CELEBRITIES
Cine
Nueva biograf�a

Paul Newman: la amargura de los fantasmas del hombre m�s guapo del mundo

Actualizado

Inseguro, atormentado y convertido "en animal sexual" por Joan Woodward, su segunda esposa. Una biograf�a p�stuma del actor muestra su cara m�s humana y desconocida. �l se neg� a que se publicara en su d�a, pero sus hijos han dado el 'ok'.

El actor, que muri� en 2008, fue uno de los hombres m�s atractivos de la historia del cine.
El actor, que muri� en 2008, fue uno de los hombres m�s atractivos de la historia del cine.EM

El hecho de ser percibido como el hombre m�s guapo del mundo en su momento no le eximi� de librar una enconada lucha interior. Por debajo del inmaculado tejido de la superficie, de sus g�lidos ojos azules, hab�a un hombre plagado de inseguridades, convencido de ser un fracaso en ocasiones, un tipo convencional con la apariencia de un mito, marcado por el alcoholismo de su padre, sus propios problemas con la bebida, la muerte de su hijo Scott por una sobredosis de droga y la traici�n a su primera esposa, a la que dej� por Joanne Woodward, el gran amor de su vida y la que le convirti� en una "criatura sexual".

Durante cinco a�os, casi a modo de terapia, Paul Newman se sent� con su mejor amigo, el guionista Stewart Stern, para destripar su carrera y su existencia. El plan era escribir un libro con todo aquel material, pero en alg�n momento la estrella de Hollywood decidi� dar marcha atr�s y quemar las cintas que grab� su amigo entre 1986 y 1991, decidido a no engordar m�s el mito alrededor de una figura con la que no se identificaba. Por suerte quedaron transcripciones de aquellas grabaciones y el libro ahora existe, 14 a�os despu�s de la muerte de su protagonista.

Para saber m�s

The Extraordinary Life of an Ordinary Man honra el t�tulo desde el principio hasta el final de sus casi 300 p�ginas, la biograf�a p�stuma de un actor percibido como un adonis griego y un dios de la gran pantalla que sent�a estar a a�os luz de la imagen que se fue construyendo a su alrededor. "Me enfrento al hecho espantoso de que no s� nada", dec�a, confesiones a Stern que parecen ir mucho m�s all� de la falsa modestia. "Siempre estoy ansioso por admitir el fracaso", con miedo a no ser lo "suficientemente bueno".

Siempre estoy ansioso por admitir el fracaso

Paul Newman

Las memorias no solo son el recuento de los testimonios de Newman, sino de entrevistas que le hizo Stern a la familia del actor -incluyendo a Woodward- y a directores como George Roy Hill -juntos hicieron Dos hombres y un destino y El golpe- y Elia Kazan -que pens� en contratarle para La ley del silencio-, adem�s de colegas como Tom Cruise o Martin Ritt.

Habla sin tapujos de sus traumas de infancia, de lo que fue criarse con un progenitor alcoh�lico y una madre de la que no se fiaba. Aquellos d�as en su Ohio natal estuvieron marcados por la indiferencia de su padre, un jud�o hijo de inmigrantes h�ngaros y polacos y due�o de una tienda de art�culos deportivos. Newman no se identificaba con su madre y pensaba que su padre era un perdedor. Se muri� antes de que comenzara a brillar la estrella de su hijo en el cine.

Paul Newman y Joanne Woodward, en 1958.
Paul Newman y Joanne Woodward, en 1958.GTRES

"No ten�a apoyo emocional de nadie", le confesaba a Stern, entonces un joven perdido sin una vocaci�n o perfil definido. "No era nadie de forma natural. No era un amante, ni un atleta, ni un estudiante, ni un l�der". Tampoco llevaba la actuaci�n dentro. Tras servir en la Armada durante la Segunda Guerra Mundial incursion� en el teatro con poca convicci�n, admitiendo que nunca disfrut� de la actuaci�n y que nunca sinti� su trabajo como un �xito. Se limitaba a cumplir. "Nunca tuve la sensaci�n de tener talento porque era un seguidor, sin crear nada". En realidad admite que lo hizo por alejarse de la responsabilidad de continuar con el negocio familiar. "Estaba huyendo de algo", indica.

Despu�s se cas� y tuvo hijos con Jackie Witte, tambi�n actriz, pese a no estar preparado para ello. Tuvieron tres, Scott entre ellos, el mayor y el primero en seguir los pasos de su padre como actor. Cuando �ste falleci� de una sobredosis accidental en 1978, el sentimiento de culpa se le hizo insoportable. "Muchas son las veces en que me he arrodillado pidiendo por el perd�n de Scott", arrepentido por no haber logrado conectar con su primog�nito.

Se sent�a culpable adem�s por haber traicionado a su mujer. Su mundo cambi� por completo al conocer a Woodward en una producci�n de Broadway en 1953, Picnic, pero igual sinti� que su forma de abandonarla no fue la correcta. "Lo que hice no tuvo ninguna clase", admiti�.

Una vez en brazos de Woodward, una joven y prometedora actriz de Georgia, se transform� en otra persona, en una "criatura sexual", como describe en el libro hablando en tercera persona. "Ella le ense��, lo anim�, se deleit� en lo experimental. Yo estaba en busca de lujuria".

Sobre la mesa estuvo la posibilidad de no publicar el libro, respetando los deseos de su padre. Pero Lissy Newman y sus hermanas siguieron adelante. Sent�an que hab�a cosas que dejar en claro sobre su figura. "Tenemos la impresi�n que no se estaba cuidando su legado", dijo Newman a The New York Times. "M�s personas conocen a James Dean o Elizabeth Taylor. Nadie sabe qui�n es mi padre".

Es un homenaje p�stumo que comenz� con el documental de HBO, The Last Movie Stars, en el que Ethan Hawke reuni� a un grupo de actores para leer las transcripciones de las conversaciones con Stern, con gente como George Clooney, Laura Dern o Sally Field.

Conforme a los criterios deThe Trust Project

Saber más