La Haya, la ciudad que se asoma al Mar del Norte, es la sede del parlamento holandés y del gobierno, así como la residencia del Rey de los Países Bajos. Tiene cerca de 500.000 habitantes, y es conocida internacionalmente como la “capital jurídica del mundo,” ya que aquí tienen su sede diversos tribunales internacionales.
Entre éstos se incluyen la Corte Internacional de justicia, el Tribunal penal internacional para la ex Yugoslavia y la Corte Penal Internacional. Junto a estas instituciones, La Haya es la sede de más de 150 organizaciones internacionales, así como de muchas instituciones de la UE, compañías multinacionales y embajadas.
Esto ha dado a la ciudad un carácter verdaderamente internacional. La Haya no es muy frecuentada por turistas ocasionales, por el contrario, está literalmente invadida de extranjeros que trabajan y viven en la ciudad.
A sus habitantes la ciudad les parece muy acogedora, gracias a sus amplias zonas verdes y a sus 11 kilómetros de costa, sin necesidad de mencionar las atractivas calles comerciales y una extensa escena multicultural. La Haya ofrece una arquitectura muy interesante, desde el pintoresco complejo gubernamental de la Binnenhof a los edificios más grandes y majestuosos a lo largo de Lange Voorhout.
Mucha gente piensa que La Haya (conocida en neerlandés como Den Haag o The Hague en inglés) es sólo un destino para hombres de negocios o reuniones políticas cuando, en realidad, la ciudad tiene un rico patrimonio histórico y arquitectónico que descubrir, así como un animado centro histórico lleno de cafés y bares.
La Haya se considera la capital ejecutiva y legislativa del país desde el siglo XVI, por lo que paseando por sus calles podrás admirar elegantes edificios, iglesias históricas y muchos otros lugares de interés. Entre las paradas que no debes perderte durante una visita a la ciudad están la Plein, la plaza principal, la Grote Kerk y varios museos.
El corazón de la ciudad es la Plein (plaza en neerlandés), considerada la zona más antigua de la ciudad y la que alberga muchos edificios históricos, restaurantes y varios cafés. Aquí puedes sentarte en una de las mesas al aire libre de los cafés para admirar la vida cotidiana de esta elegante ciudad holandesa.
En el centro de la plaza está la estatua de Guillermo III de Orange, considerado el padre fundador de la nación holandesa, mientras que justo al lado se alza el complejo del Binnenhof, un edificio que ha sido la sede de los Estados Generales, es decir, el parlamento holandés, desde mediados del siglo XV.
El Binnenhof (en neerlandés, “patio interior”) es un complejo que contiene varios edificios y se considera la sede de la vida política de Holanda desde el siglo XVI. En el siglo XIII, esto era una zona pantanosa cuando el conde Fiorenzo IV de Holanda decidió construir aquí una primera fortaleza como residencia.
Con el tiempo, sus herederos ampliaron y renovaron el edificio, construyendo también una muralla defensiva y fosos. Los siglos XVI y XVII vieron una transformación gradual del edificio en palacio parlamentario, que sufrió varios cambios estructurales a lo largo de los años.
En la actualidad, las dos cámaras del Parlamento y las oficinas del primer ministro holandés se encuentran aquí, en una torre conocida como Het Torentje (“la torrecilla”). La mayor parte del complejo puede visitarse en visitas guiadas, y una de las paradas que no debes perderte es la Sala de los Caballeros (Ridderzaal), que en su día se utilizó como salón de banquetes.
La Gran Iglesia, en neerlandés Grote Kerk, es el principal edificio eclesiástico de La Haya y uno de los más antiguos de la ciudad. Construida en el siglo XV en estilo gótico, la iglesia, dedicada a Santiago Apóstol, se alza en la zona que antaño albergaba los mercados de la ciudad, y su estructura se ha ampliado varias veces a lo largo del tiempo para dar cabida a un número creciente de fieles.
En su interior se conservan valiosas obras, como un púlpito de roble del siglo XVI, varios paneles de madera pintados con escudos de armas de los Caballeros del Toisón de Oro y frescos de gran calidad atribuidos a Dirck y Wouter Crabeth.
Pocas personas saben que La Haya cuenta con museos de gran interés artístico que también albergan obras de arte de renombre. Uno de ellos es el Museo Mauritshuis, también conocido como Galería Real Mauritshuis, que se encuentra en un edificio del siglo XVII que fue residencia del conde Johan Maurits van Nassau-Siegen.
En su interior podrás admirar varias obras de los pintores holandeses más famosos, como “La joven con el pendiente de perla” de Vermeer y “La lección de anatomía del Dr. Tulp” de Rembrandt. Otros artistas famosos presentes son Rubens, Potter y Hals.
El barrio de Statenkwartier limita con la zona del Casco Antiguo y es una zona animada y dinámica donde hay muchos restaurantes, bares y discotecas. Paseando por sus estrechas calles, puedes admirar edificios históricos, edificios Art Nouveau, casas del siglo XIX y varias villas diseñadas por el arquitecto Hendrik Berlage, uno de los precursores de la arquitectura moderna. La zona de Statenkwartier también alberga el Museon, el Omniversum, el Gemeentemuseum y el Museo Fotográfico de La Haya.
En la zona de Statenkwartier está el Gemeentemuseum, que alberga obras de arte moderno de gran interés. El museo se encuentra en un edificio de ladrillo construido hacia 1934 que se considera el último diseño arquitectónico del arquitecto holandés Hendrik Petrus Berlage (1856 – 1934).
En su interior puedes admirar la colección que perteneció a Salomon Bernard Slijper, que era un gran admirador del artista Pieter Cornelis Mondriaan (1872-1944), conocido como el fundador del neoplasticismo. Otras creaciones que pueden admirarse aquí fueron realizadas por importantes artistas como Pablo Picasso, Charley Toorop, Theo van Doesburg, Francis Bacon y Bart van der Leck.
El Palacio de la Paz es uno de los edificios más famosos de la ciudad, ya que alberga el Tribunal Internacional de Justicia, la Academia de Derecho Internacional y el Tribunal Permanente de Arbitraje. El Palacio se construyó hacia 1913 utilizando granito, arenisca y ladrillo, y es una combinación de los estilos románico, gótico y bizantino.
Aunque sólo se puede visitar por dentro en ocasiones esporádicas, merece la pena admirar su belleza desde el exterior y visitar el Centro de Visitantes del Palacio de la Paz, que alberga una exposición interactiva sobre la historia de los movimientos pacifistas.
El Museo Escher, situado en un edificio histórico del centro de la ciudad, alberga una amplia colección de obras del famoso artista holandés M.C. Escher, conocido por sus obras de arte geométrico e ilusionismo óptico. Incluye dibujos, grabados, aguafuertes, litografías y textiles, así como algunos de sus manuscritos originales. La exposición permanente del museo abarca toda la carrera artística de Escher, desde sus primeras obras influidas por la naturaleza y la belleza del paisaje holandés, hasta las que hicieron famoso su estilo único e inconfundible.
Entre las obras más famosas de Escher que pueden verse en el museo están Relativity (1953), un grabado litográfico que representa un edificio imposible en el que las escaleras y las puertas parecen no tener sentido, y Drawing Hands (1948), un grabado que muestra dos manos dibujándose la una a la otra en un bucle sin fin.
Madurodam es un parque temático que reproduce en miniatura los lugares más importantes y característicos de Holanda. Inaugurado en 1952, el parque ocupa una superficie de unos 62.000 metros cuadrados y consta de más de 300 modelos en miniatura, realizados con una precisión asombrosa.
Entre los monumentos y edificios representados en el parque figuran el aeropuerto de Schiphol, la presa de Afsluitdijk, el puerto de Rotterdam, el Palacio de la Paz de La Haya y la plaza Dam de Ámsterdam; es una atracción muy popular entre los turistas y ofrece una experiencia divertida y educativa para toda la familia.
El Museo Nacional del Oranjehotel está situado en Scheveningen, el barrio costero de La Haya, y cuenta la historia de la prisión del Oranjehotel durante la Segunda Guerra Mundial. El museo se inauguró en 2019 y está situado justo al lado del lugar donde estuvo la prisión.
En el interior del museo, los visitantes pueden conocer en detalle la historia de la prisión de Oranjehotel y de las personas que estuvieron allí encarceladas. Puedes descubrir una gran colección de objetos, documentos y fotografías que documentan la vida de los presos, sus historias y la lucha de la resistencia holandesa por la libertad contra la ocupación nazi.
El acuario Sea Life Scheveningen también está situado en el barrio costero de La Haya, a pocos kilómetros del centro. Inaugurado en 1991, alberga una gran variedad de especies marinas de todo el mundo, como tiburones, rayas, tortugas marinas, peces tropicales y muchas otras criaturas acuáticas, divididas en varias áreas temáticas que representan distintos hábitats marinos, como el arrecife de coral, el océano Atlántico y el mar del Norte.
Destacan el túnel submarino, donde los visitantes pueden caminar por un túnel de cristal rodeados de tiburones y otros peces grandes, y los tanques interactivos, donde los visitantes pueden tocar e interactuar con determinadas especies marinas.
Dado que La Haya fue fundada sobre un antiguo territorio de caza, hay una gran variedad de parques y espacios verdes que son ideales para pasar tiempo al aire libre. Los parques más famosos son el Clingendael, el Westbroekpark y el Haagse Bos.
Como la mayor parte de las ciudades de los Países Bajos, La Haya está literalmente llena de bicicletas y es fácil moverse de un lugar a otro con este medio, si tenéis ganas de dar una vuelta fuera del centro de la ciudad. Scheveningen puede ser un objetivo adecuado; es una localidad llena de cafeterías construidas sobre la costa y aquí se encuentra el mayor muelle de todos los Países Bajos, no muy lejos del parque Scheveningse Bosjes.
En el siguiente mapa puedes ver la ubicación de los principales lugares de interés de este artículo
La Haya no es una ciudad muy grande, pero elegir dónde alojarse puede ser importante si quieres conocer y experimentar plenamente el ambiente de la ciudad.
La zona recomendada para dormir es el centro histórico y las calles adyacentes, donde se encuentran la mayoría de las atracciones de la ciudad, como el Binnenhof y el Museo Mauritshuis. Aquí puedes elegir entre un buen número de establecimientos de distintos precios.
Quienes deseen alojarse en una zona tranquila pero no lejos del centro de la ciudad, pueden buscar alojamiento cerca del Palacio de la Paz. Esta zona está bien comunicada por varias líneas de tranvía y autobús que facilitan el desplazamiento a otras zonas de La Haya.
Para llegar a La Haya en avión desde España se puede elegir aterrizar en Rotterdam, el aeropuerto más cercano, o en Ámsterdam. Las conexiones ferroviarias son muy eficientes en casi todas las principales ciudades de Europa Central.
Llegar a La Haya desde Ámsterdam es sencillísimo: en tren se tarda sólo 45 minutos, pero hay que tener cuidado porque sale de la estación de Amsterdam Zuid y no de Amsterdam Centraal.
En cambio la distancia que separa las dos ciudades en coche es de sólo 56 km, el viaje dura menos de una hora y atraviesa, aunque en su mayoría autopista, los idílicos campos holandeses.
Moverse por la ciudad es fácil gracias a los excelentes servicios de tranvía y autobús, y existe una smart card, la OV Chipkaart, que es una tarjeta recargable para viajar en diversos medios. El centro de la ciudad de La Haya es pequeño de todas formas, por lo que es facilísimo recorrerlo a pie o en bicicleta.
En los últimos 10 años la ciudad ha sufrido un importante desarrollo de infraestructura; se ha construido un túnel para el tranvía por debajo del Grote Marktstraat y un nuevo sistema de tren ligero (RandstadRail), que la conecta con las ciudades vecinas de Zoetermeer y Rotterdam.
¿Qué tiempo hace en La Haya? A continuación se muestran las temperaturas y el pronóstico del tiempo en La Haya para los próximos días.
La Haya es una ciudad costera del Mar del Norte, situada entre Ámsterdam y Rotterdam, a pocos kilómetros de esta última.
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