La última cacería (1956), de Richard Brooks

Charlie y Sandy son unos expertos cazadores de búfalos. Ambos tienen caracteres muy distintos, pero están acostumbrados a trabajar juntos.

Western enmarcado en los últimos años del siglo XIX, con las praderas del noroeste americano como escenario. La acción propia de este tipo de películas cede un poco en favor de la relación que tienen Charlie y Sandy, la cual no siempre es fácil. La película causó polémica por la cantidad de bisontes que acabaron muertos en el rodaje. Y es que la historia trataba justo eso: la matanza a diestro y siniestro de cantidad de animales, tan valiosos por aquel entonces y base del alimento de las tribus indias, las cuales también reciben lo suyo en el film.

Protagonizada por Robert Taylor (Ivanhoe) y Stewart Granger (El prisionero de Zenda), dos galanes de turno con gancho suficiente para atraer al público al cine, la película está escrita y dirigida por Richard Brooks (La gata sobre el tejado de zinc), lo cual es sinónimo de excelencia.