F�TBOL
F�tbol

Muere el ex futbolista Marcos Alonso a los 63 a�os

Actualizado

Hijo de 'Marquitos', campe�n de las primeras cinco Copas de Europa del Real Madrid y padre de Marcos Alonso, actual jugador del Barcelona, falleci� este jueves tras una larga enfermedad.

Marcos Alonso, en una imagen de archivo
Marcos Alonso, en una imagen de archivoMARCA

Mencionar a Marcos Alonso, a Marcos Alonso Pe�a, es retroceder obligatoriamente hasta su padre, Marcos Alonso Imaz ("Marquitos"), en la mitolog�a del Real Madrid, y avanzar hacia su hijo, Marcos Alonso Mendoza, hoy jugador del Barcelona. Los tres, en su consanguinidad ininterrumpida, en su notoriedad hereditaria, forman la estirpe m�s destacada de nuestro f�tbol. Todos internacionales. Todos en equipos punteros. Todos, Marcos sobre Marcos, en la gran historia del bal�n en Espa�a.

"Marquitos" se nos fue en marzo de 2012 a los 78 a�os. Su hijo, en este febrero, v�ctima del c�ncer, a los 63. No se parec�an sobre el c�sped. "Marquitos" era un defensa alto para su �poca, duro, fuerte, expeditivo. Su hijo, tambi�n nacido en Santander, un extremo izquierdo (tambi�n, excepcionalmente m�vil y creativo, sujeto al instinto y la inspiraci�n, jug� por la derecha) con vocaci�n de interior. Un driblador extraordinario, veloz, imprevisible, un "virguero" con la pelota en los pies. "Mi hijo hace cosas que yo no pod�a ni imaginar", repet�a "Marquitos".

Que Marcos no fuese jugador, y figura, en el Real Madrid, es dif�cil de explicar y remite a algunos de los misterios del f�tbol. Naturalmente, siendo hijo de quien era y viviendo en la capital, entr� en los infantiles y juveniles del Madrid. Pero no dio el salto y se march� al Racing de Santander. Y all� Nando Yosu le hace debutar. Marcos no tiene a�n 18 a�os.

Destaca irresistiblemente y abre una cierta pol�mica en el seno madridista entre quienes lamentan, y se acusan, de haberlo dejado escapar y aquellos que sostienen que el chico ha sacado de repente a flote unas cualidades poco menos que invisibles antes.

El Atleti y la selecci�n

El caso es que Marcos no pod�a quedarse en Santander. Picaba m�s alto. Y aterriz� en el Atleti en 1979. Y en �l, con �l y por �l lleg� a la internacionalidad. Se estren�, nada menos, en Wembley, ante Inglaterra de la mano de Jos� Emilio Santamar�a. El equipo lo formaban Arconada, Camacho, Tendillo, Maceda, Gordillo, Joaqu�n, V�ctor (sustituido por Montero), Zamora, Juanito (reemplazado por Dani), Satr�stegui y �l mismo. Espa�a gan� 1-2, con goles donostiarras de Zamora y Satr�stegui. Y Marcos vestir�a 21 veces m�s la camiseta de la Selecci�n absoluta (hab�a sido internacional juvenil en el Mundial de Jap�n 1979 y ol�mpico en los Juegos de Mosc� 1980). Estuvo en Sevilla aquel 21 de diciembre de 1983 en el 12-1 a Malta.

Juan M. EspinosaEFE

Del Atleti, donde maravillaba, pas� a un ansioso Barcelona en 1982. Y se mantuvo en el Camp Nou hasta 1987, contribuyendo a la obtenci�n de cinco t�tulos, entre ellos una Liga (1984-85) y la Copa de 1983. Por esas cosas de la vida y del f�tbol, en la final copera, disputada en Zaragoza ante el Real Madrid, marc� en el �ltimo minuto el gol del triunfo azulgrana.

En las temporadas siguientes, como si tanta explosividad y tanta destreza fueran incompatibles con la duraci�n, fue perdiendo filo y brillo. El Bar�a se desilusiona y el Atleti, nost�lgico, lo reclama. De rojiblanco est� dos a�os declinantes, y una lesi�n en la rodilla, adem�s de las ideas de Menotti en la primera temporada presidencial de Jes�s Gil, dicta el comienzo del fin. Se marcha al Logro��s en la campa�a 89-90. Y, otra vez una nostalgia, esta vez in�til, lo devuelve al Sardinero, en Segunda. El equipo asciende, pero �l ya no. Y se retira. Sab�a mucho de f�tbol y entrenar� al Sevilla, al Rayo, al Zaragoza, al Valladolid, al M�laga y al R�cing. Y colaborar� como comentarista con medios de comunicaci�n.

Su padre se muri� con la amargura de no haberlo visto triunfar en el Madrid. Tal vez tambi�n �l. Dentro de su indiscutible categor�a y de la magnitud del recuerdo que deja, se qued�, en cierto modo, al borde de la leyenda en el Atl�tico y en el Barcelona. Pero, objetivamente, ha sido uno de los grandes regateadores del f�tbol espa�ol.

Conforme a los criterios deThe Trust Project

Saber más
Copa del ReyBenzema y Vinicius decantan el derbi para un Madrid que siempre sabe esperar
LaLiga SmartBankKirian Rodr�guez, de Las Palmas, anuncia que ha superado su linfoma de Hodgkin
LaLigaLos 20 disparos de un est�ril asedio ante Remiro: "Ha sido uno de nuestros mejores partidos"