Crítica de 'Knight of cups': derivas y más derivas

CRÍTICA DE CINE

'Knight of cups': derivas y más derivas

Estrenos de la semana. Tráiler de 'Knight of cups'

Estrenos de la semana. Tráiler de 'Knight of cups'. / periodico

Quim Casas

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Entre ‘To the wonder’ (2012) y ‘Vida oculta’ (2019), las dos últimas películas estrenadas de Terrence Malick, el director ha realizado otros dos filmes de ficción y algunos documentales, todos planteados desde la visión más o menos panteísta, la imagen digital, repartos estelares y el estilo contemplativo del que ha hecho gala el director en esta última década, lejos de los planteamientos de sus primeras obras, ‘Malas tierras’ y ‘Días del cielo’.

Ahora se estrena, con cinco años de retraso, uno de estos filmes, 'Knight of cups', protagonizado por Christian Bale, Natalie Portman, Cate Blanchett y Antonio Banderas, cuatro de esas estrellas que se prestan a trabajar con Malick por el prestigio que les otorga. Todas y todos acostumbran a salir encantados de la experiencia, incluso Rachel Weisz, que hablaba maravillas de Malick pese a que este eliminó todas sus escenas en el montaje final de 'To the wonder'.

'Knight of cups' es otra película sobre la situación compleja de personajes a la deriva filmados por un director que también lleva años derivando hacia no se sabe dónde. Imágenes muy bellas, personajes que aletean por los espacios, dudas enquistadas desde tiempos pasados, buenas interpretaciones, pero una sensación final de cierta complacencia en lo que se cuenta y la forma de contarlo.