Los niños del Brasil

Para analizar "Los niños del Brasil" podemos dividir en dos partes:
1) Como película, propiamente tal.
2) El tema.

Cinematográficamente, me parece que la cinta de Schaffner, si bien está muy bien rodada, con oficio, tiene altibajos, no es redonda, ni mucho menos. Hay un buen guión, muy interesante, estremecedor y por momentos, delirante. Y espeluznante. Como es la idea central de clonar nada menos que a Adolfo Hitler, "fabricando genéticamente" 94 individuos idénticos a él, a partir de su propio material genético, el que había sido preservado en vida, por el maléfico Dr. Josef Mengele, para uso futuro.
La trama se desarrolla con interés, uno se mantiene atento a los acontecimientos, dentro de un clima de buen suspenso e intriga. Diálogos fluidos y salpicados de ironía en ocasiones. Atractivos ambientes naturales, no exentos de exotismo. Entretiene.
Acertada musicalización de Goldsmith y discrepo de quienes critican el inicio. Justamente esa música es muy apropiada al ambiente germánico que se nos presenta al comienzo, acorde a las fanfarrias de valses austríacos a los que eran tan aficionados los nazis.
Vamos a las interpretaciones. Aquí tengo opiniones encontradas, según el prisma que utilice para el análisis.
Gregory Peck, si del paranoico y fanático médico nazi se trata, creo que da el tono, y muestra una performance que podríamos calificar de brillante en el inicio de la película, en la mansión en Paraguay. Pero posteriormente se muestra algo acartonado en ciertas escenas y excesivo en otras (véase spoiler).
Laurence Olivier, se ve muy correcto en el papel del caza-nazis (con el nombre de Ezra Lieberman, que viene a ser un símil de Simon Wiesenthal), con un estupendo acento al hablar, muestra la tranquilidad, inteligencia y perseverancia para no cometer errores o apresurarse y seguir la pista del complot del grupo de fanáticos alemanes. Está bien secundado por su hermana (una estupenda Lilli Palmer), pero llama la atención lo envejecido que se ve Olivier, comparado con apenas 2 años antes, cuando filmó "Maratón de la Muerte", en un desempeño, para mí, superior a éste. No obstante haber sido candidato al Oscar, aquí.
James Mason muy sobrio y correcto como un coronel nazi a cargo de la Seguridad, que se atreve a discrepar con el líder máximo (Mengele). Pero no es una actuación para deslumbrar.
El joven Guttenberg (popular después en las "Locademia de Policía") muy plano, sin matices, con la cara siempre a punto de sonreir, como finalmente sería su sello como actor del montón.
Y una curiosidad: el excelente actor suizo Bruno Ganz en un breve, pero destacado rol como un biólogo encargado de entregarnos en pantalla una pequeña clase de genética. Décadas después, Ganz protagonizaría magistralmente nada menos que al propio Hitler, en la buenísima "El Hundimiento".
Y Michael Gough en un sobrio rol anecdótico, a quien las generaciones jóvenes ubican más que nada por alguna de la saga "Batman" . Pero Gough también actuó siendo joven, y recordemos su papel en la histórica "El horror de Drácula" de 1958.
¿El final de la película? Ambivalente (spoiler).

Respecto al tema.
A finales de la ´decada de los '70 era impensable avizorar las posibilidades reales de la clonación y la ingeniería genética. Se escuchaba como algo de ciencia-ficción prácticamente. Pero tal como es presentado el tema en la película que nos ocupa, se ve tratado de forma muy seria y rigurosa, adelantándose a su tiempo. Se explica bastante bien, hasta de manera pedagógica, en aquella excelente escena del genetista con Lieberman. Consideremos que la clonación de la oveja Dolly fue realizada en 1996 (no es la primera de animales, pero sí la primera en con esa técnica utilizada). Y la cinta es de 1978.
De sólo pensarlo (la clonación de seres humanos malignos) es algo alucinante y aterrador.
Ahora, dentro de la película, para lograrlo exitosamente, también entra a funcionar como requisito la variable cultural (ambiente). Eso explica el por qué debían dar muerte a esos adultos de 65 años, ubicados en diferentes ciudades del mundo occidental. Y el por qué se habían elegido esas personas para ser padres-adoptivos de los engendros clonados a imagen y semejanza de Hitler.

En resumen, una cinta interesante, me quedo con la intriga y la temática central, y dejo en un lugar secundario ciertos baches cinematográficos. Me entretuve mucho.

Ira Levin -- en cuya obra se basa el guión de esta película --, acabo de confirmar mis sospechas, era judío. Los judíos, claro, los buenos de la película (Laurence Olivier y Lili Palmer como los hermanos Liebermann; Steve Guttenberg como Barry Kohler). Gregory Peck, como Mengele, el "nazi", es un personaje caricaturesco.

La escena del baile, donde tiene Mengele una crisis histérica, es típica del odio que los judíos sienten por los cristianos. Soy demasiado suspicaz para analizar esta película desde la perspectiva que parece ser la general, porque he estado suspendiendo el juicio sobre todo el tema del Holocausto y el nazismo. Ya debería haber leído a los revisionistas como David Irving, Leon Degrelle, Salvador Borrego, Alain Soral, Ernst Zündel, Pedro Varela y otros. Es una tarea pendiente.

Todos sabemos que Hollywood pertenece a los judíos. Estas películas son para mí propaganda judía, en la que el "pueblo elegido" siempre sale como víctima y los "malhechores" son todos aquellos que intentaron defenderse de ellos. No es necesario ser más explícita. Ha pasado un tiempo desde que vi el nazismo de la forma en que solía verlo toda mi vida. Se me cayó la venda de los ojos.

Al llegar a la parte en la que Ezra está hablando con un profesor de la Universidad de Viena y le cuenta sobre el proceso de clonación me ocurrió esa frase repetida hasta el cansancio por el escritor brasileño Olavo de Carvalho, como siendo el mantra de los comunistas. "Llámales de lo que eres, acúsales de lo que haces". Nosotros sabemos que los comunistas son una invención judía, como saben todos aquellos que han investigado sobre el tema.

Así es: ellos inventaron el proceso de clonación e hicieron todo lo que dicen que fue hecho por Hitler y los "nazis". ¡Qué cosa más repugnante! Los jázaros, los de la élite, son los falsos judíos. Los verdaderos judíos tienen que convertirse al Catolicismo. Los falsos arderán en la Geena.

¡Película ridícula! (No me refiero a la hermosa fotografía, los excelentes actores, sino al guión). La enésima película de Hollywood que presenta a Hitler como el diablo (y después se persigue a aquellos que dicen que la narrativa oficial no es cierta).

En el minuto 1:47:22 - los judíos dicen por boca de Mengele (recuerden que el diablo pone todo al revés): TENGO EL DINERO Y TENGO LA VOLUNTAD. ¡Y NADIE PUEDE DETENERME! Todo el diálogo final de Mengele con el niño Bobby es, una vez más, los judíos hablando por boca de Mengele: "¿Alguna vez te has sentido superior a los que te rodean, como un príncipe entre campesinos?" ¿Quién, sino la élite (judía, toda ella), se siente SUPERIOR a todos los demás seres humanos? (A ver si me censuran esta crítica. Están por todas partes, ellos, los censuradores).

El doctor Mengele, conocido miembro del partido nazi se refugia en Brasil tras la caída del tercer Reich y con la ayuda de otros nazis huidos intenta poner en marcha un ambicioso proyecto para intentar clonar a Hitler.
F.J Schaffner adaptó el best-seller de Ira Levin con un interesante y polémico punto de partida y un decepcionante final donde quedó patente la falta de medios de los que dispuso teniéndose que centrar en las brillantes actuaciones de Laurence Oliver y Gregory Peck, únicos responsables de que esta película sea recordada hoy día. L.Oliver interpreta a Ezra Lieberman un caza nazis ligeramente inspirado en Simon Wiessental y G.Peck al temible Mengele.
"Los niños del Brasil" fue seguramente una película adelantada a su tiempo al introducir en el cine el debate sobre clonación y sus posibles consecuencias, pero eso no la hace merecedora del prestigio del que goza, F.J.Shaffner tiene películas mucho mejores como "El planeta de los simios" o "Patton", eso si es cine de calidad.

Hacía muchos años que no veía esta película, muy conocida por el elenco de actores y por el tema que trata, en la actualidad aguanta bien el paso de los años aunque puede resultar extraño que estuviera nominada a 3 Oscar.

Los que tienen ya unos años seguramente ya la han visto en la televisión española, seguramente la trama es más que conocida, cuando verla sin conocer el final o de qué va es un aliciente, si bien el asunto central se desvela demasiado antes del final o el guión bien pudiera haberlo explotado mejor, además en general es mucho mejor la primera mitad que la parte final. La cinta es del género de misterio con un poco de terror o ciencia ficción, aunque en mi opinión da más risa que miedo, sobre todo las actitudes y gestos malignos de algunos personajes resultan grotescos, más propias de una cinta de terror de serie B. En cualquier caso, la historia se basa en algunos hechos reales muy ciertos, como el Doctor Josef Mengele, probablemente el más conocido entre los criminales nazis que sobrevivieron, en Auschwitz llevó a cabo experimentos muy reales con niños judíos y gitanos europeos, sobre todo gemelos, estos experimentos de científico loco de película eran mucho más terroríficos y locos que los de esta película. Además fue ayudado por una organización nazi, escapando año tras año de los que le buscaban, que entre otros era el conocido judío cazanazis Simon Wiesenthal. Mengele se ocultó en Argentina, Paraguay y Brasil, país en el que finalmente murió ahogado mientras nadaba en una playa. Mengele fue uno de los criminales nazis que ayudados por afines al nazismo logró llegar a morir por causas naturales o habiendo escapado indemnes de sus crímenes de lesa humanidad, sobre todo se ocultaron en Sudamérica tras recibir ayudas de algunos religiosos afines al nazismo en el Vaticano o Italia, o gracias a las ayudas de España, donde también algunos se ocultaron o desde donde otros muchos partieron con la colaboración del régimen franquista o este dejando hacer a la organización nazi de ayuda a los criminales que dirigía la española falangista nazi Clara Stauffer, de origen alemán, más conocida por sus familiares que crearon la más famosa cerveza española Mahou o son los dueños de la firma de alta costura Loewe.

Aunque la cinta se basa en algunos hechos y personajes reales, es una pena que el resultado por momentos parezca más una comedia que misterioso. A pesar de todo, es una película más que recomendable.

La vi hace muchos años y me impresionó mucho. Pero esta segunda vez ya no me parece tan buena. Desde luego impresiona, y seguro que tuvo dos vidas, cuando se estrenó en 1978 y luego, más tarde, cuando fue detenido Eichman en Argentina unos años más tarde.
Director más que solvente, con grandes éxitos y una carrera majestuosa.
Desde luego el reparto es absolutamente de lujo: Gregory Peck da miedo; Laurence Olivier aunque mayor está espléndido, James Mason tan como siempre, Lilli Palmer para mi siempre la actriz de Clandestino y Caballero, y ademas: Uta Hagen, Steve Guttenberg, Denholm Elliott, Rosemary Harris, Bruno Ganz, Michael Gough, Jeremy Black, John Dehner, John Rubinstein, Anne Meara, Linda Hayden.