Kim Pegula, la hoy dueña de los Buffalo Bills, cuenta con una de las historias de superación más increíbles en la historia de la NFL. Y es que, cuando era solo una bebé fue abandonada en las calles de Seúl y encontrada frente a una estación de policía, sin embargo, logró ser rescatada por una pareja canadiense, que poco tiempo después tuvo que mudarse para Nueva York.
Al crecer, la joven ingresó al Houghton College y unos años después se casó con Terry Pegula, un billonario con el que ahora comparte la propiedad de uno de los equipos de futbol americano que, hoy por hoy, buscan levantar su primer título en la historia del Super Bowl.
Kim Kerr, como se llamaba previo a su boda, conoció al empresario Terry Pegula a principios de los noventa, y desde el principio fue su compañera de negocios. Sin saber poco o nada sobre sus padres biológicos, la joven salió adelante para convertirse en una de las mujeres más poderosas de la NFL.
Durante su infancia, estuvo algunos años en un orfanato, hasta que fue adoptada por Ralph y Marilyn Kerr. Llegados a Rochester, comenzaron una nueva vida, y pronto ella destacaría como porrista. Trabajó de camarera en un restaurante de Belfast, donde conoció a su esposo. El resto es historia.
Bills a la carga
Este fin de semana comenzarán las Rondas Divisionales de la temporada, mismos que definirán a los cuatro finalistas de cada conferencia. En este entendido, los Bills, quienes mantienen un ritmo importante de la mano de su quaterback Josh Allen, se enfrentarán a los campeones de la edición pasada, los Kansas City Chiefs de Patrick Mahomes.
Esta sería la primera vez que el equipo liderado por Kim Pegula está tan cerca de conseguir un título de NFL en su historia, y actualmente, llegan con un récord importante de seis victorias, mismas que incluyen el haber derrotado a los Chiefs 17-20 de visita.
