Luto en el fútbol italiano por muerte de Morosini
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Piermario Morosini solo tenía 25 años cuando falleció, al parecer de un ataque al corazón, este sábado durante un partido. El mediocampista jugaba para el equipo Livorno en la Serie B en Pescara, cuando cayó al terreno a los 31 minutos del encuentro.
El joven futbolista cayó boca abajo y parecía sufrir de convulsiones. El asistente del árbitro le avisó al mismo, quien detuvo las acciones.
Se le aplicó un desfibrilador y fue trasladado en ambulancia desde el Estadio Adrático hasta el hospital Santo Spirito, pero no pudieron salvarle la vida.
El partido, contra el equipo Pescara Calcio, se dio por terminado en ese momento, mientras sus compañeros no podían contener las lágrimas.
Consecuentemente, la Federación Italiana de Fútbol suspendió todos los partidos de este fin de semana, en señal de luto por el fallecimiento.
Una carrera promisoria
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Morosini nació en Bergamo el 5 de julio de 1986. Comenzó su carrera en el club local Atalanta, y en 2005 fue vendido al Udinese Calcio, de la Serie A.
Al año siguiente, Udinese lo prestó al Bologna. En agosto de 2009 fue prestado al y en febrero de 2010 al Calcio Padova.
Tuvo su debut internacional para la selección Sub-17 en septiembre de 2001, cuando tenía apenas 15 años de edad. En septiembre de 2006, debutó en la selección Sub-21 y fue convocado al Campeonato Europeo 2009 como suplente.
En el momento de su muerte, Morosini estaba prestado al Livorno, pero seguía perteneciendo al Udinese.
El caso de Muamba
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El mes pasado, el jugador del Bolton Wanderers, Fabrice Muamba, estuvo técnicamente "muerto" durante 78 minutos, tras desplomarse en medio de un partido frente al Tottenham Hotspur en la Copa de la Federación Inglesa de Fútbol.
El futbolista de 24 años está ahora recuperándose satisfactoriamente.
Tras el colapso de Muamba, se prestó atención a la situación de los atletas en Italia, que realiza exámenes cardiacos obligatorios para jóvenes comprometidos en el deporte organizado.
La organización benéfica Riesgo Cardiaco en los Jóvenes afirma que las medidas implementadas por Italia han reducido la incidencia de la muerte por infarto repentino de jóvenes en el país en 90% durante los 30 años transcurridos desde entonces.
