"Contento de estar aquí. Son muchas alegrías y muchas etapas de mi vida en el RCT Barcelona, mi club. Ya es una alegría estar en Barcelona", señaló Rafa Nadal, que no hizo ningún comentario sobre si haber entrado en el cuadro de competición significa al ciento por ciento que el martes (con previsión de las 4 de la tarde) saltará a la Pista Rafa Nadal.
Es su intención, reafirmada por el bueno tono de los entrenamientos, como el de este sábado contra el ruso Andrey Rublev. Simula competición, le falta rodaje en la misma lógicamente. Y continúa sacando protegiendo la zona abdominal, que había retrasado su reaparición.
Actuó de mano inocente en el sorteo, junto al actor Peter Vives, y no dibujó precisamente un panorama favorecedor para sus intereses. Tiene un camino que es una trampa desde el inicio. No lo sería de venir jugando con normalidad, ya que es el rey de la tierra, pero son dos años y medio con cinco encuentros oficiales y una exhibición disputados.
De entrada, uno de los jóvenes cachorros de la nutrida hornada italiana. Flavio Cobolli, 21 años y nº 63 mundial. Choque inédito de Rafa Nadal, 37 años, con un transalpino que hizo tercera ronda en el Open de Australia, desde la previa, así como cuartos en Montpellier y Delray Beach. En tierra acaba de llegar a octavos de Marrakech y no superó la previa de Montecarlo, cayó ante el indio Sumit Nagal.
De superar este primer escollo, Nadal chocará de frente con el australiano Alex de Miñaur, tercer cabeza de serie. En su mejor momento, tras haber llegado por fin al top-10 esta campaña. Hizo cuartos en Montecarlo, plantando serios problemas a Novak Djokovic. En el Godó, un par de 'match-balls' pedidos contra Carlos Alcaraz en semifinales de 2022.
Los octavos y los cuartos apuntarían a sendos franceses en plena ascensión, Arthur Fils, pupilo de Sergi Bruguera, y Ugo Humbert, cuartofinalista en Montecarlo esta semana.
En 'semis', la traca con Carlos Alcaraz (tiene en cuartos a Stefanos Tsitsipas). Y el superviviente, final con Andrey Rublev o Casper Ruud.
Para Nadal ya sería mucho competir sin sufrir más lesiones. Va día a día, calibrando su abdominal, su cuerpo. Como Alcaraz va mimando su antebrazo derecho. Uno y otro están en el cuadro, con toda la ilusión de entrar en pista.