Paul Breitner, un actor del Oeste en el Real Madrid
Real Madrid Historias de las pretemporadas blancas (VI)
En el verano de 1974 Santiago Bernab�u cerr� el fichaje de Paul Breitner, un alem�n que acababa de proclamarse campe�n del mundo con su selecci�n ante la 'Naranja Mec�nica' de Johan Cruyff. A Madrid llegaba todo un personaje, lo que no tard� en demostrarse. Un a�o despu�s, en plena pretemporada, el 13 de agosto llegaba a Espa�a la noticia de que Breitner iba a formar parte del rodaje de una pel�cula del Oeste alemana. Esos d�as el Madrid preparaba el arranque de una pretemporada cuyo primer partido fue en el Parque de los Pr�nicipes ante la selecci�n francesa (3-1 para 'Les Bleus').
Y no era un bulo.Meses despu�s, el centrocampista germano cambiaba la ropa de futbolista por botas de montar, chaleco y un fusil Winchester. La pel�cula se titul� 'Potato Fritz'. El madridista hac�a el papel del sargento Stark, uno de los hombres del capit�n Henry, encargado de proteger de los indios, a trav�s de las Monta�as Rocosas, un cargamento, con oro incluido, destinado a los colonos de Fort Lane. El rodaje se dividi� entre Montana y Almer�a.
"Paul tiene buenas dotes de actor", asegur� el director del flim, Peter Schamoni.
Al margen de ser un extraordinario futbolista, aunque en el Madrid no alcanz� su mejor versi�n, Breitner nunca escondi� su activismo pol�tico-social, aunque con el tiempo se alej� de la izquierda. Pero cuando lleg� a Espa�a a�n era un personaje combativo. En el invierno de 1976, en una Espa�a que hab�a enterrado apenas unos meses antes a Franco, don� medio mill�n de pesetas a los obreros de Standar El�ctrica, protagonistas de un larga huelga con fuertes choques con la Polic�a. Un conflicto el del sector metal�rgico que tuvo buena parte de culpa en la ca�da del gobierno de Carlos Arias Navarro, el presidente del Gobierno desde el asesinato de Carrero Blanco hasta el 2 de julio de 1976.
Breitner regres� a Alemania en 1977, para colgar las botas en el Bayern seis a�os despu�s. Siempre ha mantenido que el recuerdo de su paso por Madrid y el Madrid "es maravilloso".