En medio de una enorme renovación de la Selección de Alemania tras la consagración en el Mundial de Italia 1990, aparecieron varias jóvenes figuras que daban el salto de calidad habitual del conjunto y entre ellas aparecía un joven Michael Ballack, que surgía en un sorprendente Kaiserlautern que iba a quedarse con la Bundesliga en 1997-98, tras sus inicios en Chemnitzer.
Desde entonces, desarrolló una enorme carrera con los colores de Bayer Leverkusen, Bayern Munich y Chelsea, pero sin dudas su marca quedó en su adaptación para jugar en cualquier puesto el mediocampo y en su rol en la Selección de su país, donde no logró consagrarse pero sí alcanzar finales de Mundial de Corea/Japón 2002 y Eurocopa 2008.
Michael Ballack, entre las lesiones y un duro golpe de la vida
Con 14 títulos en su palmarés entre Alemania e Inglaterra, Michael Ballack se retiró afectado por sus lesiones en 2012, sin antes el dolor de perderse el Mundial de Sudáfrica 2010 por una fractura de pie, en lo que fue un duro golpe para el equipo que llegó a las semifinales del certamen.
Tras su partida, mantuvo su vida cerca del deporte como representante de la FIFA, al tiempo que comenta partidos para la televisión de Alemania. Por otro lado, vivió un momento trágico en su vida cuando en agosto de 2021 perdió a uno de sus hijos por un accidente automovilístico.