John Turner, el arquitecto geddesiano
John Turner, the Geddesian Architect
JOSÉ LUIS OYÓN
Resumen / Abstract
John Turner (1927) sostiene una visión creadora y abierta de la vivienda autoconstruida. La vivienda la hacen los usuarios a lo largo del
tiempo, un proceso abierto y progresivo donde los habitantes modelan creativamente sus casas. La experiencia de Turner en países en
desarrollo como Perú, ha sido habitualmente contemplada como pionera de la autoconstrucción auxiliada (aided self-help). En realidad, el
uso de la autoconstrucción en operaciones promovidas oficialmente no era en absoluto nuevo, como muchas veces se ha tendido a creer.
En este texto se argumenta que la figura de Geddes no fue sólo esencial para iniciar al propio Turner en la vivienda progresiva autoconstruida. Fue también crucial para situar su filosofía de la vivienda y su concepción de las relaciones espacio-sociedad.
John Turner (1927) upholds a creative, open view of self-built housing. Houses are made by users over long periods of time, in an open, on-going process
where the inhabitants creatively model their houses. Turner’s experience in developing countries, such as Peru, has usually been considered a pioneer in terms
of aided self-help. Actually, the use of self-help in officially developed operations was not a completely new concept, as we have often been led to believe. In this
text the figure of Geddes is put forward as not only being essential to drive Turner to on-going, self-help housing. It was also crucial to position his philosophy
of housing and the concept of relationships between space and society.
Palabras clave / Keywords
John Turner, autoconstrucción, Patrick Geddes
John Turner, self-help buliding, Patrick Geddes
José Luis Oyón es catedrático de Urbanismo de la Universidad Poltécnica de Cataluña. Ha dedicado toda su actividad investigadora a la historia
urbana, en especial a la historia obrera de la Barcelona de entreguerras. Entre sus publicaciones se pueden destacar: Atlas histórico de ciudades
europeas. 2 vol. (editor en colaboración con M. Guàrdia y F. J. Monclús, CCCB-Salvat-Hachette, Bacelona, Paris, 1994, 1996) y numerosas publicaciones sobre la Barcelona obrera de entreguerras que se pueden resumir en el libro La quiebra de la ciudad popular. Espacio urbano, inmigración y
anarquismo en la Barcelona de entreguerras, 1914-1936, Ediciones del Serbal, Barcelona, 2008. Ha publicado numerosos artículos en revistas internacionales de historia urbana, como Urban History, Planning Perspectives o Storia Urbana y en revistas de urbanismo y de historia contemporánea
españolas como Ciudad y Territorio, Historia Social, Ayer, Segle XX, e Historia Contemporánea. En los últimos años trabaja con Manel Guàrdia
y Nadia Fava sobre la historia de los mercados barceloneses en la edad contemporánea, sobre la que han publicado numerosos artículos y editado
el libro Hacer ciudad a través de los mercados. Europa, siglos XIX-XX, Ajuntament de Barcelona-Institut de Cultura, Barcelona 2010. Trabaja también
sobre Eliseo Reclus y la ciudad y está a punto publicar una selección de escritos de John Turner sobre autoconstrucción y holismo.
Frente a una concepción que contempla las experiencias de autoconstrucción autónoma como tugurios de barracas, jirones de ciudad a derribar, John Turner (1927)
sostiene una visión creadora y abierta de la vivienda autoconstruida. La vivienda
la hacen los usuarios a lo largo del tiempo, un proceso abierto y progresivo donde
los habitantes modelan creativamente sus casas. Ni el estado ni el capital pueden
subvenir el hambre de vivienda en los países en desarrollo: es la comunidad de los
pobladores la que mejor puede abordar las necesidades de alojamiento. Desde el
número monográfico de Architectural Design de 1963 sobre nuevas soluciones de
vivienda en países latinoamericanos, la preocupación principal de John Turner ha
sido en efecto la de poner en valor el proceso de creación de barriadas autoconstruidas de los entonces llamados “países subdesarrollados” (Turner, 1963, p. 363)1.
Se necesitaban otras políticas y otras formas de vivienda diferentes a las que los
estados o las empresas capitalistas de construcción ponían habitualmente en marcha. Era necesario un nuevo profesional dotado de funciones y responsabilidades
distintas, con unos conocimientos técnicos diferentes a los que había adquirido
pacientemente en las escuelas técnicas. Pero el mensaje de Turner al lector del
Architectural Design iba a ir más allá. Pronto explicará que no podemos seguir produciendo y consumiendo viviendas como si fueran lavadoras (Turner 1971b, 1978b).
La acción de habitar es algo más serio, algo esencialmente creativo. Requiere una
extrema atención por parte del usuario, una implicación vital, algo que todavía realiza por su cuenta y riesgo alguna poca gente del llamado mundo desarrollado y por
lo que obtiene, además de cobijo, una cierta satisfacción personal.
1 El texto hace referencia ente paréntesis a una
bibliografía de la obra de Turner que el autor
de este artículo publicará próximamente en un
libro editado por Pepitas de Calabaza. Incluirla
aquí haría el artículo excesivamente largo, por
lo que se remite a los lectores interesados a la
mencionada publicación.
2 Harris, Richard, “A double irony: the originality
and influence of John F.C. Turner”, Habitat
International, vol, 27. 2, june 2003, pp. 245-269.
3 Los esenciales trabajos de Harris sobre
autoconstrucción auxiliada son: “´A Burp in
Church´: Jacob L. Crane Vision of Aided SelfHelp Housing”, Planning History Studies, 11,
1997, pp. 3-16; “The Silence of the Experts:
´Aided Self-Help Housing’ , 1939-1954”, Habitat
International, vol. 22, No. 2, 1998, pp. 165-189;
“Slipping through the Cracks: The Origins of
Aided Self-Help Housing, 1918-1953”, Housing
Studies, 14, no. 3, 1999, pp. 281-309. Sobre
May ver Henderson, Susan R., “Self-Help
Housing in the Weimar Republic: The work of
Ernst May”, Housing Studies, 14, no. 3, 1999,
pp. 3111-328.
4 Geddes, Patrick, Town Planning towards City
Development. A report to the Durbar of Indore,
Holkar State Printing Press, Indore, 1918, Part
I, Chapter XI; sobre la labor de Geddes en India
ver Tyrwhytt, Jacqueline (ed.) Patrick Geddes in
India, Lund Humphries, Londres, 1947; Ferraro,
Giovanni, Rieducaziones alla speranza, Patrick
Geddes planner in India, 1914-1924, Jaca Book,
Milan, 1998; Kahn, Naveeda, Geddes in India:
town planning, plant sentience and cooperative
evolution, Baltimore, 2011.
La experiencia de Turner en países en desarrollo como Perú, ha sido habitualmente contemplada como pionera de la autoconstrucción auxiliada (aided self-help).
Como bien ha explicado Richard Harris no deja de ser paradójico2. Lo más original
del arquitecto inglés, su idea del control directo de la vivienda por los usuarios con
mínima dirección o ninguna dirección por parte de las agencias estatales ha sido
lo que al final apenas ha sido remarcado. Es también paradójico que se atribuya a
Turner la inspiración de los programas de sites and services (loteo y urbanización)
del Banco Mundial de la década del 70 cuando, desde el principio, no sólo matizó
mucho su apoyo a esas políticas de lotes urbanizados, sino que además tales
iniciativas tenían ya una larga tradición en el mundo de las políticas de vivienda de
países en desarrollo, especialmente a través de la figura de Jacob Crane y la experiencia de autoconstrucción dirigida puertorriqueña. En realidad, el uso de la autoconstrucción en operaciones promovidas oficialmente no era en absoluto nuevo,
como muchas veces se ha tendido a creer. Se remonta a la Europa de finales de la
Primera Guerra Mundial, incluyendo las interesantes experiencias de Estocolmo y
Viena y los proyectos de Ernst May en Silesia entre 1918 y 19253.
En cualquier caso, Harris remarca que Geddes fue sin duda la figura capital, en
concreto su Indore Report de 1918 que incluía en unas páginas sobre autoconstrucción dirigida con un interesante proyecto de casa crecedera en cuatro fases y
huertos abonados con los residuos orgánicos de la propia vivienda. Jacob Crane,
director de la Oficina Internacional de la Housing and Home Finance Agency de
Estados Unidos, fue el punto clave de conexión entre Geddes y los programas de
la segunda posguerra, programas que incluirán proyectos de sites and services
en Puerto Rico en la segunda posguerra4. Como argumentaré en este artículo, la
figura de Geddes no fue sólo esencial para iniciar al propio Turner en la vivienda
progresiva autoconstruida. Fue también crucial para situar su filosofía de la vivienda y su concepción de las relaciones espacio-sociedad.
La herencia geddesiana en la formación de Turner
A pesar de que, según su propio testimonio, el trabajo en las barriadas de Lima y
Arequipa entre 1957 y 1965 supuso para el arquitecto inglés un auténtico proceso
42
ZARCH No. 5 | 2015
El legado de la vivienda masiva
moderna
Modernist Mass Housing Legacy
JOSÉ LUIS OYÓN
John Turner, el arquitecto
geddesiano
La casa crecedera y autoconstruida
de Geddes en el Indore Report.
de “desescolarización” de todo lo aprendido en la escuela de arquitectura, su formación personal previa en Inglaterra había modelado sus actitudes para imaginar
el nuevo papel que descubrirá para el arquitecto en sus años peruanos. Esa formación había prefigurado determinadas concepciones del mundo, determinadas
maneras de pensar la experiencia del habitar que trascienden de largo los años
peruanos y son esenciales para entender ese Turner de más largo aliento geddesiano que aquí pretendo reconstruir5.
5 Contamos para ello con relatos autobiográficos más o menos extensos que hablan de
esa etapa formativa de Turner, entre las que
se incluye nuestra larga entrevista grabada
en Hastings en el verano de 2011 y, sobre
todo, con la que es sin duda la más completa
conversación hasta ahora sobre su período
formativo y su experiencia peruana, la realizada
por Helen Gyger en 2007 para preparar su
excelente tesis doctoral: John F. C. Turner, “La
reeducación de un profesional”, en John F. C.
Turner, Robert Fisher (coord.), Libertad para
construir. El proceso habitacional coordinado
por el usuario, Siglo XXI, México, 1976 (1972),
pp. 131-153; “John F. Charlewood Turner talks
to Barbara Goldstein”, Architectural Design, 9,
September, 1975, pp. 524-526; También Turner
1982a, pp. 99-104; (Turner, Chávez, Viloria,
Zipperer, 2000a); Helen GYGER, Interview of
John F. C. Turner, Hastings, 18, 20, 21, 22 June
2007; Golda-Pongratz, Kathrin, Oyón, José
Luis, Zimmermann, Volker, Entrevista a John
F. C. Turner. Habrían de añadirse a esta última
entrevista las consultas y comentarios on-line
a los que Turner ha tenido la amabilidad de
responder ocasionalmente, como las realizadas
por Kathrin Golda-Pongratz o por Richard Harris que se citarán más adelante. La referencia
de la Tesis doctoral de Helen Gyger es; The
Informal as a Project: Self-Help Housing in Peru.
1954-1986, Ph. D., Graduate School of Arts and
Sciences, Columbia University, N. York, Online:
http://academicommons.columbia.edu/catalog/
ac:156051.
6 VN 850010, pp. 1-3.
7 VN 850006, pp. 12-13; VN 850012, pp. 3-5.
La primera influencia en la formación de Turner tiene que ver con la valoración de
lo vernáculo, de lo local. (Turner, Chávez, Viloria, Zipperer, 2000a, p. 2). Ese interés
procedería, nos explica, de sus “antecedentes en un medio familiar que le predisponía a un fuerte énfasis en la importancia de tener una vida material conectada”,
un interés por conectarse con el mundo y transformarlo no sólo con la cabeza sino
con las propias manos6. Turner descubre en su ambiente familiar de niño y adolescente numerosas huellas de William Morris y del movimiento Art and Crafts como
un ascendiente de su interés por lo construido de forma local, por una arquitectura
vernácula hecha de manera personal, manual (Turner, Gyger, 2007, 3, p. 3, 1, p. 3).
Había pues, dice Turner, “una influencia ahí, el sentido profundo de lo vernáculo,
creo, ha sido siempre importante en mi formación”7. Esa valoración instintiva de
lo vernáculo, ”hacia la actividad de la gente hecha con las manos”, conlleva por
supuesto una posición de disgusto e incomodidad hacia los productos realizados
a gran escala y de manera indiferenciada, como la vivienda masiva. Reivindicar las
cosas hechas con las manos como cosas saludables, “no son sólo (las) más bellas
sino también (las) más ´plenas´”, es posicionarse en las antípodas de los productos
masivos y estandarizados, desenraizados del lugar y la persona concreta que los
crea (Turner y Gyger, 2007, 3, p. 2).
Según Turner, la escuela de arquitectura fue menos importante por el currículo
docente que por las lecturas y discusiones con compañeros sobre temas que
excedían las enseñanzas regladas. Su formación además se verá constantemente
interrumpida por actividades e intereses teóricos que le distraen de las pautas académicas habituales. A través de su abuelo materno, Turner había tenido conexión
con el ambiente del socialismo de Morris y Edward Carpenter, radicales socialistas
próximos en el primer caso al anarquismo de Kropotkin (Turner y Gyger, 2007, 3,
pp. 3-4). Tras su primer año de carrera, al terminar la primavera de 1945 y a punto
de finalizar la Segunda Guerra Mundial, se embarca en el servicio militar: su oposición a las armas va a convertirle en una especie de anarco-pacifista. Nada más
llegar, encuentra por azar un ejemplar del periódico Freedom con un artículo de
Colin Ward. Desde ese primer contacto casual, el anarquismo se va a convertir en
la segunda de las influencias en la formación de John Turner iniciando lecturas con
un grupo estrecho de amigos, especialmente del Kropotkin de Campos, fábricas
y talleres, pero seguramente también de otros autores anarquistas ingleses contemporáneos como Alex Comfort o el crítico de arte Herbert Read8. A su vuelta del
servicio, se suscribe durante un tiempo a Freedom y asiste a varios mítines anarquistas de ese entorno. A finales de 1947, a solicitud de Colin Ward, da una conferencia sobre Geddes que coincide con la aparición de un corto artículo sobre él en
la revista anarquista. Ward, al que verá ocasionalmente en algún mitin y reunión en
la sede de Freeedom, será en 1948 el contacto que le facilitará también una corta
estancia en la casa de Milán de Giancarlo de Carlo durante un viaje de estudios
con su amigo Pat Crooke (a solicitud de Ward, De Carlo publicará pocos meses
8 Los John Francis Charlewwod Turner Papers,
University of Westminster, GB 1753 DC JFT,
1947-1951, incluyen notas de lectura del Henry
Moore de Read y una breve correspondencia
de Turner con Comfort (también en el Archivo
personal de Turner de Hastings); (Turner y
Gyger, 2007, 1, p. 17).
9 VN 850012, p. 8; VN85006, pp. 11-12; De Carlo,
Giancarlo, “The Housing Problem in Italy”, Freedom 12 Junio 1948; “The Housing Problem and
Planning”, Freedom 26 junio 1948; ver Gyger,
Helen, “John F.C. Turner in Peru: Reflections on
the Development of a Practice”, d´Annia, Viviana, De Meulder, Bruno, Shannon, Kelly (eds),
UFO, 2. Human Setttlements. Formulations and
(re) Calibrations, Amsterdam. 2010, pp. 28, 37,
30.
10 Serie artículos en War Commentary-For
Anarchism sobre planeamiento y regionalismo, 1939-1945 cuando la revista aparecía en
Londres primero como Spain and the World y
después como Revolt!. Tomó otra vez el nombre de Freedom desde 1945.
11 Turner Papers, University of Westminster, GB
1753 DC JFT. IMG 5790-5809.
12 Apoyándose probablemente en el artículo
de juventud de Geddes On the conditions of
progress of the capitalist and the labourer, considera que, desde el punto de vista económico,
aplicar un concepto de producción apartado
del de Geddes, (“la adaptación del medio a la
función humana para maximizar el mantenimiento y evolución de la comunidad”), puede
ser de desastrosas consecuencias, como
ocurre tanto en el caso de los políticos del
“Capital” como en el de los políticos socialistas
del “Trabajo”. De hecho, se pueden atribuir
“los fracasos de todos los sistemas políticos y
filosóficos a sus aproximaciones no biológicas
o inorgánicas”, afirma con ingenua seguridad.
13 Philip Mairet en 1957 habla del anarquismo de
Geddes y el geddesianismo de los anarquistas
en Pioneer of Sociology. The Life and Letters
of Patrick Geddes, Lund Humphries, Londres.
Sobre la relevancia de la idea de región frente a
la de estado-nación hablaba Mumford en 1938
en el capítulo VI de La cultura de las ciudades y
en su primer libro, La historia de las utopías, en
1922.
14 Geddes, Patrick, “What to do”, The Sociological
Review, vol. X, no. 1, Summer 1918, pp. 67-68.
Archivo Turner Hastings.
después que Turner en Freedom dos artículos sobre el problema de la vivienda
en Italia)9. La de Turner a Geddes y los regionalistas del primer tercio del siglo XX
no era la primera referencia en la publicación anarquista. George Woodcock había
publicado ya una serie artículos sobre urbanismo y regionalismo estableciendo
la conexión entre los geógrafos regionales franceses anarquistas como Reclus
a través de Kropotkin, con Howard, Geddes y Mumford y la Regional Planning
Association of America, artículos que tuvieron una gran influencia en Colin Ward10.
La charla y el artículo de Turner en Freedom no fueron sin embargo directamente
sobre anarquismo, como explica claramente en su introducción11, sino sobre la
especial relevancia que el pensamiento de Geddes puede tener para el anarquismo. Más que intentar tomar ideas del anarquismo relevantes para una visión
geddesiana del mundo, el escrito intenta demostrar lo relevante de Geddes para
el anarquismo. Tras recordar la importancia de Geddes a través de su seguidor
y discípulo ungido, Lewis Mumford, Turner centra en la “aproximación biológica”
la gran aportación de Geddes. Como hace Kropotkin en El apoyo mutuo, los
humanos son idénticos a los animales por su naturaleza y por el reparto de sus
funciones sociales. El complejo social es también orgánico y el anarquismo lleva
implícita la aproximación biológica geddesiana “cuando asume que la sociedad
es orgánica y obedece por tanto a las leyes de la naturaleza”12. Que “las funciones biológicas son funciones sociales y viceversa”, como sostiene la concepción
socio-biológica geddesiana, es en definitiva lo mismo que sostiene el anarquismo. “La ciencia de la región y la ciudad”, es presentada en la conclusión como
campo práctico de actuación del anarquismo: “La Región, en tanto opuesta al
Estado Político, es una implicación directa de tal concepción orgánica y Geddes,
concluye Turner, fue uno de los más importantes si no el mayor profeta del Regionalismo”13 (Turner, 1948).
La tercera y sin duda más decisiva y duradera influencia en la formación de Turner,
fue en efecto la de Patrick Geddes. Las escasas notas de lectura conservadas
de Turner donde se alude más o menos directamente al anarquismo son en realidad notas derivadas de textos geddesianos, un anarquismo que no es el de las
bombas (bombthrowing anarchism), aclara el arquitecto, sino el anarquismo constructivo de la acción directa, concepto que Turner transcribe y subraya en 1947
de un panfleto del escocés titulado What to Do: “para la realización (fulfillment) es
necesaria una Re-absorción del Gobierno en el cuerpo de la comunidad. ¿Cómo?
Cultivando el hábito de la acción directa en lugar de esperar a las agencias representativas”14. Es el mismo pasaje que extractará en su artículo sin duda más político sobre la vivienda treinta años después (Turner, 1978b). En el texto de Freedom
alude ya al hecho de que Geddes, ajeno siempre al academicismo, quería no sólo
ver sus ideas reflejadas en el papel sino sobre todo llevarlas a la realidad a través
de la “acción directa”. La pista de Geddes se había abierto algunos años antes.
44
ZARCH No. 5 | 2015
El legado de la vivienda masiva
moderna
Modernist Mass Housing Legacy
JOSÉ LUIS OYÓN
John Turner, el arquitecto
geddesiano
Portada del número 6 de la revista Plan, 1949.
En 1943, como tarea de castigo en el Wellington College (Berkshire) se le dio a re-
El artículo de Tuner sobre Geddes en Freedom
10, enero 1948.
sumir un capítulo de La cultura de las ciudades de Lewis Mumford: “el nombre de
Geddes se me quedó grabado, quedé impresionado”, comenta Turner15. En enero
de 1947, al ordenar libros y papeles de una casa familiar próxima a la de sus padres, la Thatched House de Henry Wilson, descubre papeles y libros del escocés.
Se trataba esencialmente de múltiples diagramas holísticos y surveys urbanísticos
como el Indore Report, el plan urbanístico de 1918 que hemos recordado como el
inicio histórico del urbanismo de la autoconstrucción auxiliada16. Durante los meses siguientes se sumerge con dos de sus amigos de la Architectural Association,
Paffard Keatinge-Clay y Bruce Martin en la interpretación de los complejos diagramas geddesianos y en su posible aplicación al campo de la arquitectura. Turner
recibe de inmediato el estímulo de Jacqueline Tyrwhitt para escribir con Paffard un
breve apéndice sobre el significado del más completo de ellos para la reedición
de Ciudades en evolución que preparaba la conocida seguidora de Geddes17. Esa
inmersión en el pensamiento del escocés a través de los diagramas será absolu-
15 VN 85003, p.1; Turner, 1972c1.
16 Harris Richard “The Science of the Experts, op.
cit, p. 160.
17 Sobre Tyrwhitt, con alguna breve alusión a sus
contactos con Turner, ver SHOSHKES, Ellen,
Jacqueline Tyrwihtt: A Transnational Life in
Urban Planning and Design, Ashgate, Farnham,
2013, p. 106. Tyrwhitt, que estaba reeditando el libro de Geddes para la Association for
Planning and Regional Reconstruction, solicitó
a los dos amigos que fueron asistidos por el
entonces ingeniero graduado Bruce Martin,
más tarde miembro de la Royal Society of Arts.
Hablando sobre el diagrama tras medio siglo
de carreras muy diferentes, Turner y Martin
seguían coincidiendo en su utilidad, más allá
de que no sirviera como método práctico para
organizar la información como originalmente
habían esperado (Comunicación correo electrónico, 2 febrero 2015).
18 Archivo Turner Hastings; notas de lectura Westmintser University Archive, GB 1753 DC JFT.
tamente trascendental en su biografía: Turner empieza con el Geddes holista con
apenas veinte años y con él sigue hoy, cerca de cumplir los noventa. Lo esencial
de las notas de lectura conservadas en el archivo personal del arquitecto y en el
de la Westminster University, de 1947 a 1949 son sobre Geddes y vemos desfilar
por ellas a importantes personajes del holismo, en especial Lancelot Law Whyte,
cuyos libros consultó, a cuyas conferencias asistió y con quien incluso cruzó correspondencia18.
La tesis central de Turner, Keatinge-Clay y Martin es que el diagrama llamado
Notation of Life, la thinking machine publicada por Geddes en 1927, contribuye
decisivamente a una forma sintética de pensamiento, que ayuda a pensar de forma no analítica sino relacional. Es fundamental estudiar las relaciones recíprocas
entre el medio (environment o place) y el organismo (organism o folk) mediadas a
través de la función (function) [e-f-o/o-f-e]. Tales relaciones deben considerar no
sólo un lado activo y otro pasivo, sino también un lado exterior, objetivo, y uno
interior, subjetivo, expresados en un “cuadro de síntesis” compuesto de cuatro
cámaras o cuadrantes (chambers of life) (Geddes las denominaba actos, obras,
pensamientos y hechos -acts, facts, thoughts o dreams y deeds). El interés del
La Notation of Life de Geddes en la reedición
de Tyrwhitt de Ciudades en evolución,
de 1949.
diagrama para Turner y sus amigos no está en analizar un ente y clasificarlo en un
cuadrante determinado sino en la posibilidad de integrarlo en el principio subyacente de unidad que inspira la totalidad del diagrama, de relacionarlo. Si el método analítico se asienta en especialidades y separaciones entre saberes, en base
a propiedades o partes de entes que son considerados de manera independiente
y estática, el pensamiento de Geddes razona en base a relaciones y conexiones
dinámicas que dan una visión de síntesis e integración de los entes considerados. Cosas y organismos no deben ser concebidos separadamente sino que lo
importante es la relación entre ellos, una relación que forma parte de un “sistema
integral”. El pensamiento debe recuperar esa “unidad dinámica de relación” entre
las cosas y organismos para no perder su sentido de totalidad: “La conexión es el
origen de la realidad: los objetos en sí mismos no tienen significado, sólo se hacen reales cuando se los concibe en relación” (subrayado Turner). Si sustituimos,
por ejemplo, “objetos” por “casas” descubrimos la importancia de esa manera
relacional de pensar característica que Turner toma muy pronto de Geddes: una
casa no es sólo un objeto en sí sino que interactúa con las circunstancias de
un usuario y considera variables contextualizadas como el tipo de tenencia o la
proximidad al trabajo, las redes de parientes y amigos. Como dirá más adelante,
la casa no es sólo “lo que es” como producto acabado, sino lo que “hace”, algo
activo que desempeña un papel en un momento concreto en la vida del usuario.
Es tal concepción relacional la que debe inspirarnos a la hora de pensar y hacer
arquitectura y ciudad.
“Lo que contemplamos es la relación entre la gente y su entorno, (…). Es la relación lo que importa! No
estamos hablando de gente, no estamos hablando de edificios, estamos hablando de la relación entre
ellos. Ahí es donde está el significado (…) ¡En realidad afirmé eso ya en 1947!”19.
Y, en efecto, uno de los documentos preparatorios del texto sobre la Notation of
Life que comentamos comienza así:
“Dado que la existencia reside sólo en la relación, una estructura de entidades estáticas no tiene sig19 VN 850010, pp. 2-3.
20 Archivo personal Turner, Hastings, mayo 1948.
nificado. El significado del diagrama reside en el hecho de que revela un patrón de relaciones. En el
“holismo” las partes está ajustadas e influenciadas por el todo y el todo está moldeado y ajustado por
las partes. Al todo del que el Ser es parte lo llamamos su entorno (environment)”20.
46
ZARCH No. 5 | 2015
El legado de la vivienda masiva
moderna
Modernist Mass Housing Legacy
JOSÉ LUIS OYÓN
John Turner, el arquitecto
geddesiano
Apuntes de Turner para su artículo en la reedición de Ciudades en evolución.
Durante esos años, Turner y sus amigos leyeron ampliamente textos de holismo,
en especial de Lancelot Law Whyte cuyo texto The next development in man es
transcrito en sus apuntes (además de Whyte, en sus notas de 1947 a 1949 aparecen Smuts, Jung, Steiner). La idea de White de que a través de las relaciones se
llega a la estructura parece tomada de ahí, así como la idea misma de proceso.
Como dice Turner al hacer su primer balance sobre la importancia decisiva en su
formación de los escritos y las thinking machines, los diagramas conceptuales o
“máquinas pensantes” de Geddes: “me enseñó a pensar en términos de las relaciones entre el hombre y su medio, costumbre mental esencialmente incompatible con la compartimentación profesional (…); me condujo a “una interpretación
sistemática del hombre y su medio que yo he empleado y tratado de desarrollar
después de haber encontrado por casualidad algunas de sus notas manuscritas”.
Estas notas, en que se describe principalmente sus “máquinas pensantes” a su
amigo Henry Wilson me fascinaron. Eran a todas luces el intento de determinar
las vinculaciones entre las ciencias, problema que me interesó especialmente de
joven” (Turner, 1972c1, p. 131).
Las influencias del anarquismo y de Geddes en el grupo de Turner21 quedaron
reflejadas en dos números de la revista estudiantil Plan publicados en la Architectural Association en 1949 y 1950. Además del escocés, se reseñan libros de
Mumford, de Kropotkin, de Lancelot Law Whyte, de Herbert Read, de Martin
Buber, o La mecanización toma el mando de Sigfried Giedion (un personaje al
que el autor conoció personalmente). Como en Geddes y Mumford la palabra
clave es comunidad, arquitectura para la comunidad en este caso: “la expresión
de hombres, mujeres y niños viviendo juntos (…)”, no como en “los suburbs y los
bloques de apartamentos (…) donde el aislamiento es completo”. Los proyectos
y los espacios urbanos del nuevo arquitecto geddesiano deben estudiar, “la relación entre el hombre y el entorno –un estudio de un proceso vivo más que de una
forma estática”, se dice por ejemplo en un breve artículo sobre la vitalidad de las
plazas públicas italianas22. Con visión manifiestamente geddesiana (el desarrollo
debe ser “integrado”, producirse un “mutuo estímulo entre organismo y entorno”),
21 Además de los tres citados y Pat Crooke,
formaban parte del grupo John Voelcker y
Stephen Macfarlane.
22 Plan, no. 6, 1949, pp. 4-5, 21-17; Plan. No. 7,
1950, pp. 20-21: GYGER, “John F.C. Turner in
Peru…”, op. cit. p. 30.
Turner y sus amigos critican el aislamiento del individuo en el sistema y formulan
sus propuestas de cambio en los ámbitos de la construcción, la arquitectura y
la educación infantil. Una nueva economía adoptará técnicas de construcción
industrializada que ofrezcan variedad y flexibilidad, con trabajo en equipo en
grupos autónomos y descentralizados. La arquitectura deberá reintegrarse a la
vida y el arquitecto trabajar colaborativamente en grupo. La escuela estimulará
al niño y su vida se convertirá “en una parte de la vida de la comunidad”23. Las
experiencias arquitectónicas ensalzadas con entusiasmo por el grupo son las
del Peckham Pioneer Health Centre (Turner se hace eco en nuestra entrevista
de esa experiencia de autogestión sanitaria de los años treinta, muy citada en
el ambiente anarquista de postguerra y especialmente en los escritos de Colin
Ward) 24 y el programa de escuelas de condado de Hertfordshire, donde trabajó
Bruce Martin.
Aunque asista a los CIAMs de Bergamo y Hoddeson, visite las obras de l´Unité
d´Habitation de Marsella o trabaje un año entero con reconocidos arquitectos
del Movimiento Moderno como BBPR, Turner es desde el principio un arquitecto
decididamente “anti-big social housing projects”, opuesto a la moderna arquitectura masificada. Si bien admira la belleza de algunos edificios corbuserianos
como l´Unité d´Habitation de Marsella, ve la vivienda masiva con actitud diletante,
precavida ante el poder omnímodo y deshumanizante de la técnica (esa es en el
fondo la razón de su interés por La mecanización toma el mando)25. Es en la escuela de verano del CIAM de 1952 en Venecia, asociada al congreso de BergaApuntes de las lecciones Turner en el Instituto
de Urbanismo de Lima con citas geddesianas,
junio 1957.
mo, donde Turner conocerá al arquitecto peruano Eduardo Neira 26. Neira había
traducido ya para sus estudiantes de urbanismo en Lima el texto de Turner sobre
la Notation of life de Geddes. Seguidor del Movimiento Moderno en el ámbito de
la arquitectura y el urbanismo peruanos, experimenta como Turner una evolución
similar al distanciarse de los planteamientos más estéticos de la arquitectura moderna e inclinarse por visiones más socialmente comprometidas. Como el inglés,
veía también en Geddes la posibilidad de buscar una vía alternativa a la del Movimiento Moderno. Trabajando ya en la administración peruana comunicó a Turner
en 1955 la posibilidad de trabajar en Perú en el tema de la vivienda si el político y
arquitecto Fernando Belaúnde Terry resultaba elegido presidente al año siguiente. Neira había trabajado en las nuevas barriadas populares autoconstruidas de
Arequipa elaborando un interesante informe, organizando su Departamento de
Inspección de Urbanizaciones y Obras Públicas (UIP), y escribiendo artículos
sobre la conveniencia de adoptar sistemas de “ayuda mutua dirigida” inspirados
en el pionero programa y manual de autoconstrucción por ayuda mutua dirigida
de Puerto Rico27.
“Geddes parecía mucho más adecuado que Le Corbusier y los Congrès Internationaux d´Architecture Moderne (CIAM) (…); pero sólo fue después de trabajar en el Perú cuando empecé a formular
claramente el descontento que compartía con tantos contemporáneos. Sentíamos y sabíamos que
la arquitectura no puede practicarse como si fuera una variable independiente, como si el arquitecto
no tuviera responsabilidades sociales ni políticas, y tampoco podíamos aceptar la antítesis marxista.
Parecía tan absurdo creer que la estructura social podía modificarse por la arquitectura como creer
que la arquitectura debería someterse por completo a una interpretación oficial del gusto popular. La
labor de Geddes en Escocia y en la India y en otras partes conducía a otro punto, aunque no podíamos ver cuál.
23 Plan, no. 6, passim.
24 VN 850010, pp. 1-2; (Turner y Gyger, 1, p.1);
Plan. No. 7, pp. 22-50.
25 VN 85006, pp. 10-12.
26 Colin Ward habla en el prefacio de Housing by
people (Turner, 1977d, p. 22) de una reunión en
esa escuela con Crooke, De Carlo y Ward “para
discutir el problema crucial de quién suministra
y quien decide” en la vivienda y el urbanismo.
27 Gyger, The Informal as a Project, op. cit, pp.
84-93.
28 Archivo Turner, Hastings, mayo 1948, 1957;
Gyger, ibid, pp. 93-96.
El método de Geddes, se mostraba con harta claridad, era compenetrarse lo más
hondamente posible con las personas de quienes se trate, en especial de quienes
más padecen las consecuencias de las disfunciones urbanas y las malas condiciones de vida” (Turner 1976i, p. 132).
Turner en Perú: de la autoconstrucción dirigida a la espontánea
Tras su llegada a Perú a comienzos de 1957, Turner dará clases de planeamiento
urbano durante unos meses en el Instituto de Urbanismo de Lima. Las notas de las
clases impartidas conservadas en su archivo, una sobre la definición de urbanismo
y otra sobre Geddes, revelan otra vez el influjo del escocés28. En los extractos de
48
ZARCH No. 5 | 2015
El legado de la vivienda masiva
moderna
Modernist Mass Housing Legacy
JOSÉ LUIS OYÓN
John Turner, el arquitecto
geddesiano
Cirujía conservadora geddesiana y transformación en la barriada Mariano Melgar, Miraflores, Arequipa, 1957, en “Las urbanizaciones
populares de Arequipa”, Noviembre 1957
(Gyger, 2013).
los libros que maneja –Town and Country Planning de Abercrombie, City, Region
and Regionalism de Dickinson, Communitas de los Goodman, The Human Environment de Hilberseimer, Ciudades en evolución y por supuesto el Indore Report de
Geddes, el planeamiento se define como el “proceso de ordenar en entorno físico”
desde la región hasta la vivienda para el bienestar humano y la “ciencia del planeamiento”, “la ECOLOGÍA del hombre y su entorno”. Los elementos de esa ecología
son las categorías geddesianas de territorio, trabajo y habitante (place, work, folk),
“un proceso orgánico de interacción entre el hombre y su entorno a través del trabajo”. El urbanismo se debe implementar a través de un proceso dinámico en cuatro fases relacionadas con los cuatro cuadrantes de la vida, las cuatro chambers of
life geddesianas, rebautizadas aquí “análisis” (survey), “proyecto”, “administración”
y “el plan en acción”. La noción de unidad orgánica y equilibrio se expresa también
en su lección sobre la Sección del valle, la valley section geddesiana.
En junio del 57 llegará Turner a Arequipa, la segunda ciudad del país, entonces en
un explosivo proceso de urbanización y ocupaciones de terrenos periféricos con
“barriadas” populares. Durante los primeros meses como director del programa
de regulación y mejora de las barriadas, Turner elabora un ambicioso plan para la
oficina del Departamento de Inspección de Urbanizaciones y Obras Públicas de
Arequipa (UIP) y redacta un interesante informe29 que vuelve a fundamentarse en
los cuadrantes geddesianos: survey, investigación, comunicación de la información y ejecución de los proyectos. Como en el survey de Geddes, la ciudad se concibe inscrita en su región circundante y, según Gyger, ”la base de sus recursos en
términos de lugar (place) y gente (folk) constituye el fundamento del planeamiento
holístico que se propone” 30. Para la fase de ejecución, Turner abogaba, como en
los escritos para Plan, por una estandarización de componentes que permitiera la
máxima variación y adaptabilidad para realizar proyectos experimentales, prototipos para inspirar la producción de los autoconstructores. A causa de problemas
con los pobladores de las comunidades y sus representantes y a limitaciones de
fondos, sólo se abordarán pequeños proyectos de ensayo. El primero fue una
operación de cirugía conservadora (conservative surgery) a la manera geddesiana
en la barriada Mariano Melgar, en la zona de Miraflores.
Firmadas con su esposa Cathy y su viejo amigo Pat Crooke, las conclusiones
finales del número extraordinario del Architectural Design de 1963 más arriba comentado son el primer gran manifiesto a favor de una autoconstrucción al final de
su estancia peruana, una autoconstrucción que, después de experiencias fallidas
en Arequipa, deberá ser cada vez menos dirigida por las agencias estatales y cada
vez más espontánea. El problema de la vivienda en Latinoamérica, dice Turner, no
puede ser definido en términos absolutos. Limitado el problema al déficit relativo y
a la demanda efectiva, los grupos sociales de trabajadores laboralmente estables
promotores de las invasiones en las barriadas periféricas limeñas demuestran en
opinión del arquitecto la capacidad financiera, organizativa y el oficio para responder activamente a “su” problema de vivienda en los degradados tugurios del
centro histórico de la ciudad. Esa idea relativa y dinámica de la vivienda que la hace
depender de las capacidades y la movilización de los recursos disponibles es relacional, contextual, tal como muestran los apuntes de clase sobre el problema de la
vivienda en el Instituto de Planeamiento de Lima (IPL) y que comienzan aplicando
los sintéticos esquemas geddesianos a la vivienda. El valor de la vivienda para el
usuario varía con la situación demográfica de su familia, con la localización de su
empleo y con la cambiante oferta de distintos tipos de habitación en las diferentes partes de la ciudad. La vivienda no es un objeto aislable y estático sino que
debe entenderse dentro del proceso urbano del usuario. Esa reflexión, que sólo
se esboza en 1962 y 1963, tendrá justo al acabar el periplo peruano una enorme
trascendencia en la conformación del pensamiento turneriano: para comprender la
vivienda hay que comprender la naturaleza del proceso urbano en la que se inscribe, del producto habitacional y de su impacto en la vida del usuario, factores todos
ellos relacionados entre sí (Turner, Crooke, Turner, 1963a4, p. 390)31.
Turner deriva una serie de principios de la discusión de todas las experiencias
de vivienda analizadas en el número de AD. La comunidad, los usuarios, y no el
estado o el sector comercial-capitalista son los actores fundamentales. El arquitecto debe “canalizar” los recursos y “acompañar” las capacidades locales, no
“dirigirlos”: no se trata de trabajar “para” la gente sino “con” la gente: dar “la ayuda
adecuada en el momento adecuado”. La forma que debe dar el arquitecto a todos
esos recursos pasa por pensar la casa y los nuevos barrios en etapas: la etapa
clave inicial de atribución del suelo en propiedad y la seguridad y la identidad
social que proporciona (“lo primero el suelo”); el pequeño núcleo edificado inicial
después, con el aprovisionamiento mínimo de redes técnicas; sólo al final, la cons29 Archivo Turner, Hastings, Confidential Report
on the technical assistance of the Ministerio
de Fomento Departamento de Inspección de
Urbanizaciones y Obras Públicas, Arequipa
from July to August 1957. An assessment of the
problem and a suggested outline program for
work to be carried under the Ministerio de Salud
Pública. n.d. ca. Septiembre 1957.
30 Gyger, The Informal as a Project, op. cit, pp.
99-101; (Turner y Gyger, 2007, p. 32).
31 Archivo Turner Hastings, Conferencia IPL, 12
septiembre 1962.
trucción del tendido eléctrico y del alcantarillado y las obras de pavimentación.
Asesorada por los técnicos, la construcción de ciudad es un proceso pautado en
el tiempo que debe reproducir en lo posible el habitual proceso de construcción de
las propias barriadas. Es aquí donde Turner explicita por vez primera la célebre frase de Geddes del Indore Report: “la necesidad esencial de una casa y una familia
es ESPACIO y la mejora esencial de una casa para su familia es MÁS ESPACIO”;
recuerda también que Geddes proponía utilizar los residuos orgánicos de la casa
como abono de su huerto familiar evitando costosas operaciones de alcantarillado que podían hipotecar la esencial necesidad de espacio habitacional) (Turner,
Crooke, Turner, 1963a4, p. 391-393).
50
ZARCH No. 5 | 2015
El legado de la vivienda masiva
moderna
Modernist Mass Housing Legacy
JOSÉ LUIS OYÓN
John Turner, el arquitecto
geddesiano
Proyectos de autoconstrucción por ayuda
mutua dirigida y auxiliada en Arequipa (Gyger,
2013).
La construcción de una teoría
Portada del número monográfico de Architectural Design, agosto 1963.
zar a nivel académico lo observado en Perú. Van a ser los años de la teorización de
Investigador y profesor del MIT desde 1965, Turner se dedicó en Boston a profundiideas que hasta entonces, acosado por el trabajo cotidiano en diferentes agencias
de la vivienda en Perú, permanecían todavía en estado latente. Son los años de
“creación de una nueva escuela de pensamiento y acción sobre la vivienda” como
dirá al poco de terminar su experiencia americana (Turner, 1977d, p. 161). Como
en 1963, la frase de Geddes del Indore Report sobre la ineludible necesidad de
una casa en crecimiento progresivo se repetirá en dos artículos coetáneos –sobre
las barriadas de Cueva y Benavides-, como lo hará en escritos o entrevistas posteriores (Turner y Mangin, 1968a, Turner, Chavez, Viloria Zipperer, 2000b). Desde
la erección de la cerca de delimitación del lote, la casa se construye efectivamente
en diversas fases que pueden llegar a dilatarse hasta quince o veinte años. Sólo
al final, cuando la propiedad y la edificación se hallen debidamente consolidadas,
se instalarán los servicios públicos de infraestructura y urbanización (el abastecimiento de agua y el alcantarillado, el tendido de la red eléctrica, la pavimentación
de las calles). Lo fundamental de todos esos asentamientos “autónomos”, es que
constituyen procesos en marcha. Es la economía de la familia la que va buscando
solucionar su vivienda ajustándose a un presupuesto familiar en camino ascendente. La vivienda y el urbanismo son “progresivos”, constituyen un “sistema de
desarrollo progresivo” (Turner 1967a, pp. 80-81).
Lo más original en la filosofía de la vivienda de Turner -lleva años reivindicando
como su principal aportación- su “auténtico eureka” por encima incluso de la
puesta en valor de la vivienda y el urbanismo progresivo de las barriadas y del
proceso de acción directa controlado por los propios usuarios, es su definición
contextual y situada de la vivienda. “Que la realidad de la vivienda reside es sus
relaciones es la premisa básica y el punto de partida de sus enseñanzas” sobre
el alojamiento desde 196732. Para buscar una definición alternativa que amplíe la
perspectiva económicamente chata de la casa como simple objeto material que
satisfaría una demanda abstracta de manera supuestamente objetiva e universal
es necesaria una visión relacional de la vivienda33. Como explica en Rehovot en
agosto de 1971, en la frase “la gente construye y vive en casas” nos podemos fijar
en la palabra “casas” y en consecuencia en el objeto casa como un fin en sí mismo
o bien podemos fijarnos en los verbos “construir” y “vivir”, que establecen una relación más compleja e íntima entre el objeto “casa” y el sujeto “gente” (Turner, 1971b).
La vivienda no es un objeto sino una rica relación que el usuario establece con ella.
Desde que presenta en Puerto Rico en 1966 su texto esencial “Una nueva visión
del déficit de la vivienda”, (Turner, 1966a) Turner elabora y va refinando en efecto una nueva “definición contextual de la vivienda” en términos de las relaciones
funcionales entre el usuario y su entorno, entre hábitat y habitante. El significado
de la vivienda no reside en el objeto en sí, sino en las relaciones más amplias del
usuario con su entorno habitacional: “los usos reales y los valores reales de una
vivienda y del entorno de la vivienda para la gente real residen en las relaciones
entre esa misma gente y los componentes físicos del entorno y no en los objetos
o componentes”34. Se traslucen otra vez aquí las tempranísimas preocupaciones
del arquitecto por estudiar a partir de Geddes esa relación bidireccional entre los
términos entorno y organismo, vivienda y habitante, a través de funciones (el efoofe geddesiano estudiado en su primer texto sobre el escocés de 1949). Como en
aquella interpretación de la Notation of Life, la realidad de los objetos, de la vivienda
en este caso, sólo se concibe en relación. Para explicar tal relación, Turner habla
de tres funciones básicas del “entorno de la vivienda”: una razonable seguridad
de tenencia, un cobijo o protección derivados de la dimensión y características de
confort o modernidad de la casa y una adecuada localización dentro de la ciudad,
es decir, proximidad al lugar de trabajo y a los equipamientos y redes comunitarias
de parientes y paisanos que sirven de apoyo al futuro habitante (en términos de
“funciones internas o subjetivas”, las llama seguridad, identidad o estatus y oportunidad). Estas funciones no pueden definirse de manera absoluta y universal para
un habitante urbano estándar sino que varían infinitamente dependiendo de las
cambiantes situaciones de vida de cada individuo en la ciudad. Por consiguiente,
no puede hablarse de un déficit abstracto de vivienda resultado de definir un estándar mínimo en términos de características físicas de tamaño-modernidad (un
estándar que lo que hace es dejar de hecho fuera de esos mínimos a la mayoría
de alojamientos de una ciudad como Lima) sino que lo que hay en realidad son
infinitas demandas y respuestas a las mismas en forma de vivienda que dependen
32 Respuestas preliminares Cuestionario entrevista Hastings10 julio 2011.
de la situación concreta del individuo en la escalera de la movilidad social, de su
33 Rememorando una conversación con Illich
sobre el hecho de que raramente tiene una persona más de un idea original, el propio Turner
nos recordaba en mensajes electrónicos de 4
de febrero y 9 de octubre de 2014: “Sólo he tenido un momento de eureka, aunque no puedo
creer que sea el único que lo haya tenido. Es la
esencia del diagrama que hice sobre forma y
uso para el encuentro de 1966 en Puerto Rico
(…) que ilustraba las contradicciones extremas
que la variabilidad independiente de las formas
construidas y las funciones pueden tener (y)
que mostraba las prioridades materiales en
diferentes contextos socioeconómicos”; VN
850011, pp. 1-2.
miliar. De ese modo, la vivienda resulta condicionada espacialmente al movimiento
34 Turner, John, “Interpretaciones y políticas
alternas. Un examen de los asentamientos
espontáneos en América Latina”, manuscrito
citado por Robert, Jean, Trust People, op. cit,
p. 30.
encima de la seguridad de tenencia y muy por encima de las cualidades de confort
cambiante posición geográfica en la ciudad y de la evolución de su trayectoria fadel individuo en la ciudad, condicionada socialmente al variable estatus social del
individuo en cuestión y condicionada finalmente al proceso demográfico de evolución familiar, todos ellos cambiantes en el tiempo: las demandas de vivienda y las
viviendas realmente necesarias, las viviendas que hacen algo por la gente no son
algo abstracto sino que se encuentran siempre espacial, social y demográficamente situadas. La prioridad habitacional de una familia inmigrante pobre recién llegada de la sierra a Lima es la proximidad a las áreas centrales donde encontrará una
multitud de posibles y cambiantes lugares de empleo eventual y donde el precio de
alimentos y de una infravivienda son relativamente bajos. La máxima prioridad es
esa localización próxima a fuentes de trabajo y redes familiares y de mercado, por
de la casa. Más alto en la escala social y en el proceso de aculturación urbana, el
habitante de las jóvenes barriadas de los suburbios está dispuesto a sacrificar el
confort y el equipamiento doméstico de una casa moderna y a costearse el obli-
52
ZARCH No. 5 | 2015
El legado de la vivienda masiva
moderna
Modernist Mass Housing Legacy
JOSÉ LUIS OYÓN
John Turner, el arquitecto
geddesiano
Evolución de la vivienda progresiva en San
Martín de Porres (Lima) y fases de construcción (Architectural Design, agosto 1963).
gado transporte en autobús a su lugar de trabajo a cambio de poseer una parcela
en este tipo de asentamiento. Colchón de seguridad en momentos de imprevista
pérdida de trabajo o de grave enfermedad, la seguridad de tenencia de su casa
y su parcela es para él lo esencial. En posición económica desahogada y en lo
alto de la trayectoria de movilidad social ascendente, ni la seguridad de tenencia
ni la proximidad a las fuentes de trabajo o las redes comunitarias y de parientes
cuentan mucho para el profesional de alto rango. Toda la prioridad en su demanda
de vivienda se vuelca hacia el valor simbólico y el estatus que le puede aportar un
vivienda moderna provista del mejor equipamiento de confort del mercado. Son
tres situaciones socio-espaciales arquetípicas con relación a la vivienda pero que
indican a su vez trayectorias que pueden darse en el curso de dos o tres generaciones de una misma familia en su largo recorrido por la gran ciudad. Padre,
hijos y nietos de una misma familia experimentan situaciones vitales diferentes
en sus diferentes contextos urbanos y socioeconómicos; tienen prioridades de
vivienda distintas, demandan viviendas diferentes en función del ciclo familiar. Lo
que Turner trata en definitiva de mostrar muy geddesianamente con esa “definición contextual de vivienda (…) en términos del funcionamiento de las relaciones
funcionales entre hábitat y habitante” es, en el fondo, la extrema y nada predeterminable variabilidad de las demandas, lo que en otro texto poco posterior llama
“situaciones sociales, es decir, (…) posiciones momentáneas que la gente ocupa
en sus trayectorias geográficas y socioeconómicas” (Turner, 1968d, p. 356-358,
1968a, 1968e, 1969b, p. 9)35.
Es en esos años cuando Turner, buscando dinamizar la Notation of Life de Geddes
con la teoría de sistemas de Ludwig von Bertalanffy, comenzará a visualizar el proceso de vivienda como una acción que implica actores, acciones y resultados dentro de un contexto. Geddes estará también presente de partida en su concepción
del habitar como actividad esencialmente “poética”, “productiva”, un instrumento
para conseguir fines existenciales cuyo logro representa un florecimiento del individuo y de la comunidad, como recalcado Jean Robert36. Los autoconstructores
de las barriadas peruanas o los de los Estados Unidos no sólo “obtienen más por
su dinero”, sino que extraen también de su actividad un mayor “significado existencial” que el que obtendrían al comprar casas como banales objetos empaquetados: “en el contexto de la pobreza, la autonomía incrementa la cantidad, en cualquier contexto, eso aumenta el significado” (Turner y Fichter, 1976i, p. 238-239). La
autonomía encierra un significado existencial que excede el mero valor económico.
Conceptos geddesianos en las clases en el
Instituto de Planeamiento de Lima, septiembre
1962.
Apoyándose en la noción de fulfillment (realización) de Geddes, y enriqueciéndola
con Sapir, Mumford y sobre todo con Illich, Turner reflexiona sobre las pocas esferas de la vida en las que no hacemos más que “consumir productos preparados,
premontados, predeterminados en todos los sentidos. Además de los menores
costes, el potencial de mayor autonomía en la vivienda, (…) podría devolvernos al
menos en esta esfera de actividad cierto grado de satisfacción espiritual y de `valor
no utilitario`”: ahí reside en el fondo el “significado de la autonomía” (Turner y Fichter, 1976i1, p. 245). La vivienda, o mejor el habitar es, como el cultivo y preparación
de alimentos, el acto de vestirse, el cuidado de nuestro cuerpo o la procreación y
cuidado de nuestros hijos, una “actividad existencialmente significativa”, potencialmente creativa. Como todas esas actividades sobre las que dependen los “fines
inmediatos de la vida”, la vivienda puede actuar de “vehículo de nuestra realización
personal” (Turner, 1978b, p. 1143); una realización que a su vez depende de la
responsabilidad personal sobre nuestra propia vida y no puede ser reducida como
tal a un simple producto empaquetado. Cuando las personas trabajan para sí, no
sólo dejan mucho más espacio para sus relaciones interpersonales sino también
“para la labor creadora, el orgullo y la satisfacción que la obra en sí procura” (Turner
y Fichter 1976i1, p. 151).
Retorno final a Geddes
De vuelta otra vez a Inglaterra y tras digerir el éxito (y también las críticas del lado
marxista) de Housing by people (libro que le convertirá en el autor más citado sobre autoconstrucción en los setenta y ochenta), Turner se embarcará desde sus
últimos años de experiencia universitaria en la AA en el proyecto Tools for Communitiy Regeneration (TCR). La idea era construir una gran biblioteca-base de datos
para proporcionar herramientas locales adecuadas para las tareas que vecinos o
usuarios pudieran llevar a cabo al desarrollar una actividad concreta no sólo en los
países en desarrollo sino también en los desarrollados. Esa idea de crear una base
de datos sobre actividades permanecerá y será potenciada por Turner en la última
década en el proyecto del “Framework”. El proyecto TCR “proporciona un marco
(“framework”) para que la gente construya su propia base de datos específica para
35 Entre las referencias de Turner en estos textos,
se encuentra el clásico de Willmot y Young,
Family and kinship in East London, fundamental
para hablar del enraizamiento espacial de las
redes familiares en contexto urbano.
36 ROBERT, Jean, Trust People, Habitat International Coalition, Mexico DF, 1996, pp. 3-4, 9.
la actividad o el lugar” concreto de los que se trate (Turner, 2002a, p. 21). La idea
de marco, de framework, que indexa informaciones utilizables como herramientas
está presente en Turner desde el desarrollo de TCR. De manera extraordinariamente ambiciosa, aunque consciente también de que no se trata de encontrar
ninguna piedra filosofal, el arquitecto pretende en efecto en los últimos años de su
vida que el Framework que analiza y clasifica las actividades se constituya en un
54
ZARCH No. 5 | 2015
El legado de la vivienda masiva
moderna
Modernist Mass Housing Legacy
JOSÉ LUIS OYÓN
John Turner, el arquitecto
geddesiano
Fases y operaciones urbanizadoras en la
construcción progresiva de barriadas limeñas
(Architectural Design, agosto 1968).
auténtico patrón de relaciones. Procesos de muy diverso tipo, pero referidos en
principio a tres grandes ámbitos: actividades que tienen que ver con la creación
de espacio donde se relacionan las personas con la arquitectura y el urbanismo
(“placemaking”), actividades interpersonales implicadas en la formación de comunidades y actividades concernidas en la relación de las personas con su espacio
natural, como ocurre en las referentes a la producción de alimentos. En una nueva
vuelta de tuerca holística, Turner busca nada menos que realizar una síntesis de las
actividades de la vida humana. El Framework y sus usos constituyen un desarrollo
del pensamiento de Geddes que busca un método de síntesis, una reelaboración
de la “Notation of Life” de Geddes relevante para la práctica37. Pretende en ese
sentido identificar actores y factores y valorar su peso en cada una de las decisiones e intervenciones, detectar los posibles conflictos durante el proceso analizado
y situarlos en un contexto comparativo, o solucionar problemas de comunicación
constituyéndose en herramienta de utilidad práctica para técnicos, colectivos vecinales o movimientos sociales en el ámbito –de momento- de la arquitectura y el
urbanismo. Más allá de su evidente valor como herramienta de reflexión en sentido
amplio, de permitir cruzar informaciones buscando un vocabulario común al necesario nivel global, las dificultades de calidad y cantidad mínima de información, la
utilización de criterios similares de introducción de datos o de funcionamiento se
adivinan enormes, quizás insalvables.
Con 88 años, el arquitecto trabaja hoy incansable en su estudio de Hastings. Obsesionado con el Framework, ha vuelto a Geddes, donde empezó hace setenta
37 Ibid. VN 85003, pp. 9-15.
Primera formulación de las prioridades de
vivienda en función de la proximidad a los
equipamientos, la tenencia y la modernidad
de la casa para los distintos grupos sociales,
Puerto Rico, 1966.
años. En realidad, nunca lo abandonó, como hemos podido comprobar. Como
Geddes, utiliza y dibuja sin pausa diagramas divididos en cuatro partes. Piensa
gráficamente. Ni por un momento pierde de vista tampoco los grandes problemas
del mundo, los planes para su transformación radical en una “civilización diferente”.
Para el viejo Turner, las alternativas para un planeta cuyo futuro ve más incierto que
en cualquier otro momento de la historia no deberán expresarse nunca en forma
de utopías o de invenciones tecnológicas salvadoras. Tenemos por el contrario
que reestructurar esa civilización diferente a partir de lo que sobreviva del desastre ecológico que se avecina. Lo local no es ya un mundo en desaparición ni un
lejano ideal voluntarista al que aferrarse: es un simple “imperativo de resiliencia”
ante la crisis civilizatoria que nos acecha38. Recapitular experiencias históricas que
se hunden a veces en la noche de los tiempos, ver qué nos dice la experiencia
humana sobre cómo conservar “una relación de supervivencia adecuada con el
resto de la vida”, sobre lo que es auténtico desarrollo sustentable será esencial en
esa vasta empresa de reconstrucción. Cuanto más tiempo sostengamos el business as usual más dura será la caída en la siguiente crisis económica y ecológica.
“Es tiempo de abandonar caminos equivocados y buscar juntos las claves de esa
sustentabilidad en la historia”39. Las buenas experiencias de vivienda y urbanismo
desde abajo, las viejas prácticas comunitarias serán, confía Turner, una segura
orientación en ese sendero ecológico que no debemos esperar más en recorrer.
38 Lewis, Michael, Conaty, Pat, The Resilience
Imperative. Cooperative Transitions to a Steady-State Economy, New Society Publihsers.
Gabriola Island, 2012.
39 VN 850012, pp. 8-12.