienes que recoger los meteoritos ca�dos y llevarlos hasta las zonas de captura para obtener la puntuaci�n; Rally en racha, conseguir puntos y encadenarlos para aumentar la puntuaci�n; Rally tripartito, conseguir tres puntos seguidos para poder ganar; y por �ltimo Masacre, un todos contra todos en el que gana el que m�s enemigos haya vencido. Estos cuatro modos transcurren en seis escenarios abiertos m�s o menos amplios, contando con distintas armas e �tems. Hay un sistema de progresi�n obteniendo puntos de experiencia, con lo que vamos desbloqueando los cinco coches y sus diferentes mejoras. Es un gran a�adido, entretiene, pero no entendemos la ausencia de las carreras, de lo m�s divertido que podemos hacer con los coches en la campa�a y que han eliminado en el multijugador, nos parece inexplicable.

Luego tenemos Leyendas del Yermo, nueve misiones cooperativas para dos jugadores, ya sea por internet o a pantalla partida desde la misma consola. Tenemos que acabar con todos los enemigos y realizar ciertos objetivos, algunos con un tiempo l�mite. Aunque hay que cooperar entre los dos jugadores, tambi�n te picas para ver qui�n consigue m�s puntos, ya que dependiendo de cu�ntos enemigos mates, y c�mo los mates, te dar�n mejor o peor puntuaci�n. Adem�s de querer superarlas, hay una gran cantidad de emblemas para desbloquear que se consiguen de muy diversas maneras, tanto en Road Rage como en Leyendas del Yermo. Y bueno como hab�is podido comprobar, y lo que es discutible, es la total ausencia de modos de acci�n competitivos para varios jugadores, algo respetable pero que muchos jugadores echaran de menos, habi�ndose centrado id Software al completo en la campa�a, y no queriendo entrar a competir, al menos no ahora y con este juego, en el competitivo terreno de los multijugadores online. A nosotros, m�s que esta ausencia, echamos en falta como hemos dicho carreras entre coches, que en la campa�a para un jugador demuestran su potencial.

Gr�ficos de la pr�xima generaci�n

En el apartado t�cnico como sab�is, este se trata del primer t�tulo en usar el motor id Tech 5 y el resultado ha sido sobresaliente. Los gr�ficos son impresionantes, convirti�ndose en referente en las respectivas consolas, sobre todo en cuanto a juegos multiplataforma, y c�mo no, tambi�n en PC, un espect�culo. Las calidad de las texturas casi siempre es sobresaliente �con alguna que otra que no lo es tanto, pero que se perdona-, ya sea en escenarios cerrados o abiertos, los modelados de los personajes y los enemigos muy detallados, con unas excelentes animaciones, la iluminaci�n, algunos efectos como el fuego o brillos muy reales, y todo esto, movi�ndose a 60 im�genes por segundo sin despeinarse en ning�n momento, realmente admirable.

Eso no quita que las actuales consolas tengan ya unos cuantos a�os, y por tanto ciertas limitaciones. El mayor defecto y lo que le impide llevarse un diez en gr�ficos es la carga de las texturas en alta resoluci�n, que se produce unas d�cimas de segundo tarde cada vez que movemos la c�mara, algo que apreciaremos desde el principio y a lo largo de todo el juego. Cuando estemos enfrascados en los combates no nos daremos cuenta, pero en la exploraci�n, caminando m�s pausadamente, se nota y mucho. Este efecto por supuesto se mitiga instalando el juego en el disco duro �opci�n m�s que recomendable en 360-, aunque no consigue que desaparezca. El otro aspecto un poco negativo, es la poca por no decir nula destrucci�n de los escenarios o de los elementos de estos, que no se alteran ante nuestros disparos y explosiones.

Los amantes de los gr�ficos y la tecnolog�a disfrutar�n con el mero hecho de contemplar Rage, con estampas realmente asombrosas, y en m�s de una ocasi�n �nosotros lo hemos jugado en Xbox 360-, sorprende la calidad de sus gr�ficos, con momentos que ya no cre�amos posibles en las actuales consolas. Luce genial pero no solo por la t�cnica que esconde, sino tambi�n por una magn�fica direcci�n art�stica. Un mundo post-apocal�ptico o "madmaxista" que a muchos les podr� recordar a lo visto en Fallout �de hecho tiene alg�n gui�o a esta saga-, pero que cuenta con su propia personalidad. La ambientaci�n es soberbia, y algunos escenarios, a pesar de desarrollarse a plena luz del d�a, gracias a la cantidad de complejos y desagradables detalles que contienen, nos meter�n el miedo en el cuerpo. Podr�amos estar hablando l�neas y l�neas de sus gr�ficos, lo bien que encajan los enemigos nuestros disparos, con las zonas del cuerpo bien diferenciadas, las impresionantes salpicaduras de sangre, las espectaculares explosiones, en resumen, visualmente impactante, y sobre todo, a unas 60 im�genes por segundo estables como una roca.

El sonido tambi�n hace una gran labor, muy contundente y haciendo un uso excelente del subwoofer, con explosiones y escopetazos que maldecir�n nuestros vecinos. La m�sica consigue meterte la tensi�n en el cuerpo, avis�ndote de cu�ndo viene la acci�n, y otras veces terror�fica, una gran trabajo aunque no memorable, sin llegarse a meterse ninguna melod�a en tu cabeza, aunque ambientando muy bien la jugabilidad. El doblaje al castellano es muy correcto, sin voces molestas o que notes que no cuadran con la personalidad de los personajes, y se ha hecho un trabajo muy serio y profesional. Nuestro protagonista, como es costumbre en el g�nero, no dice ni mu, y nos limitaremos a escuchar.

En cuanto a la versi�n de Xbox 360, hay que comentar que viene en tres DVD. Los dos primeros para la campa�a, el tercero para el multijugador. El primer DVD se desarrolla en una zona del Yermo y su correspondiente ciudad, y el segundo igual. Por lo que este cambio de discos no ser� demasiado molesto, y cuando estemos en la segunda parte del juego, podremos volver a la primera por si nos dejamos algo por hacer, teniendo que volver a poner el primer disco. Aunque si dejamos todo hecho en el primer tramo, no habr� necesidad de volver, ya que no aparecer�n contenidos nuevos.

Dejen paso a los maestros

Un nuevo trabajo de id Software merece toda la atenci�n y respeto, no en vano la industria del videojuego, y el g�nero de acci�n, les debe mucho. Tras muchos a�os de desarrollo y con muchas expectativas a su alrededor, Rage cumple de manera sobresaliente como un excelente juego de acci�n, a veces fren�tico, otras m�s t�ctico, pero siempre intenso y salvaje. Sus gr�ficos son todo un placer para nuestros ojos, algo que no dejamos de disfrutar en ning�n momento, y la gran cantidad de armas, municiones y accesorios hacen que pese a ser una jugabilidad lineal y no demasiado compleja en apariencia, podamos ser muy creativos a la hora de acabar con las grandes cantidades de enemigos. Hay ciudades, NPC, creamos �tems con ingredientes, hay tiendas, dinero, minijuegos, pero sus elementos roleros son anecd�ticos, y como ya hemos repetido muchas veces, ni mucho menos nos encontramos ante un juego de mundo abierto.

El Yermo que recorremos motorizados no es m�s que una serie de carreteras en las que nos peleamos con otros bandidos y que sirven para conectar las fases con las dos ciudades principales, pero sin mucho m�s que hacer o explorar. Esto puede decepcionar a los que se esperaban otra estructura de juego, pero realmente Rage es un t�tulo con un coraz�n muy cl�sico y honesto, pese a su p�tina de modernidad y aparente libertad, que no es tal. Toneladas de intensa acci�n, divertida e impecable en su jugabilidad, gracias al perfecto control y la fluidez de sus 60 im�genes por segundo, acci�n marca de la casa y lo que mejor sabe hacer id Software. Sabiendo lo que nos vamos a encontrar, y para los amantes de la acci�n m�s visceral, todo un imprescindible.