• Gressel nació en Neustadt an der Aisch, cerca de Núremberg

• En 2013 abandonó la liga regional bávara para probar suerte en el fútbol universitario estadounidense

• Ahora ya es internacional con Estados Unidos

Podría pensarse que, en el fútbol moderno, el camino de los futuros jugadores profesionales e internacionales está marcado desde una etapa muy temprana. Normalmente, ingresan antes o después en un centro de alto rendimiento y, paso a paso, van progresando hacia el fútbol profesional. El camino suele ser difícil, y solo unos pocos acaban dando el salto definitivo y cumplen su sueño de vivir del fútbol.

Sin embargo, siempre ha habido y sigue habiendo excepciones, porque algunos jugadores dan rodeos inesperados. Hoy en día son muy poco habituales, pero los sigue habiendo. Miroslav Klose, por ejemplo, debutó en la Bundesliga con 22 años y acabó proclamándose campeón del mundo con Alemania y máximo goleador histórico de la Copa Mundial. Jamie Vardy, por su parte, jugó muchos años en la octava categoría del fútbol inglés e incluso se vio obligado a llevar un dispositivo electrónico en el tobillo. Quién iba a imaginar que, algún día, el Leicester City abonaría una suma de siete dígitos por aquel futbolista amateur de 25 años y que, posteriormente, acabaría conquistando el título de la Premier League. Entretanto, Vardy debutó también con la selección de su país y sigue siendo el máximo goleador más veterano en la historia de la liga inglesa.

Obviamente, Julian Gressel aún no está al mismo nivel que Klose ni que Vardy, pero la trayectoria de este futbolista de 29 años también es muy peculiar.

Gressel nació en 1993 en Neustadt an der Aisch, una población cercana a Núremberg. De niño empezó a jugar en el equipo de su localidad, el TSV Neustadt/Aisch, y posteriormente vistió los colores del SpVgg Greuther Fürth y del SG Quelle Fürth. En la temporada 2011/2012, ya con 17 años, recaló en el FC Eintracht Bamberg, de la cuarta división, y allí se consolidó como titular en el primer equipo. No obstante, la campaña siguiente regresó al TSV Neustadt/Aisch, que militaba dos categorías por debajo.

Llegado a este punto, el fútbol profesional parecía estar para Gressel tan lejos como Neustadt an der Aisch de Providence, la capital del estado de Rhode Island. Precisamente allí es adonde se trasladó en el año 2013, gracias a una beca para estudiar en la universidad y que le permitió jugar cuatro años en el Providence Friars. Ya en la máxima categoría del fútbol universitario, la NCAA Division I, Gressel marcó 30 goles en 84 partidos y, en su última temporada, ganó la Bota de Oro al máximo artillero.

No es de extrañar, por tanto, que fuera elegido por el Atlanta United en la primera ronda del Super Draft 2017 de la MLS. De esta manera, Gressel llegó al fútbol profesional con 23 años. En su primera temporada alcanzó las eliminatorias por el título y fue distinguido como el mejor debutante del año. En 2018 se convirtió en el primer alemán en ganar la Copa MLS con el Atlanta, club con el que logró además la clasificación para la Liga de Campeones de la Concacaf. En esta competición, Gressel y los suyos llegaron hasta cuartos de final.

Tras disputar más de 100 partidos con el Atlanta United, en enero de 2020 fichó por el D.C. United de Washington, equipo que abonó alrededor de 700 000 € para hacerse con sus servicios. Dado que, con el nuevo entrenador, Wayne Rooney, apenas disponía de minutos de juego, Gressel decidió poner punto final a su etapa en la capital estadounidense en julio de 2022, después de 73 partidos disputados, y fichó por el Vancouver Whitecaps canadiense.

En noviembre de 2022, Gressel, que está casado con una mujer estadounidense, obtuvo la nacionalidad estadounidense y, desde entonces, puede ser convocado por la selección de las barras y estrellas. De hecho, la llamada del seleccionador interino Anthony Hudson no se hizo esperar.

Gressel recibió la invitación de la federación estadounidense para jugar los amistosos contra Serbia y Colombia de los días 25 y 28 de enero. Puesto que dichos encuentros no se enmarcan en un periodo internacional oficial de la FIFA, Estados Unidos no convocó a ningún jugador procedente de Europa, sino que decidió contar con futbolistas que juegan principalmente en su territorio, entre ellos numerosos debutantes. De cara a la Copa Mundial que acogerá en 2026, la federación estadounidense quiere dar la oportunidad a nuevos jugadores para que se prueben y presenten su candidatura a estar en la selección. En la derrota por 1-2 ante Serbia, Julian Gressel partió como titular en el lateral derecho y disputó un total de 60 minutos. A pesar del resultado adverso, Gressel cuajó un buen debut: un bonito centro suyo desde el centro del campo sirvió en bandeja el gol a Brandon Vázquez, que adelantó momentáneamente al conjunto estadounidense.

A finales de febrero comienza la nueva temporada de la MLS, en la que Gressel tratará de alcanzar las eliminatorias por el título con el Whitecaps. Además, si sigue mostrando la misma regularidad, podría hacerse un hueco en la selección de Estados Unidos. En el Mundial de 2026, Gressel tendrá 32 años, una edad más que aceptable para participar en el torneo. Y, quién sabe, tal vez para entonces ya haya reducido un poco más las distancias con Klose y Vardy.