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Jorge Sanz pide un t� verde. En ese momento podr�a acabar esta entrevista.
El actor cuya legendaria lista de excesos y caos, de �xito y ruina, de alcohol y drogas, de sexo y fama, se ha documentado al detalle durante 35 a�os est� sentado en una terraza de Torrelodones, donde vive, viendo pasar la gente y la vida con una frondosa barba cana que oculta al viejo gal�n. Estrena Por tus muertos, con Jos� Mota, en la que interpreta a un viejo rockero que se encuentra, como tantas veces ha hecho �l, ante la oportunidad de resucitar su carrera. "Mi madre est� cabread�sima con la barba, dice que me pone 15 a�os, pero eso son los 15 kilos que me sobran", se r�e. Y a�ade: "Me da igual, estoy de puta madre. He dejado de beber, de fumar, sigo vivo... Todo ha salido bien".
Jorge (Madrid, 1969) pide otro t� verde. En ese momento empieza la entrevista.
- Tengo la sensaci�n de que todas las pelis que haces van sobre Jorge Sanz.
- Yo tengo esa misma sensaci�n. �De qu� va la peli? De un tipo que, llevando un d�a al ni�o al cole, se mete en un l�o y desencadena una historia ca�tica para intentar volver a poner su vida en orden. Lo que han sido 30 a�os de mi vida, vamos
- Esta vez parece la buena, llevas ya unos a�os con bastante trabajo y una vida estable.
- He tenido varios resurgimientos ya, tanto morales como econ�micos, y estoy relativamente acostumbrado. Vas y vienes pero, aunque a veces los descansos son demasiado largos, el para�so para un actor es seguir ah�. Irte y volver. La gente te redescubre y es cojonudo. Serrat cuenta que cuando sac� Mediterr�neo todo el mundo le adoraba y le dec�a que era la hostia, pero cuando ya todo cristo cantaba la canci�n, hasta los ni�os en los festivales del colegio, la gente acab� hasta los huevos de Mediterr�neo. Se olvidaron de ella y, a�os despu�s, volvi� a gustar. Es c�clico. Cuando eso pasa como actor, lo que hay que hacer es tener tranquilidad, esperar, no ir detr�s de la fama, hacer en peque�ito lo que antes hac�as a lo grande y ya ver�s c�mo, de repente, vas a volver. A veces ha tardado a�os, pero la gente siempre me ha redescubierto y cada vez que ha pasado se han encontrado un actor mejor, con m�s peso. Ya no eres el ni�o de Conan, se aprenden t� nombre y ya eres Jorge Sanz, un actor.
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- Lo que pasa es que tu nombre se lo aprendi� toda Espa�a cuando eras un ni�o.
- S�, el chaval de Valentina. Y luego todo aquello del gal�n de los 80, etc. Pero yo me gusto m�s ahora, como persona y como actor. Me gusta c�mo estoy, me gusta c�mo me salen las pelis, me gusta la vida que llevo. Cada vez me apetece menos vestirme de romano, pero me gusta mucho mi trabajo y lo disfruto m�s que nunca, m�s que cuando estaba en la cima. Ahora exprimo mucho m�s cada trabajo, antes ten�a tanto que a veces no le daba importancia a lo que ten�a entre manos. Cuando ahora me cae algo, aunque sea un secundario peque�ito, lo disfrut� much�simo. Nos hemos hecho mayores...
- Hab�a dudas de que fueras a llegar a mayor...
- Hombre, claro, hasta yo dudaba. Pero, hostias, ahora soy el puto abuelo en las pelis, t�o. Eso no lo vimos venir.
- El mito a tu alrededor...
- Todo leyenda.
- �De cu�l hablamos? �De los excesos, del despilfarro o de las mujeres?
- De lo que me vayas a decir. Te lo voy a negar todo.
- No va a colar.
- Ya, me lo he trabajado.
- �Est�s harto de hablar de todo aquello, de que esa fama te persiga?
- No. Son las consecuencias de la vida que eleg� llevar. La fama es cojonuda y el que diga que no es gilipollas. Poder pasar por esta vida siendo famoso y, adem�s, siendo el guaperas y no el gordo gracioso o el atolondrado, es cojonudo. El haber pasado por esta vida siendo Jorge Sanz es la hostia, es una bendici�n. Pero tambi�n es un monstruo muy grande y a veces te supera, te puede tu personaje y acaba contigo si te dejas. Yo he estado cerca de dejarle bastantes veces, pero poco a poco aprendes a manejarlo, empiezas a controlar las situaciones que te crea la fama y es cojonudo. �Qu� me ha quitado a m� la fama? No me ha quitado nada, me ha permitido ir por la vida de puta madre. Casi me mata, de acuerdo, pero si sobrevives es cojonuda.
- �C�mo de cerca de acabar contigo estuvo?
- Bueno, buf, es que... Yo ahora veo entrevistas de cuando ten�a 20 o 25 a�os y era gilipollas. Pero gilipollas profundo. Recuerdo unos a�os largu�simos en los que mis d�as ten�an 26 horas, trabajaba, sal�a, consum�a, beb�a, viv�a... Yo qu� s�. Casi acaba conmigo, s�, pero por otro lado he exprimido la vida como poca gente y estoy muy orgulloso, muy satisfecho y muy agradecido por haberlo hecho. Ha sido divertido.
- Porque ha acabado bien.
- Claro, as� es m�s f�cil hablar. El otro d�a le pregunt� a un amigo que hab�a tenido una desgracia qu� pod�a hacer por �l y me respondi�: "Seguir vivo, Jorge, seguir vivo". No s�, yo tampoco me he visto taaaan cerca de la muerte. He tenido mis sustos y mis viajes a los infiernos como mucha gente, t�o, pero tengo la sensaci�n de que siempre ten�a cierto control. Aunque es una sensaci�n personal, tambi�n te digo. Hay que preguntar a mi familia y a mis amigos a ver qu� dicen, sobre todo a los que me dejaron dinero [risas].
- Contaste que Antonio Resines y Santiago Segura te estuvieron manteniendo a�os.
- Es as�. El problema del dinero es no tenerlo y yo lo he tenido, pero lo he gastado y, cuando dej� de encontrar trabajo, fue jodido. Pero eso ya es pasado. Ya tengo pocas necesidades, tengo la casa pagada, los ni�os ya son mayores y tengo la vida hecha, t�o. Me falta una buena parte de la segunda mitad del partido, pero va a ser un partido cojonudo para m� porque acab� muy cansado de la primera parte y ahora s� como afrontar tranquilo lo que queda.
- �De verdad ya no sales nada?
- No, no, cero. No puedo por salud y por ley.
- �Por ley?
- Hay un par de jueces que est�n muy interesados en ese tema de mi vida nocturna. No puedo entrar en detalles, pero ahora que ya soy bueno seguro que se les olvida.
- Ya has salido para varias vidas, de todos modos.
- S�, y para salir a medias, mejor no salir. Mi padre compet�a con caballos y cuando dej� de competir al m�s alto nivel, no volvi� a montar. Le pregunt� por qu� y me dijo: "Despu�s de haber estado en la �lite, ya no le veo la gracia". Carlitos Larra�aga me dec�a algo parecido cuando jug�bamos al p�ker con los guardias civiles y otros vecinos de por aqu�: "Yo me he gastado millones en una mano y jugar con vosotros a 50 euros la noche no me llena nada". A m� con la noche me pasa lo mismo, salir para tomarme una cerveza no me aporta nada, no me da la adrenalina que me daba salir antes. Ahora me llenan otras cosas.
- �Cu�les?
- Esta vida que estoy llevando. Vivo tranquilito en casa, salgo a dar una vuelta por el pueblo, mi pareja, estoy muy estable y disfrutando mucho de los ni�os, voy a ser abuelo ahora por segunda vez... �Que soy abuelo, t�o! �Yo! �Abuelo! Tendr� otras �pocas e ir� a otras ciudades, me entrar�n rodajes y vendr�n mil cosas, pero ahora mismo estoy tranquilo, sereno y feliz.
Jorge Sanz, un aro, un espejo y una barba.
- Conoces como nadie el cine espa�ol de los �ltimos 40 a�os. �Cu�nto de extendida ha estado la cultura del abuso y el machismo?
- Totalmente instalada. Empec� a trabajar en la �poca del destape y he visto cosas terribles Lo jodido es que ahora me doy cuenta de que yo mismo he llegado a normalizar este tipo de cosas. Todo esto que est� pasando me parece cojonudo, nos est� haciendo evolucionar como sociedad. Soy el primero que he visto este tipo de abusos o de insultos y no he sabido reaccionar. Ahora, afortunadamente, son comportamientos que me chirr�an, son inaceptables y espero que, igual que yo he evolucionado, evolucione toda la industria. Nos viene de perlas que se rompa el silencio sobre estas situaciones.
- Hay quien dice que se est� criminalizando al cine.
- Por supuesto que se criminaliza, pero es merecido. Durante d�cadas se han favorecido unas actitudes muy jodidas hacia las mujeres, las hemos dejado pasar todos y ahora hay que afrontarlo. Noto una evoluci�n evidente en los rodajes como la noto en todos lados y en nosotros mismos, pero para completar esa evoluci�n hay que afrontar todo lo que se ha estado haciendo mal, no negarlo u ocultarlo.
- El otro conflicto reciente del cine...
- Es cojonudo lo del cine, siempre hay alguna movida. Eso nos lo tendr�an que agradecer.
- Te iba a preguntar por Vox, su presencia en los Goya y la eterna pol�mica con las subvenciones del cine espa�ol.
- S�, la derecha lleva a�os con esa pataleta y sigue sin entender que el cine espa�ol es El Cid, pero sobre todo son historias peque�itas de gente marginal y que sufre. Entonces, es normal que seamos izquierdosos porque estamos metidos en esa salsa hasta el cuello, pero a m� me parece un avance de la hostia que gente de Vox haya ido a los Goya este a�o, aunque haya sido a tocar los cojones con las subvenciones. Es magn�fico que Vox, la gente m�s subvencionada de este pa�s, venga a criticar a unos pobres diablos que hacemos lo que podemos por la cultura de este pa�s. Pero ya te digo, me parece genial que hayan venido y ojal� lo siguiente sea que vayan m�s al cine, porque en el cine hay que estar callado mucho tiempo y eso te hace pensar. Nos viene bien a todos y a ellos, m�s.
- �C�mo enfocas esta segunda mitad de partido?
- Estoy haciendo trabajos muy chulos. Casualmente, ahora me han llegado dos papeles que me han quedado de puta madre, pero los he hecho para apagar fuegos. Desde hace mucho tiempo tengo esta sensaci�n de que me llegan personajes que son un marr�n imposible o que, como ha sido el caso de estos, falla otro actor y necesitan un sustituto de urgencia. �Y sabes qu�? Me mola, si vienen a m� por algo ser�.
- �No te da�a el ego?
- Ahora ya no. Llego, apago el fuego, toco tecla y encima doy la voltereta y caigo de pie. Entonces digo: "Joder, ol� mis huevos". Es una sensaci�n cojonuda. Mucha menos responsabilidad, mucho menos trabajo y ver los toros desde la barrera. He estado muchos a�os en primera l�nea, en la trinchera profesional, personal y social, y ahora disfruto en la intendencia repartiendo juego. Me he hecho mediocentro y s� d�nde tiene que ir el bal�n y en qu� momento. Mi sensaci�n personal es que soy mejor actor, aunque habr�a que preguntar a los que trabajan conmigo.
- �Ves un cambio en c�mo te mira la industria?
- Hace ya tiempo y, sobre todo, a nivel de producci�n. Ya no me mienten. Hist�ricamente esta ha sido una profesi�n de buscavidas y bandidos, a mucha honra. Es parte del encanto, pero cuando no sabes, la gente te enga�a: "No, hombre, no te preocupes que ya vendr� el dinero". Conseguir dinero para una pel�cula a veces raya la ilegalidad y yjoo en la ilegalidad siempre he disfrutado.