Genealogía de la moral de Nietzsche: resumen y análisis

La genealogía de Nietzsche

Friedrich Nietzsche publicó Sobre la genealogía de la moral en 1887. Este período de la vida de Nietzsche es considerado por muchos estudiosos como el más productivo y significativo. Sobre la genealogía de la moral fue precedida en 1886 por Más allá del bien y del mal, y ambos textos se refieren a ideas similares que involucran la naturaleza históricamente construida de la moral. Nietzsche desafió la mayoría de las principales corrientes del pensamiento filosófico en el siglo XIX y atacó descaradamente muchos de los supuestos morales básicos de su tiempo. Sobre la genealogía de la moral es quizás la representación más concisa de su filosofía plenamente desarrollada y sigue siendo muy influyente en el siglo XXI.

Prefacio y primer ensayo

En el prefacio de Sobre la genealogía de la moral, Nietzsche establece el argumento básico que presentará a lo largo del resto del texto. En su estilo de escritura sumamente distintivo, irónico y bastante íntimo, Nietzsche comienza recordando al lector que la humanidad contemporánea no se conoce realmente a sí misma; las verdades esenciales que aceptamos sobre el mundo no solo son falsas, sino también una distracción de un análisis más cuidadoso de los orígenes, o genealogía, de los valores.

En el primer ensayo de Nietzsche, expone su comprensión de la distinción entre Bien / Mal y Bien / Mal que se desarrolló en el mundo antiguo. Antes del advenimiento del judeocristianismo, la humanidad entendía bien como aquello que estaba asociado con la fuerza y ​​el poder. Por el contrario, lo que se consideraba malo era lo contrario de lo bueno, es decir, débil, humillante y empobrecido. Nietzsche asocia estrechamente esta noción antigua y aristocrática de bondad con la creatividad; él, que tiene la voluntad y el poder suficientes para crear sus propios valores, asigna significado al mundo.

Nietzsche sostiene que esta antigua concepción del Bien / Mal fue primero desafiada y eventualmente reemplazada por la concepción judeocristiana del Bien / Mal. Para Nietzsche, el bien / el mal se basa en el resentimiento que los esclavos del Imperio Romano sentían hacia sus amos. En esta nueva moral del esclavo , el bien llegó a ser todo lo que era el esclavo: pasivo, manso y humilde. Por el contrario, el mal llegó a ser todo lo que fueron los maestros: violentos, fuertes, codiciosos, etc. Nietzsche sostiene que esta concepción históricamente específica de la moralidad se ha transmitido a las culturas europeas de su época, pero la humanidad contemporánea ha olvidado los orígenes históricos de su moralidad. , en lugar de confundirlo con la moralidad universal y esencial.

Segundo ensayo

Nietzsche ve el olvido y la falta de reflexión histórica antes mencionados como un problema grave. La amnesia de la humanidad contemporánea con respecto a los orígenes de la moral cristiana no es simplemente ignorancia; es un olvido que aleja a la humanidad de la voluntad que impulsa sus acciones y decisiones. Para Nietzsche, la voluntad de poder , la fuerza impulsora de la acción y la intención, es la fuerza más importante que anima a la humanidad. Si olvidamos el origen de nuestras elecciones morales, la voluntad que las impulsa, perdemos nuestra voluntad de poder.

Nietzsche continúa describiendo la función y el desarrollo de la idea de castigo. En la antigüedad, argumenta Nietzsche, los poderosos imponían el castigo a los que estaban debajo de ellos sin ningún tipo de escrúpulos morales. Con el surgimiento de la moral judeocristiana, se le ha enseñado a la humanidad a sentir vergüenza por su impulso natural de infligir sufrimiento a quienes nos han hecho daño, o simplemente a quienes son más débiles que nosotros. Nietzsche ve este desarrollo como una forma de pesimismo moderno, o como un síntoma de que la humanidad niega su propia voluntad de poder.

Tercer ensayo

En el ensayo final que se encuentra en Sobre la genealogía de la moral, Nietzsche se preocupa por la noción de ideales ascéticos . Diferentes tipos de personas tienen diferentes ideales ascéticos, pero todos los ejemplos de ideales ascéticos son intentos de justificar u oscurecer la voluntad de poder subyacente del individuo.

Nietzsche sostiene que los ideales ascéticos buscan encubrir la voluntad de poder que el hombre contemporáneo asocia con el mal. Los artistas intentan asociar su arte con alguna gran idea o movimiento; al hacerlo, tapan su voluntad esencial de poder con algo más aparentemente altruista. Para los sacerdotes, el ideal ascético toma la forma de autosacrificio a Dios o la salvación del alma; esta forma del ideal ascético oculta el deseo básico de autoridad del sacerdote. La mayoría de los mortales, a quienes Nietzsche llama “los deformes y los descontentos”, se convencen de que son demasiado buenos para el mundo físico; que están “en el mundo, pero no del mundo”. Todo esto, argumenta Nietzsche, es un intento nihilista de ocultar la voluntad de poder. Nietzsche concluye Sobre la genealogía de la moral recordándonos que, “el hombre preferiría la nada que no querer en absoluto”.

Resumen

Sobre la genealogía de la moral de Friedrich Nietzsche consiste en una serie de ensayos que abogan por una genealogía históricamente consciente del desarrollo de la moral occidental. La moralidad, en opinión de Nietzsche, no es una verdad objetiva e intemporal, sino el producto de circunstancias culturales e históricas particulares. En el caso de la moral judeocristiana occidental, la noción del bien contra el mal deriva del resentimiento que sienten los esclavos hacia sus amos, no de ninguna verdad esencial. Los seres humanos están motivados por una voluntad de poder, una fuerza impulsora para lograr y dominar, pero la moral cristiana busca oscurecer esta voluntad de poder a través de una moral de autosacrificio y ascetismo, que conduce al nihilismo y al estancamiento.