Liam Gallagher está “en plena caída”: artritis, psoriasis y una enfermedad autoinmune | Gente | EL PAÍS
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Liam Gallagher está “en plena caída”: artritis, psoriasis y una enfermedad autoinmune

El exlíder de Oasis habla de los problemas que, según reconoce, derivan del abuso de sustancias en su juventud. Aun así, dice estar en un “viaje hacia la salud” que le ha hecho reducir, que no eliminar, su consumo de drogas, alcohol y cigarrillos

Liam Gallagher
Liam Gallagher, en un concierto en Leeds, el pasado sábado.Andrew Benge (Redferns)

“No recuerdo nada de los noventa porque me estaba drogando”, confesó el cantante Liam Gallagher en una entrevista en Apple Music 1 en 2022. El exvocalista y líder indiscutible de la banda Oasis jamás ha escondido su afición por la cocaína y las pintas de pub. Así que no sorprende que hoy, a sus 51 años, tampoco esconda sus problemas de salud. En una reciente entrevista en el diario The Sun, Gallagher ha hablado de lo que ahora le mantiene despierto desde las cinco de la mañana hasta el amanecer: ya no son las drogas, es la artritis.

El rockero ha admitido que ya no puede salir a correr, cosa que antes hacía “los días que no tenía resaca”, debido a una operación de cadera: “Mis caderas están reventadas”, reveló, “tengo artritis... mal. Fui a que me revisaran y tengo los huesos destrozados. No soy capaz de dormir por la noche por el dolor. Doy vueltas y vueltas”. La artritis y la consiguiente operación fueron otro golpe más a su delicada salud: en 2017, le diagnosticaron la enfermedad de Hashimoto, un trastorno autoinmune que afecta a la glándula tiroides. “Estoy en plena caída, pero bueno, todos vamos a morir, ¿no?”, comenta ahora. Por si eso no fuera poco, el cantante también ha contado que sufre psoriasis, una afección cutánea que provoca enrojecimiento, escamas plateadas e irritación de la piel: “Recuerdo haber conocido a alguien, un chaval muy extraño, que se me acercó y pensó que tenía cocaína en el pelo. Tengo psoriasis, así que lo que pasó es que me había estado rascando durante el día y tenía pequeñas motitas blancas y cosas así. El chaval me lo quitó del pelo y se lo pasó por sus encías e intentó esnifárselo”, cuenta a la manera más Gallagher posible.

El artista es una máquina de generar titulares desde la década de los noventa. Ahora, en lugar de hablar de sus malos hábitos, habla sobre los buenos: “Tengo que deshacer todo lo malo que hice al perder la cabeza y todo eso. Es hora de volver a la realidad”, explica. “Todas esas cosas que pensabas que eran geniales al principio... ahora toca recuperar la salud”. El cantante afirma estar en un “viaje hacia la salud” que lo ha hecho reducir, que no eliminar por completo, su consumo de drogas, alcohol y cigarrillos: “A medida que envejeces te das cuenta de que la vida es preciosa, ¿sabes lo que quiero decir? Cuando eres joven, no te importa tanto”. Ya en 2019, en una entrevista para EL PAÍS, confesó estar limitando su vida de rockstar: “No me drogo tanto como me gustaría. Te lo juro. Es verdad. Me gustaría, pero no. Bebo. Las resacas son muy largas, pero me sigue gustando salir a beber. Quizás me meto un poquito, pero ni de cerca lo que debería estar haciendo. Cuando bebo quizás caen un par de rayas. Pero al día siguiente estoy hecho mierda”.

A pesar de todos estos problemas, Liam Gallagher no se baja de los escenarios. De hecho, la entrevista de The Sun forma parte de la promoción de su nuevo disco y gira junto al guitarrista de Stone Roses, John Squire, con quien acaba de lanzar el álbum Liam Gallagher John Squire. El vocalista afirma que tuvo una serie de problemas mentales después de la disolución de Oasis en 2009. Fue su hermano, Noel Gallagher, el principal compositor y guitarrista, quien tomó la decisión de abandonar el grupo, debido a la pésima relación que tenía con su hermano: “Con algo de tristeza y gran pesar os comento que dejo Oasis esta noche”, escribió en la página oficial de la banda. “La gente escribirá y dirá lo que quiera, pero simplemente no podía continuar trabajando con Liam un solo día más”, añadió el autor de clásicos como Live Forever, Wonderwall o Don’t Look Back in Anger. “Estuve cuatro años alejado de la música y fue jodidamente horrible”, explica ahora Liam. “Necesito estar cerca de esto. Necesito estar cantando. Y no me preocupa tanto la riqueza que esto aporta. La riqueza es cantarlo y vivirlo, estar rodeado de buenos músicos. Eso es adictivo”. Sobre reconciliarse con Noel, una pregunta recurrente cada vez que alguno de los hermanos se enfrenta a una entrevista con la prensa, Liam ha admitido: “No hay ninguna novedad. [Noel] Todavía no es tan guay como yo”.

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