Este hombre ganó todo lo que se puede ganar en el fútbol alemán con el FC Bayern: el doblete del fútbol alemán en 2003, consistente en el campeonato de la Bundesliga y la Copa DFB, la Copa de la Liga en 2004, el campeonato de la Regionalliga en 2004 con el FC Bayern II y los campeonatos juveniles A de 2001 y 2002 con el sub-19 del gran campeón alemán. Piotr Trochowski, que este lunes cumple 37 años, disputó un total de 40 partidos con el filial del FCB y quince con el primer equipo, pero, ¿a qué se dedica hoy en día el ex-centrocampista? fcbayern.com tiene la respuesta.
Entrevista a Piotr Trochowski
Piotr, ¿es cierto que vuelves a jugar al fútbol?
"Sí, con el tercer equipo del Hamburger SV en la Oberliga hasta que llegaron unas molestias y el coronavirus. Después de la tercera lesión de cartílago y el fin de mi carrera profesional, estuve tres años sin jugar. No fue hasta el partido de despedida de Rafael van der Vaart cuando me di cuenta: mis rodillas aguantan, es divertido. Y me dije: Antes de ir a correr, prefiero jugar al fútbol. Luego, a través de Marcell Jansen, acabé en el HSV".
¿Cómo es tu vida hoy?
"Ya no tengo tanta relación con el fútbol. Después de mi carrera, me di cuenta rápidamente de que la vida ofrece mucho más. Tengo una empresa inmobiliaria, invierto en acciones y criptomonedas. Todos los días hago deporte: voy al gimnasio, juego al tenis, al golf... Y para divertirme, otra vez al fútbol".
¿Cómo de difícil fue el paso de Hamburgo a Múnich cuando tenías 15 años?
"Mis tres hermanos y yo siempre hemos hecho todo juntos. La separación no fue fácil. Pero luego, en Múnich, viví el mejor momento, el más importante y el más intenso de mi vida".
¿Qué quieres decir?
"Todo era nuevo: la gente, el entrenamiento, la escuela... cada día podía ver el entrenamiento del primer equipo, una sobrecarga sensorial total. Maduré, hice amigos para toda la vida, Paul Thomik y Michael Rensing, por ejemplo. Todos teníamos los mismos objetivos y dificultades, experimentábamos juntos los altos y bajos".
Eso es lo que nos une. Y también tuviste éxito...
"Schweinsteiger, Lahm, Misimović, Lell, Feulner... Muchos de nosotros nos hemos convertido en profesionales, algunos incluso en jugadores internacionales. El segundo equipo fue mi mayor obstáculo. De repente, estaba sentado en el banquillo. Mi suerte fue que me permitieron entrenar con el primer equipo durante los descansos internacionales. Fue entonces cuando convencí a Ottmar Hitzfeld, que me subió".
Más tarde jugaste en Sevilla. ¿Qué tal allí?
"En Sevilla vivía en pleno centro, recorría la ciudad en bicicleta. La gente estaba asombrada. Disfruté de la experiencia de la ciudad y de la cultura de forma directa. También tengo muchos buenos recuerdos de la selección nacional. Pude representar a mi país como uno de los mejores en mi deporte. Es algo de lo que hay que estar orgulloso".